Mal humor

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Cada paso que daba era mucho más emocionante que el anterior, significaba estar más cerca de la estación y por ende más cerca de Jumpol. Nadie podía quitarme la gran sonrisa que tenía en la cara y por otro lado, Tay se encontraba igual de emocionando, técnicamente sin él yo no estaría aquí, casi puedo ver el orgullo en sus ojos, pero no podía verlo por mucho tiempo o me tropezaría y no quisiera caerme, no cuando tengo en mis manos las preciosas galletas de chocolate. Veo a lo lejos el lugar donde hace tiempo Jumpol me encerró por una horas y acelero el paso, es temprano así que espero que él esté trabajando adentro o me largo a llorar.

- Te espero aquí.- Me avisa Tay a lo que yo me detengo.

- Oh no, no, no, tú me tienes que acompañar.- Le afirmo.

- No, Gun, no me parece una buena idea ¿qué tal si lo malinterpreta? Tal vez huyas de él y te escondas abrazándome, sé lo cariñoso que eres y lo más probable es que no se vea bien.- Termina de decir y yo lo veo perplejo.

- Pero si yo le voy a regalar algo ¡¿cómo puede malinterpretarlo?! si fácilmente puede pensar que me atrae.- No sé qué clase de persona es Jumpol, pero Tay se ve claramente como mi mejor amigo ¿no? Ahora hasta yo lo dudo.

Luego recuerdo las veces que íbamos de compras y se nos acercaban jovencitas diciéndonos que hacíamos linda pareja. Bueno, puede que en algunos casos parezca mi novio pero eso se debe a la confianza que nos tenemos, no creo que Jumpol piense mal de eso, además, le voy a dejar en claro que yo estoy allí porque me gusta y que no lo voy a dejar ir. Un poco de apoyo moral me servirá. Suspiro y pienso que tal vez esto sea porque Tay no quiere ir, y si no quiere no lo voy a obligar.

- Ve tú, yo te apoyo desde afuera ¿si?- Me dice y le sonrío para tranquilizarlo.

- Vale pero pendiente por si salgo corriendo ¿ok?- él asiente repetidas veces y yo me doy la vuelta, ya es hora.

Camino un poco acelerado y entro a la estación, todo se veía tranquilo y normal, me acerco a la recepción y encuentro a una chica arreglando papeles, se le ve ajetreada pero yo necesito preguntarle con urgencia si puedo ver a Jumpol. Cuando estoy a punto de preguntarle, ella se da cuenta de mi presencia y rápidamente interviene.

- Buenos días, deme un momento que voy a dejar unos documentos en la oficina del jefe, espéreme aquí.- Termina y se aleja con rapidez.

Veo como se va y yo hago un puchero, empezamos mal y eso que no he dicho ni una sola palabra. Mientras desaparece la chica puedo ver que por ese mismo pasillo, en el que se fue, se acerca un oficial y cuando está lo suficientemente cerca lo detallo un poco, se le ve serio, tiene la piel blanca y lo noto un poco pálido, es alto y lleva su uniforme ajustado al igual que Jumpol aquella vez, sonrío y me acerco a él, no lo veo peligroso, puede que sea amable si le hablo con respeto.

- Buenos días señor oficial, ¿me podría ayudar con una cosa?- Se detiene y me ve detalladamente.

- Depende de lo que necesite.- Me responde y trato de identificar en su voz gruesa alguna molestia, pero no la hay.

- Bueno, hace tiempo vine aquí y conocí a un oficial que se llama Jumpol ¿está él aquí?- pregunto suavemente y lo veo fijamente a los ojos.

- Puede ser ¿por qué? ¿Acaso usted tiene algún problema con el oficial Off?- Me reta con la mirada y yo sonrío aún más, así que Off, por lo que veo es el único oficial que se llama Jumpol, muy bien.

- Para nada, solo vine a dejarle un regalo súper delicioso.- Le respondo tranquilamente y veo que baja la guardia cuando se fija en las galletas que traía en mis manos.

- Oh, ese tipo siempre atrae a los más lindos, bien, te diré donde está.- Se detiene y nota mi emoción.- Pero no puedes decirle que fui yo, ahora se encuentra de mal humor y puede que se olvide que soy su mejor amigo por llevarle un desconocido.- Me advierte y yo asiento.

¿Cómo conquistar al oficial Jumpol? - OffGunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora