Sus amigos, por otro lado, trataban de entender que le sucedía. No descansaba, hacía tres postres la vez solo deteniéndose para comerlos, siendo estos su único alimento. En varias ocasiones le fueron a visitar preocupados por su desaparición. Rubén se limitaba a responder sin interés las preguntas de sus amigos y a regalar dulces.
Todos le habían visitado esa semana, todos menos el de ojos morados, quién llevaba encerrado en su isla más tiempo que el hibrido.Los héroes no eran ciegos, podían observar que algo había pasado entre ellos. Si bien se rumoreaba que estos se gustaban, los habitantes lo veían como un simple rumor más que posibilidad.
- ¿Y si de verdad estaban saliendo? Y terminaron, por eso están así – Todos menos el hibrido y el loco de la isla se encontraban reunidos en el ayuntamiento. Trataban de buscar la mejor manera de ayudar a sus compañeros.
- Que va, me da a mí que Vegetta solo está queriendo terminar de construir su isla. Como siempre se queja que no le dejamos hacer nada pues se ha encerrado – El búho jugueteaba con la porra de policía, bajo la atenta mirada del chico del casco.
- Pero... ¿Y Rubius qué? – La porra cayó sobre el pequeño, provocando una vibración molesta en el casco. – Perdona, Alesby.
- Pues estará haciendo el tonto como siempre – El chico rubio se limitó a encogerse de hombros y observar como el pequeño golpeaba al búho.
- No creo que esté haciendo el tonto, Willy... - El castaño frunció el ceño visiblemente preocupado- Rabis no suele comportarse así, ni siquiera cuando está en su modo más estúpido.
- Luzu tiene razón – el mencionado le dedicó una mirada tierna a su compañero, pero este solo soltó un suspiro cansado- Ese calvo es todo lo gilipollas que quieras, pero a este nivel no llega.
- ¿Qué hacemos entonces? – El pelirrojo acariciaba el hombro de su pareja que se encontraba recostado en su pecho.
- Esta situación es un asco, illo- Mangel se acomodó mejor en el sofá y Lolito le abrazó por la cintura.
- Podríamos hablar con ellos, sacarles información...
- Luzu, mi niño. Te quiero y lo sabes, pero esa mierda la llevamos haciendo desde que Vegetta se encerró hace dos semanas.
- Si quisieran contarnos ya lo hubieran hecho. –Todos estaban alterados, deseaban ayudar a sus amigos, pero el nulo conocimiento que tenían de la situación les dificultaba todo. Esa era la quinta reunión de la semana y aún nadie sabía qué hacer, la pasaban teorizando y hablando de posibilidades futuras. Luzu, quién tenía un serio complejo de madre de grupo, apenas dormía.
Sabía que algo pasaba, era obvio que estaban pasando un mal rato y el no poder hacer nada le estaba matando. Era consiente que sus compañeros estaban en igual estado, en especial Mangel y Willy. Ver a sus mejores amigos en tal situación y no tener idea de lo que pasa les había puesto los pelos de punta.
Estaban desesperados.
- Deberíamos encerrarlos. -La voz de Fargan hizo callar a los presentes y este recibió varias miradas enojadas.
- Por si no lo notaste, Sherlock, ya están encerrados.
- Me refiero a encerrarlos juntos. –El búho sonrió notando la curiosidad incrementar y se acomodó en su lugar. – Tendríamos que idear alguna manera de llevarlos al mismo sitio y encerrarlos con varios objetos que a ambos les guste... O les recuerde al otro, al menos.
- ¿Por qué querríamos encerrarlos? –Un estremecimiento recorrió el cuerpo de todos al ver la sonrisa juguetona del moreno.
- Pues, si nuestras sospechas son ciertas, están peleados, por ende, tienen que reconciliarse o nada de lo que hagamos servirá – Pudo notar como Willy mordía su labio enojado, pero su mirada le decía que estaba de acuerdo con sus palabras. –Y como no sabemos que pasó y no tenemos como saberlo, lo mejor es que lo resuelvan ellos.
- ¿Cómo sabemos que funcionará?
- No les dejaremos opción. –Alexby interrumpió al búho, quitándole las palabras de la boca y robando la atención del grupo. –Les dejaríamos una semana encerrados y nos turnaríamos para vigilarles.
- ¿Y cómo planeáis evitar que escapen? ¿Acaso olvidan que Vegetta es un puto dios huyendo?
- Sólo porque se haya escapado de la cárcel no quiere decir que es imposible encerrarlo. –Luzu trató de animar el ambiente y miró mal al rubio. - ¿Quieres dejar tú negativismo, Willy? Es una buena idea.
- ¡Claro! Pero si habláramos de Lolito o Auron. Ni siquiera saben cómo haremos para sacar a Veg de su casa.
El silencio inundó el lugar, volviendo el ambiente pesado.
Por mucho que le doliera a Fargan admitirlo, Willy tenía razón. Encerrar a Vegetta por tanto tiempo era difícil y sacarlo de su isla lo era más. Soltó todo el aire que retenía y se cruzó de brazos molesto.- Sólo hay que decirle que alguien está en peligro.
La voz cortante de Mangel provocó que todos le miraran. Su expresión era seria y sus ojos rojos, el cigarro en su boca dejaba caer sus cenizas al suelo y Lolito le abrazaba por la cintura.
Un escalofrío recorrió a todos los presentes. - ¿Q-qué?
- Eso, mentirle y decir que alguien está en peligro.
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Buen Chico
FanfictionVegetta y Rubius hablaban cada vez menos estos días y sus amigos pensaban que algo malo había pasado. Tan desesperados estaban que Fargan fue la voz de la razón... . . . Contenido no apto para menores de edad Historia erótica de práctica