XV

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Estaba en la casa de Thomas, estaba arreglada, paredes color crema, una alfombra en el centro, con un sillón gris y una pequeña tele, en el sillón hay una mujer rubia y un niñito de pelo negro y ojos castaños le toca el hombro, la mujer no se mueve, el niño vuelve a tocarla y la mujer se para y lo empuja, la mujer me parece conocida, pelo rubio liso, ojos cafés, la veo bien y sé quién es, es Megan, una versión mayor de Megan. Me quedo ahí estática tratando de entender lo que pasa frente a mí, el niño llora y Megan le tira una botella de ron en la cabeza, el niño sangra y veo en sus ojos el miedo de Thomas, es Thomas, cuando era pequeño y yo lloro tratando de calmarme.

-Hey- Dice Jake moviéndome suavemente, aún es de noche, la pieza esta oscura, apenas lo puedo ver, tengo lagrimas en los ojos y estoy sudando- ¿Qué estabas soñando?- Miré a Megan a mi lado, apenas podía distinguir su cara, se veía tranquila y eso me calmaba

-Apenas lo recuerdo- Pero era imposible borrar de mi mente cada detalle de esa pesadilla ¿La madre de Thomas lo tuvo siendo de la edad de Megan?

-Puedes decírmelo cuando se te antoje- Miró unos segundos a mi lado- ¿Qué le pasa a Megan? Logan no deja de preguntar qué es lo que tiene, dice que hoy tenía doctor

-Yo…- No podía mentirle a mi hermano, pero tampoco debía contarle, ella era mi mejor amiga

-Entiendo- Dijo casi leyendo mi mente- Sabes que cualquier cosa estoy aquí, Megan puede ser algo engreída pero me cae bien y bueno la conozco hace tanto, además ahora es novia de Logan

-Anda a dormir Jake- Le dije con voz cansada- Gracias

-Por algo soy tu hermano mayor- Dijo sonriendo- No esperes un beso de buenas noches pequeña

-No lo esperaba – Le dije tirándole una almohada- Hasta mañana

Jake salió, pero yo no logré dormir, había sido mucho para un día, Thomas, Megan, entonces lo recordé, trofeo, Thomas había dicho que era un trofeo ¿Contra Kevin? No, había algo más ahí y yo tenía que averiguarlo. Pero mi mejor amiga me necesitaba, sabía que Logan no se lo tomaría bien, además sabíamos perfectamente lo que Logan pensaba de los embarazos no deseados y ni Megan estaba de acuerdo ni yo la dejaría.

El sol ya había salido por mi ventana, me había pasado toda la noche pensando en esas cosas, no tenía ni idea de que pasaría más adelante, pero de una forma u otra las cosas iban a cambiar.  Megan se veía cansada, tenía ojeras bajo los ojos, la nariz roja de tanto sonarse, por más que quisiera consolarla sabía que era lo que la tenía así, estábamos en ultimo año, el bebé nacería en vacaciones, cuando ella ya hubiera salido, el dinero no era problema, su papá le había dejado mucho y saliendo del colegio le darían su herencia, el problema era Logan y su insensibilidad con el tema del embarazo no planificado.

-¿Qué opinan del aborto?- Preguntó la profesora, la mayoría hablaron de que estaba mal, que no lo apoyaban, de hecho la miss supuso que nadie se oponía. Había pasado el año pasado, nos habían hecho un taller de embarazo y anticonceptivos. Para estar segura de que nadie lo apoyaba la miss dijo- Que levante la mano el que esté a favor

-Yo- Logan levantó la mano serio, le daba igual lo que pensaran de su opinión, aunque varias chicas le hubieran abucheado

-Denos su opinión señor Read- La señora Rose tenía unos 50, pelo rubio opaco, ojos azules y siempre llevaba unos lentes rojos

-Creo que debería poderse, creo que arruina el futuro de un adolescente, yo creo que mis compañeros dicen eso porque no creen que les vaya a pasar, pero en el momento será la mejor alternativa

-¿Entonces si usted dejara embarazada a una chica?...- La señora lo miraba inexpresiva, no podía reclamarle por  tener una opinión

-Yo le diría que abortara- Lo dijo tranquilo, sin culpa, no estaba serio, Logan nunca era serio, bueno tal vez casi nunca

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