Parecidos, Opuestos.

Capitulo 7

Seguía sin creerlo posible. "No es posible, no es posible que mi vida puedíera basarse en una mentira" se repetía una y otra vez en la cabeza.

El chico con el cabello rizado, la conteplaba de reojo, no tenía ni idea que podría estar pasando por la mente de la chica sentada a su lado, o único que es consiente es que ella es linda, empezando por su hermosa cabellera negra y rizada, hermosa, pero ni si quiera le ha querido decir su nombre.

-Oye, creo que no tienes ganas de hablar por lo que veo, chica "N"- comenta el de los ojos verdes.

-¿No tienes cosas más importantes que hacer?- contesta secamente.

-No, la verdad no.

-Entonces, ve busca algo en que entretenerte, y dejame en paz.- gruñe.

-A lo mejor haga eso... 

-¡Pues que bien! Adiós.- lo voltea a ver un instante y luego vuelve su vista a la resbaladilla que esta justo en frente del columpio.

-Ah, ¿Ya me corres? ¿Tan pronto?- ríe por lo bajo.

Natalia se para del columpio y suspira exasperada, se frota la cara con las manos y se vuelve al chico rizado, al chico ojos verdes, al chico "H", lo mira con furiosos, penetrantes de color azul celeste. Sus miradas se cruzan, una mirada azul celeste en contra con una mirada verde esperalda. Azul contra verde. Nadie habla. Hasta que es ella la que rompe el silencio entre los dos.

-Bien, como veo que tu no te vas, creo que yo me tengo que ir.- rota noventa grados sobre su propio eje y camino con pasos decididos para salir de ese parque.

De repente algo, o más bien alguien la detiene de la mano, demaciado pequeña como para ser del chico de los rizos castaños. Natalia lo nota al instantey se vuelve para ver de quien es la pequeña mano, al parecer es de una niña pequeña como de unos 2 o 3 años. Natalia frunce el ceño con un poco de confución.

-Dicupe.- dice la pequeña.- Natadia.

-¿Si? ¿Quién eres?

-Mi nome es Bitany.

-Bien...- en ese momento se acerca Scott junto a un niño.

-Britany, ¿Como se llama tu papi?

-Papá.

-Bien.- se arrodilla a la altura de la niña.- Pequeña, dime, esos niños que vienen ahí ¿Son tus hermanos?

-Chi.

-Esta bien, bonita, ve diles a tus hermanos, que le digan a ti papi, que Natalia, quiere irse a casa.

-Ben.- sonrié y se acerca a sus hermanos.

Natalia se da la vuelta para continuar y alejarse más cuadras de la casa de su padre y de su nueva familia, pero esta vez, el mayor de los Miller se acerca a ella a paso decidido.

-Natalia.- la llama alzando la voz pero sin gritar.

-¿Qué quieres?- dice pero sin para de caminar. Scott la alcanza, y la toma del brazo.

-Espera, solo que te quiero decir que mi papá... tu padre... o como quieras llamarlo quiere que vuelvas a casa.

-Eso es lo que le he dicho a tu hermana, quiero volver a los Ángeles.- contesta mirando a todas partes menos a él.

-Ah, que bien...

-¿Qué quieres decir con eso?

-Que no se lo que pretendes, te crees una chica muy importante. Mira ¿Crees que a mi no me sorprendió que la persona que creía que era mi madre no lo es? No eres la única en esta confusión, papá jamás lo mencionó, pero lo tengo que aceptar, es la realidad. Pero ahora me doy cuenta que eres una niña berrinchuda, que se va a dejar llevar con esto solo porque se entero de que su papá siguió con su vida.

-¡Eso no es verdad!

-¡¿A no?! Entonces dime ¿Qué es lo que estas haciendo en este momento?- se da la vuelta.- y ya cuando te des cuenta de que tengo razón, verás que eres un egoísta. Adiós Natalia, que tengas un lindo viaje a Los Ángeles.- y se aleja sin decir más y deja a Natalia parada a la mitad del parque pensando en lo que acaba de decir.

En la casa de los Miller, estan los más pequeños jugando en el piso del living, el mayor se encerró en su habitación desde que volvieron de la búsqueda de Natalia. El señor Miller, esta hablando con la señora Miller, al parecer esta preocupado de que su hija no ha regresado desde que salió. En eso tocan la puerta, y abre el señor de la casa, la muchacha que esta al otro lado de la puerta se trata de Natalia.

-Papá...- suspira.- ¿Puedo hablar contigo a solas?

-Claro, hija.- su cara de preocupación se transforma en alivio. Salen de la casa, y se cierra la puerta detrás de si.

-¿Quiéro saber por qué nunca lo mencionaron?

-¿Qué?

-Que tenía un hermano... un gemelo...

-No se, hija, el divorsio se alargo... tú y Scott se conocieron, claro, tenían 2 o 3 años, pero fue cuando lo decidimos lo del divorsio, y creo que era mejor para los dos... para ti y Stcott no recordarse, así que... fue cuando lo decidimos yo y tu madre, que el se viniese conmigo y te quedaras con ella.

-Entiendo.- sus ojos se le cristalizaron.- no es fácil digerir esto.- rodó una lagrima por su mejilla, su padre la limpió con su pukgar.

-Lo siento Natty.

-Quiero ir a mi habitación.

-Bien.

Entraron a la casa, le indico donde estaba. ella se fue directo y sin interrupciones a su nueva habitación, cerró la puerta detrás de si, y se arrojo, literalmente a la cama. Tantos sentimientos que había acumulado ese día, y también de ese terrible día en el que creyó que era el inicio del divorsio, su vida desde 3 o 2 en adelante vivió en una mentira, una mentira de que era hija unica, en la que creía que vivía en una familia, no era su familia completa en realidad. Un golpe bajo, eso fue para ella, de ser hija unica a tener tres hermanos más de los que esperaba. Todo le da vueltas en la cabeza. No lo puede creer, pero Scott tiene razón, ella esta siendo una niña berrinchuda, tal vez sus padres tuvieron la culpa de que de repente en todo lo que creía le haya explotado en la cara como una bomba, pero no se iba a dejar derribar por todo eso, ella iba a seguir adelante con su vida e iba a intentar darle una oportunidad a sus... hermanos.

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Bien aquí otro capitulo, ya tenía mucho que no seguía.

Espero que les guste.

Gracias por leer.

Besos

-Jo