Buscando un refugio [SasuSaku]

01. Escape

Boton, 9:45pm.

Mis pies descalzos tocaban el suelo con cada paso que daba, sentía el asfalto debajo de ellos haciéndome arder a causa de la velocidad que corría, mis manos estaban manchadas de sangre y apenas se hacían visible en la oscuridad de la noche, mi pecho subia y bajaba pero sentía que no podía respirar. Nunca pensé que llegaría a asesinar a una persona, quitarle la vida a alguien.

Mi cabello se pegaba en mi rostro y mis lágrimas caían sin cesar mientras seguía corriendo, sólo sentía frío, como si la noche supiera lo que había hecho acompañándolo con el silencio. Quería gritar pero no me salía voz

Quería que está pesadilla pasará...

Quería despertar.

Debía llegar donde la única persona en quien podría confiar, mi vecina Evelin quien me recordaba a mi madre, tan cariñosa y protectora, era a ella a quien le contaba mis penas con suma confianza, podría ser un libro abierto para ella, me recibía con una taza de té y unos pañuelos porque sabía que terminaríamos llorando contándole mis desgracias, aquellas que llegaron ese día que puse mi nombre en un papel que me ataría toda la vida.

Crucé la esquina de la calle desolada, con una mano sostenía una bolsa con poca ropa, una camisa y un short fue lo que pude alcanzar, mis nervios me nublaron la mente, sumisa de mi destino. Llegué a la casa que hasta el momento se había convertido en mi refugio. Me refugiaba de él.

Toque sin cesar la puerta, haciendo el mayor ruido posible, no me importaba si los demás vecinos escuchaban, seguramente se habían despertado con el alboroto anterior, sentía miedo, en todas mi vida nunca pensé que terminaría en este estado.

-¡Evelin! ¡Por favor, abre la puerta!-mi llanto mezclado con agonía, esperanzada en que mis gritos pudieran despertarla-¡Evelin!-y como si fuera música para mis oídos escuché unos pasos acercarse a la puerta, Evelin miro por la rejilla de la puerta y vi sus ojos agrandarse al verme ensangrentada.

Metió las llaves en la cerradura abriendo rápidamente la puerta-¡Sakura! Cariño ¿Qué sucedió?-Me abrazó con todas sus fuerzas.

Estaba tan ahogada en mi propio llanto que no me dejaba articular palabras-Yo no... De verdad, no lo sé-Cada sílaba me costaba, no podía respirar, tenía miedo. Pero ella me entendió, en dos años de amistad, más allá que eso, me conocía y en un instante supo lo que había hecho.

-Entra rápido, tienes que salir de aquí-En esa frase pude notar determinación, me sentí aliviada al tenerla de apoyo ya que ella sabía la historia detrás de todo.

Entre lo más rápido que pude, mis náuseas ocasionaron que corriera hacia el baño, puse mis manos alrededor del inodoro y expulse lo poco que había comido de la cena, detrás de mi sentí como Evelin recogía mi cabello para que no se ensuciara.

-Tienes que salir de aquí, pronto-Dijo, me dejé caer en su hombro-Ya sabes lo que tienes que hacer-La mire al rostro, sus ojos azules y su cabello blanco mostraron una mirada de nostalgia y valentía, quería que me sintiera segura, y lo estaba logrando.

Afirme con la cabeza.

Me puse de pie y comencé a buscar unas tijeras, ella salió del baño, seguramente fué a prepararme un bolso con algo de comida, sabía que esto llegaría a pasar de este modo u otro mucho peor, abrí el pequeño armario del baño y encontré las tijeras, las tomé con las manos temblando, los mechones rosados caían poco a poco en el lavado.

Siempre mi mejor amiga me decía que me lo cuidara y lo mantuviera sano ya que largo me quedaba mejor, le hice caso dejándomelo crecer hasta el final de mi espalda. Hasta ahora.