JUST ME [AU - Anne with an e]

Capítulo 2

CAPÍTULO II

Realmente es increíble la mala suerte que me persigue durante mi vida. La clase terminó. Furiosa tomé mis libros y cuadernos con intención de ir a reclamar un cambio de compañero, ese chico no me agradaba en lo absoluto. Competir con él en clase era una cosa, pero competir con él y encima apuntar hacia un mismo lado, claramente no pegaba. Mientras escuchaba el golpeteo apresurado de mis zapatos sobre el suelo de madera del salón de clases, alguien se apareció de golpe frente a mí haciéndome frenar de sopetón.

- Hola -murmuró él extendiendo su mano en forma de saludo-, creo que ya nos conocíamos, pero dudo que te acuerdes de mí. Soy Gilbert. Nos vimos en la cafetería esta mañana, ¿me recuerdas? -frunció su ceño y rodeé los ojos-.

- Sí, Gilbert. Sé quién eres. -Hablé sin gesticular y apretando los dientes-. Justo iba a pedir camb... -no terminé la oración que él ya me estaba interrumpiendo. ¿Se podía ser más irrespetuoso?

- Solo quería decirte que estoy emocionado por trabajar contigo. Te he visto participar en clase y tienes un pensamiento muy moderno, quisiera saber más de ti... si me lo permites. -Suspiré rodando los ojos-.

¿Qué se suponía que iba a decir? ¿Decirle que no quería estar con él porque ya lo odiaba desde el momento cero? Me estaba mirando con esos estúpidos ojos de cachorro ilusionado y definitivamente lo estaba detestando con cada segundo que pasaba.

Maldito Gilbert Blythe.

- De acuerdo. -Hablé ya harta de la situación-. Tengo que irme.

- Claro. -Se hizo a un lado para que continuara caminando-. Entonces... -se colocó a la par mía y salimos del salón caminando juntos. ¿Qué quería? - ¿nos pasamos nuestros números o qué? -frené de golpe y lo miré fijamente-.

- Escúchame bien, Blythe. Que estemos en un mismo grupo no nos hace amigos. Nos reuniremos luego de clases y nuestra relación terminará ahí. Ni sueñes con que tendrás mi número. -Hablé firme mientras el movía sus cejas de acuerdo con sus expresiones de sorpresa-. Nos vemos mañana -miré sus ojos, luego su boca y volví rápidamente hacia sus ojos-, Blythe.

Saqué mi celular del bolsillo de mi saco y le escribí un mensaje a Diana.

"No sabes lo que me acaba de pasar. ¿Nos vemos en la cafetería para el almuerzo?"

"Claro. Mis clases terminan a la 1:15pm. Te espero allí."

Entré a mi próxima lectura que era gramática y presté atención durante toda la clase a pesar de que me costaba muchísimo seguir el ritmo del profesor. Entendía todo lo que él decía, pero iba muy rápido y había demasiadas cosas que las daba por sentado. Además, no había nadie que conociera en esta clase y eso me fastidiaba un poco, y aunque me apenaba un poco esta situación de sentir que fracasaba ya desde un inicio, convertía ese sentimiento en combustible para crecer un poco más.

Compré algo para almorzar y como el día estaba con un sol muy bello le envié un texto a Diana para esperarla en el patio. Elegí el árbol con el tronco más ancho y reposé mi espalda sobre él dejándome caer hasta tocar el suelo y sentarme. Dejé mi almuerzo a un lado y abrí mi bolso para sacar un libro. Muchas veces la universidad demanda tanto tiempo de estudio que no deja espacio para que uno lleve a cabo ciertos hobbies y esto claramente me estaba sucediendo. Marilla me había mandado por correo un libro con una portada que tenía una mariposa llena de colores, me escribió en la tapa que ese dibujo le había hecho recordar a mí. Eso me lleno un poquito el alma y me intensificó las ganas de hacerme tiempo libre para poder leerlo, con lo cual me dispuse a leer un par de páginas hasta que llegara Diana.