Tᴡᴇʟᴠᴇ Kɪʟʟᴇʀs. ᶻᵒᵈⁱᵃᶜ

ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 10

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"Lα lιвєятα∂ ηυη¢α єs ∂α∂α; sιємρяє єs gαηα∂α" Asa Philip Randolph.

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De un momento a otro piscis pudo desatarse, aquellos dos habían salido por un momento, era una gran posibilidad de poder salir de ahí, pero estaba ignorando todas sus heridas.

Aún con una pierna casi rota logró caminar hasta la única salida que había.

La ventana...

Decidió comenzar, tirando desde la orilla, cruzando una pierna tras otra, le habían dado una oportunidad, parecía que había una discusión entre los otros dos, era un buen momento, el mejor.

Hasta que...

Se escuchó el vaso que se encontraba en la mesa de la ventana, caer...

Intentó salir lo más rápido que podía y su camiseta se rasgó, dándole tiempo a la puerta para que se abriera y entrara de nuevo aquella persona.

- ¿A dónde crees que vas, estúpida?- Soltó una pequeña risa.

- ¿Ves? Es tu culpa. - El del cigarrillo aún le tiraba la culpa al otro, siempre tenían ese tipo de peleas.

- ¡Cállate! - El otro se había tornado agresivo.

- ¡Aquí yo digo eso! - Intentó contestarle de manera amenazante.

Pero, no se fijó de su compañero, quién rápidamente colocó el cuchillo junto a su cuello.

- Siéntate... - Ordenó, y el otro asintió.

Quitó el arma del cuello, pero sin dejar de mirarlo, para que no hiciera ningún movimiento ajeno.

Se acercó a Piscis.- Linda dama, usted debería estar sentada en ese lugar -señaló la silla donde anteriormente ella se encontraba.

Acercó el arma hasta Piscis. - ¿Qué hacía aquí?

- Quería aire fresco. - Piscis, ya se había resignado al destino que eligió, y comenzó a reír de la nada.

Claramente se burlaba de la situación en la que se encontraba, ya sabía que de esto no se podía salvar.

La otra persona, quien la amenazaba le siguió, comenzó a reir de igual manera.

- Bien, te daré 10 minutos. - Sonrió de lado y se sentó.

Piscis, sin saber la trampa lo intentó.

Y cuando solo quedaban segundos...

10...

9...

8...

7...

6...

5...

A éste paso, solo logró llegar a unos cuantos metros de aquella cabaña, al escuchar el número cuatro, comenzó a lagrimar, sabía que no tenía oportunidad.

4...

3...

2...

- ¡Hey! Piscis, ¿en una cuenta regresiva luego del dos que va?

- Uno...- Respondió y cerró los ojos.