Jaspe.

Caza.

Después de aquel pequeño susto el juego transcurrió normal. El equipo de Jasper iba una carrera por delante, sin embargo, Edward se las apañaba para conseguir outs.

Adara sonrió con ternura viendo como Jasper y Emmett jugaban a ratos, empujándose y golpeándose sin hacerse daño. Lucia tan relajado que deseó poder verlo así muchísimas veces más. Solamente la voz de Rosalie logró que Adara dejara de prestarle atención a los vampiros.

—Siempre están jugando. Emmett es como un niño pequeño y Jasper es el único que le sigue el ritmo.

—Emmett es gigante, ¿cómo...? —se aventuró a preguntar, Rosalie nunca había mostrado interés en conversar con ella hasta ese momento.

—¿Cómo es que puede contra él? No necesita tener la misma complexión, Jasper es un excelente peleador. Eso es lo que saca de quicio a Emmett. —Adara trató de reprimir la sorpresa cuando Rosalie soltó una pequeña y encantadora risita. La vampira no dejó pasar el gesto y sonrió con orgullo por la admiración de Adara. —Ya sabes: "es muy delgado, no debería ser competencia para mí".

Adara regresó la vista a Jasper y Emmett. El rubio esquivaba con agilidad los sutiles golpes del más grande.

El bateo de Carlisle y el espectáculo que Jasper y Emmett estaban dando para Adara se vieron interrumpidos por Alice, quien soltó un grito sofocado. Adara volteó a verla con preocupación, ¿qué podía asustar a la vampira?

Edward y Alice compartieron miradas desde lejos. Jasper se acercó corriendo a Alice. Ella al instante le susurró algo que hizo cambiar el semblante del rubio.

Jasper rápidamente corrió a las mellizas, tomó a Adara de la mano y a Bella por la muñeca, haciéndolas caminar al jeep. En un segundo Edward los alcanzó, Jasper soltó a ambas y caminó con intención de ponerse al frente del grupo que los Cullen habían formado, Edward las tomó igual que había hecho el rubio -a su novia de la mano y la otra chica por la muñeca-, aunque a diferencia de la primera vez, Adara puso una leve resistencia, preocupada por lo que podría estar pasando, era obvio que algo sabían los Cullen que las Swan ignoraban y estaban preocupados. Adara sintió nauseas.

—Jazz. —susurró tratando de alcanzar la mano del rubio.

—Tranquila. Has lo que te digan. —susurró también, besando la sien de la chica.

Edward tiró cuidadosamente de la muñeca de Adara cuando vio a Jasper alejarse de ella.

—Debemos irnos. —comenzó a caminar al jeep.

—Ya no hay tiempo. —dijo Carlisle, haciendo a Edward detener su paso.

—Suéltate el cabello. —le dijo a Bella, quien a diferencia de su hermana tenía el cabello amarrado en una coleta. Al instante obedeció. —Abróchatela. —señaló el jersey de Jasper. Adara también obedeció rápidamente.

—Como si eso ayudara. Puedo olerlas desde el otro lado del campo.

Jasper volteo a ver a sus espaldas, donde Edward veía atentamente a las mellizas. Por más que odiara admitirlo Rose tenía razón, un jersey y una gorra no disfrazarían el olor de ambas. Comenzó a idear un montón de planes, todos casi iguales.

"¿Y si Edward huye? Es rápido, fácilmente podrá alejarlas. Yo me quedare aquí, evitando que lo sigan. Son tres, no será problema vencerlos." Pensó con la esperanza de que su "hermano" hubiera puesto atención al plan y aunque así fue, decidió no hacer nada. No es que no confiara en las habilidades de pelea de Jasper, pero no le parecía muy sensato huir después de que Carlisle no los dejara.

—Sigamos jugando. —Jasper observó con incredulidad a Carlisle. —Alice dijo que solo sentían curiosidad.

Esme se paró delante de Bella, tomó un bate y se puso en posición de bateo. Carlisle intercambió el lugar con Alice, quien corrió a Adara y la guio a otra parte del campo.