La Barcaza en el Rio Bernum

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Lejos del puerto, la ciudad de Vernes era completamente opuesta. Reducidas calles de ladrillos eran un laberinto, sobre vistas por balcones que casi se tocaban.

Linternas y luz de luna eran raras, y por algunos callejones no había ninguna de las dos. Jungkook agradecia tener a Coco. Recuperado del susto, la "rata de callejón" actuaba como un perro de caza. Trotaba por los corredores de la ciudad, esquivando charcos que apestan a desechos y agachándose por las líneas de lavado, con mucha experiencia.

— Ese es el cuadrante mayormente solo para los barcos, y por ahi es el dormitorio para los trabajadores del puerto. — Coco señalaba hacia un edificio cerca del muelle con tres historias de alto, una puerta, y pocas ventanas. — Casi todos los hombres en esta sección viven ahí o en el edificio siguiente al final. Mucho de aqui es solamente navegacion. Ahora, por ahi, en lo alto de la colina, lo ve? Es la ciudadela.

Jungkook levantó su cabeza y pudo ver la silueta de un fuerte iluminado por antorchas.

— No es realmente un castillo, más como una casa de cuentas para comerciantes y mercaderes. Las murallas tienen que ser altas y gruesas para todo el oro que tienen ahí. Es donde todo el oro del mar va. Todo lo demás va en cuestabajo, pero el oro cuesta arriba.

Coco rodeo una cubeta y pudo ver dos ratas tamaño gatos buscando una obscuridad más profunda. Pasando el marco de una puerta, Jungkook se dio cuenta que una pila de ropa vieja era en realidad un hombre viejo, este nunca se movio, ni siquiera para parpadear. Jungkook solamente lo pudo diferenciar cuando la pipa que tenía en la boca brillo rojizo.

— Es una sucia ciudad, — Coco llamó su atención de nuevo. — Estoy encantado de que nos vamos. Muchos forasteros por aqui, tambien. Muchos del este, muchos incluso llegaron contigo. Gente rara, los Calis. Sus mujeres practican la magia negra y cuentan fortunas, pero yo digo que es mejor no saber mucho sobre lo que te depara. No nos tendremos que preocupar mucho sobre esto en el Norte. En Warric, queman brujas en el invierno para mantenerse calientes. Al menos eso es lo que he escuchado. — Coco se detuvo abruptamente y se giró. — Cual es su nombre?

— Finalmente decidistes preguntar, eh? — Jungkook soltó una carcajada.

— Necesito saberlo si quiero reservar su pasaje.

— Puedo yo mismo encargarme de eso. Asumiendo, claro esta, que si me estas guiando hacia una barcaza y no solamente a una cornisa oscura donde me golpearas la cabeza y harás un mejor trabajo robandome.

Coco perecio herido.

— Nunca haria tal cosa. Cree que soy tan tonto? Primero, he visto lo que le puede hacer a alguien que intenta "golpearle la cabeza". Segundo, ya hemos pasado cornisas perfectas para eso. — Coco ensanchó su sonrisa, la que Jungkook pensó que era parte malicia, parte orgullo, y dos parte estoy-simplemente-feliz-de- estar- vivo. No podria estar mas de acuerdo. Además no recordaba la última vez que se sintió como Coco se veía ahora.

El hombre de la pandilla tenía razón. Coco podía ser cuatro o cinco años menor que Jungkook. Cinco, penso el. Tiene cinco años menos que yo. El es yo antes de que me fuera. Sonreía igual que el antes? Se preguntó cuánto tiempo tenía Coco de andar solo y si tendria esa sonrisa en cinco años.

— Jungkook. Jeon Jungkook. — extendio su mano. El chico asintio.

— Un buen nombre. Muy bueno. Mejor que Coco-pero entonces qué nombre no lo es?

— Tu madre te nombro asi?

— Oh, definitivamente. Se rumorea que fue concebido y nacido en la misma caja de cocos. Cómo puede alguien negar tal legenda? Aunque no sea cierto, yo creo que deberia serlo.

Tempest RiderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora