Phoenix Black

821 35 4
                                    

Una jovencita corría por su casa con dos cartas recién llegadas en la mano ¿Sería suficiente esconderlas debajo de los cojines? ¿Quizá debajo del sofá? No, no, si su madre lo intentaba, al primer encantamiento, tendría esas cartas. Corrió a su habitación, miró locamente a todos lados, se oían unos pasos afuera, corrió a su sillón de lectura y ocultó las cartas debajo del cojín, agarró su libro y saltó sobre su cama, fingiendo leer a tiempo por que su hermano ya había entrado, con su usual forma de parecer un cohete cada vez que estaba emocionado.

- Kreacher estaba dándole de comer a dos lechuzas de Hogwarts

Kreacher nunca la delataba, era algo bueno, pero prefería no arriesgarse y dejar que el elfo no supiera donde estaban las cartas, odiaría que su madre y padre castigaran a su querido elfito.

- ¿Ah sí? - dijo con indiferencia, sin salir la vista de su libro - No me he dado cuenta, estaba leyendo mi novela. Mr Darcy ha llegado al hospedaje de Elizabeth.

- ¿Me estás hablando en serio? - dijo saltando sobre ella, bajando su libro unos centímetros para verla a los ojos - ¿No estás emocionada? ¿En serio? Ya te has leído ese libro mil veces, sabes como termina y las líneas de memoria

- Y si aun así lo sigo leyendo es porque lo amo. No te estreses, Sirius, tarde o temprano llegarán, y, si no, estudiaremos en casa.

- En Hogwarts encontraremos magos de nuestra edad y... - dice negando con la cabeza, retrocediendo a sentarse sobre el sillón de lectura.

Sirius cae sobre el sillón. Debido a que cualquiera de los Black podría distinguir un guisante debajo de 30 colchones, sintió las hojas dobladas.

- ¿Ya le preguntaste a mamá o a papá?

- Phoenix... - dice blandiendo las cartas, cartas que Phoenix no había visto que él había sacado de debajo del cojín por mirar su libro - Me parece que mamá y papá no saben donde están

- Te lo puedo explicar - dijo esta rápidamente

- Me gustaría que lo hicieras

- Tengo miedo

- ¿De?

- De que hagas más amigos en Hogwarts y te olvides de mi, Sirius, no quiero que nos separen

- No nos ha separado nada, Phoenix - dice con ternura, sentándose a su lado y abrazándola - Te quiero, hermanita, siempre voy a estar ahí para ti, así quedemos en diferentes casas

- ¿De qué hablas? - su cabello se tornó un poco más claro, como un gris muy oscuro, casi imperceptible - Es imposible, los Black siempre hemos ido a slytherin

- Vamos a darle las cartas a mamá y papá - dice rápidamente

- Sí - dice algo confusa de la respuesta de su hermano

Phoenix BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora