CAPITULO 17: VIEJAS HERIDAS

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Todas la personas hemos pasados por situaciones incomodas, a veces unas mas graves que otras, para Catra seguramente en la situación en la que se encontraba la clasificaría como una de las mas grandes escenas incomodas de su vida, tanto ella, Double, su madre y para sorpresa de ella Adora se encontraban cenando juntos, la razón por la cual la rubia les hacía compañía en la cena era por que nuevamente la madre de la morena la había invitado, solo que en esta ocasión había aceptado gustosamente, todo esto sonaría como algo normal, sin embargo, la razón por la cual la morena se sentía incomoda era porque podía sentir como la rubia parecía matarla con la mirada, desde que llego a su hogar pudo notar esa aura de hostilidad que tenía la rubia

- ¿Qué tal esta la lasaña adora? – la señora Weaver se dirigía amablemente a la mencionada

-muy deliciosa señora Weaver, podría decir que es la mejor que eh probado- dándole una sonrisa amistosa a la mujer

Al escuchar tal cumplido la mencionada soltó una pequeña risa de felicidad

-me alegra saberlo- desvía la mirada notando que su hija apenas había tocado su comida junto con un rostro muy tenso- hija ¿ocurre algo? -

- ¿ah?... este nada... solo- levantando un poco la mirada notando como Adora seguía mirándola- re-recorde que aún tengo tarea- el nerviosismo de la morena se podía notar a kilómetros

Double al ver la escena y al notar como Adora miraba con recelo a su prima no pudo evitar sonreír con cierta malicia, al parecer su día de diversión aun no concluía

-es eso o aun te acuerdas del chico lindo que te tiraba ojitos en la tienda o ¿me equivoco? – la mirada malévola se hizo presente nuevamente en Double disfrutando de su asiento en primera fila del magnífico espectáculo que tenia

Tanto Adora como la señora Weaver al escuchar tal cosa cambiaron su semblante, la madre de la morena ahora se veía muy seria, por su parte Adora ya de por si se encontraba molesta y ahora estaba luchando consigo misma para controlarse, lo único que compartían era que miraban a Catra con tal intensidad que podrían petrificar a la pobre chica, Double solo se limitaba a disfrutar de su "entretenimiento en vivo" con una sonrisa traviesa

- ¡Double eso... eso nunca paso ¡- Catra se veía alterada por al malentendido que podría provocar

-cariño no seas modesta, con el cambio de look que te di eras la sensación de todo el lugar- alzando un poco el pecho en señal de orgullo por lo que hizo

-eso no es correcto Double, Catra aun no esta en edad para eso- el tono de voz de la mujer era severo

-hay no diga eso tía, ya es momento que mi amada prima ya traiga a alguien a la casa, ¿no crees Adora? – la manera que miraba a la rubia demostraba que quería provocarla

- "agradece que eres familiar de Catra, porque te estaría rompiendo los putos dientes maldito imbécil"- mientras daba una de las mejores sonrisa fingidas que había dado en su vida- yo creo que la señora Weaver tiene razón, además Catra es representante de su grupo en la escuela así que no crea que sea lo mejor en estos momentos- mientras decía eso, debajo de la mesa con una de sus manos libre, se estaba enterrando las uñas en la pierna como método de control y evitar que hiciera algo inapropiado o estúpido

-no sean tan negativas- volviendo a mirar a su prima- si quieres te presento unos amigos y no es por presumir, pero son uuufff, guapísimos- decía mientras hacia una señal de ok con la mano

Adora se estaban acercando a sus límites, el deseo de golpear a Double hasta cansarse se volvía mas grande con cada palabra que decía, la idea del primo de Catra de conseguirle pareja le enfurecía como nada en este mundo, quería gritar que ella era solamente suya, pero fue en ese momento que se dio cuanta de lo que está pensando

ERES SOLO MIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora