—VENUS— Timothée se tiro arriba de mi mientras le seguía gritando mi nombre.—YA CÁLLATE NO SE COMO TÚ GARGANTA NO SE CANSA—
—Apúrate sacó de papas que ya me tengo que ir— se fue mientras me dio un zape y yo le tiré con una almohada.
Al terminar de cambiarme cuando salí de mi habitación Timothée estaba con una caja y me dijo que lo ayudara para subirlas al carro por que esas cajas las llevaríamos al aeropuerto. Cuando llevábamos sus cosas mamá y papá estaban platicando con los vecinos y nos miraron y nos saludaron los dos hicimos un asentimiento por qué no podíamos con las manos. Intentamos que las cajas y las maletas no quitaran mucho espacio para nosotros cuatro y por suerte así fue.
Ya íbamos en camino al aeropuerto y todos estábamos en silencio, Timothée dormía mientras yo solo veía el camino por la ventana. Todavía faltaba dos horas para que Timothée se fuera pero queríamos asegurarnos que no llegara tarde al vuelo al llegar lo desperté de un manotazo en la frente y el me jalo mi trenza haciendo que tuviéramos una mini pelea y a lo último nos sacáramos la lengua. Bajamos sus cosas para documentarlas y las personas nos miraban raro por tantas cosas que traíamos. Al ingresar al aeropuerto había demasiada gente y tuvimos que caminar de un extremo a otro para la aerolínea donde Timothée iba a irse. Al llegar tuvimos que hacer 10 minutos de línea mientras seguíamos cargando con las cajas y maletas; Mi vista se posó en un carrito con ruedas y aproveché la oportunidad para decirle a mi familia que podíamos dejar las cajas ahí a lo que ellos me hicieron caso y fui por el carrito y papá y yo pusimos las cajas y las maletas mientras que mamá y Timothée estaban documentando.
—Al parecer hay un problema.— dijo mamá y timmy llevaba cargando unos papeles.
—¿Que pasa?— dijo papá mientras se cruzaba de brazos mirando a mamá.
—El máximo de cajas que puede llevar son dos y el lleva tres así que tendremos que hacer espacio o se quedará una caja con nosotros.—
—¿Hijo que vas hacer?.— papá poso si mirada en el castaño y el nombrado rascó su nuca pensando.
—Creo que puedo hacer espacio. En una caja llevo solo libros así que los puedo meter en mi maleta y mochila para que lleve solo dos cajas.—
Hicimos lo que el dijo y estábamos en las sillas donde puedes descansar y abrimos su maleta pero cuando la abrió salió volando unos calzones y calcetines y fue imposible que no soltara una carcajada, las personas que pasaron en el trágico momento también se rieron y Timmy lo recogió mientras su cara estaba roja y agachaba la mirada.
—Ya cállate y ayúdame.— espeto avergonzado.
Deje de reírme poco a poco y seguíamos haciendo nuestro trabajo con los libros pero hubo otro problema. Sobraban cinco libros por que la mochila y la maleta parecían apunto de explotar y las cajas estaban llenas.
—Entonces ¿estos libros nos los quedaremos tengo entendido?.— mamá dijo mientras se levantaba del piso y cargaba consigo los libros que habían sobrado.
—Así parece, Venus...—
—No.—
—Ni siquiera sabías que iba a decir.— me apunto.
—Claro que se me ibas a decir que cuidara tus libros y no Timothée la última vez que te los cuide me reclamaste como dos horas por qué uno de tus libros no estaba acomodado como debería.—
—Te lo prometo que ya no te voy a reclamar sobre mis libros.—
—Júralo.—le apunté con mi dedo
—Te lo prometo.— siguió diciendo
—Júralo.—
—Agh ¡está bien! te lo juro que ya no te reclamare sobre mis libros, pero cuídalos co....—
—Ni se te ocurra.—
—Confío en tu.— me miro y se fue con papá.
Mamá y yo fuimos a comprar un bocadillo en una tienda para matar el tiempo. Salimos con jugos y panecitos cuando el altavoz se escuchó por el aeropuerto diciendo que el vuelo de Timothée ya saldría en 30 minutos lo cual se refería a que ya debemos despedirnos de el.
Timothée tenía el carrito y se despedía de papá y mamá junto conmigo llegamos con ellos y mamá abrazo muy fuerte a Timothée mientras le decía que se cuidara mucho y que lo esperábamos pronto. Ahora era mi turno y no estaba preparada a decir verdad. Estás vacaciones de navidad pasaron muchas cosas tanto buenas como malas, nos dimos un abrazo que duró mucho y me cargo mientras daba vueltas y los dos reíamos, no tenía ni idea de cuanto lo extrañaría pero acepté que esa oferta que le dio su escuela era buena y se la merecía. Los dos sollozábamos en los hombros de ambos y el abrazo cada vez lo hacíamos más fuerte. Duramos unos minutos más así y me bajo y nos separamos. Limpio mis lagrimas mientras que yo hice lo mismo y me dio un beso en mi cabeza.
—Cada día que te vea te diré lo orgulloso que estoy de ti y lo fuerte que eres por la situación en la que pasaste sabemos muy bien los dos que no queremos separarnos pero tenemos que hacerlo en este momento, volveré pronto lo prometo y te llevaré a Londres conmigo para que conozcas todo ahí. Eres mi hermanita y perdón si a veces soy insoportable pero así me amas y lo sabes, no dejes que nadie apague tu luz que tienes y pégales una patada a los que te molesten. No dejes de hablar otra vez por que la patada te la daré yo. Te amo muchísimo Venus.— lo abracé otra vez y lloré en su hombro por segunda vez, el altavoz sonó por el aeropuerto diciendo que ya los pasajeros se tienen que ir. Nos separamos y me fui con mis padres quienes me abrazaron y Timothée alzo su mano para decirnos adiós he hicimos lo mismo. Esperamos hasta que lo perdiéramos de vista y cuando lo hicimos nos fuimos a la salida y mamá me dio los cinco libros de el y los llevé conmigo, subimos al carro y vimos como el avión de Timothée despegó. Me limpié unas cuantas lágrimas más y puse sus cinco libros sobre mi regazo. Los cuidaría con toda mi alma pero no le iba a decir.
Era el siguiente día y me levante temprano para ponerme mi uniforme y comer el desayuno que hizo mamá, no mentiré pero sentí muchos nervios por este día, ya que decidí que hablaría y nadie me podría quitar esa idea de mi cabeza. Mamá me llevo a la escuela y al llegar me dio un beso y deseándome buena suerte.
Al bajarme ingrese y me fui a mi casillero para guardar los libros que tenía en la mochila, el timbre sonó indicando mi siguiente clase, sentía como mis manos sudaban y trataba de limpiar mis manos en mi falda haciendo que esta se arrugara un poco. Al llegar al salón me fui a un asiento y poco a poco el salón de clases se fue llenando con compañeros que ya conocía.
Entro la profesora y nos pusimos de pie para darle los buenos días y ella nos indicó que nos sentáramos. Dirigí mi vista hacia Amelie y su grupo de amigas y después devolví mi mirada hacia mis libros.—Bueno veo que algunos están entusiasmados y otra tristes por volver a clases, pero vamos a platicar de sus vacaciones ¿que les parece?— algunos asintieron y este era mi momento y así pasaron algunos compañeros diciendo sus anécdotas de sus vacaciones y ya era mi turno pero la voz de la maestra me sacó de mis pensamientos.
—Venus si quieres que hable el siguiente.— dijo la maestra hacia a mi y la miré y los otros dirigieron su mirada a mi.
—Si Venus no queremos oírte, cierto no puedes hablar.— Amelie se burlo y otros dos más se burlaron junto con ella. La maestra le llamó la atención y me paré de mi asiento, siendo el centro de atención en el aula y respiré y comencé.
—Ya ustedes me conocen y soy Venus y me gustaría contarles una anécdota mía que pasaron en estas vacaciones.— Todos quedaron boquiabiertos al escucharme hablar y sonreí de satisfacción y proseguí.— Soy Venus y en estas vacaciones.....
Así lo hice y conté unas cuantas anécdotas que pasé con Timothée y Eva, claro que omití algunas partes y debo de decir.
Gracias Timothée por ayudarme hablar, sonreír y decir te quiero....
![](https://img.wattpad.com/cover/169971821-288-k71866.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Ayúdame •TC• (En edición)
Fanfiction"Solo ayúdame a que vuelva hablar, sonreír y decir te quiero..." Donde Timothée ayuda a su hermana Venus a que vuelva a sonreír. Empezada: 2 de diciembre del 2019 Terminada: 27 de octubre del 2020