1» sueños y amor

2.8K 216 18
                                    

Encontrar el amor sonaba tedioso, por eso a su mente no venía aquel pensamiento, quizá, sólo un poco, en especial cuando veía parejas en su trabajo o en su instituto. Ver las escenas le causaban suspiros ansiosos. Por el momento no podría estar ahí.

Consideraba que cuando ibas solo a una capital a costa de tus padres, lo único que importaba era lograr tu objetivo. Para eso tenía que trabajar arduamente, hacer la cosas con pasión sin importar que tan gastado esté, los frutos se verían reflejados al final.

Muy poco le importaba tener horarios pesados tanto en el instituto como en el trabajo. Entre más cansado estaba, más se motivaba.

Su vida parecía ser triste y solitaria a los ojos de los demás, él no lo negaba. Tal vez tenían un poco de razón. Sólo trabajaba y estudiaba, en ocasiones tenía charlas o salidas con algunos compañeros del trabajo o instituto, no era muy seguido, prefería tener sus pocos descansos para estudiar o siestas que le ayudaban a recargar energía.

Trabajar en un club, era cansado, pero la paga era buena, así que no podía quejarse aunque llegara a las 4 o 5 de la madrugada a su apartamento; lo normal sería dormir a esa hora, pero las tareas eran pesadas y terminaba durmiendo sólo unos cuantos minutos. Tal vez si tenía una vida muy triste y sola, no compartía apartamento con nadie, no tenía amigos fuera de los que vivían en su ciudad natal, aún así, casi no se comunicaba con ellos. Desde que se marchó de aquella ciudad, no tenía mucho contacto con sus amigos, familia o conocidos.

Hoy, como todos los días atendía a clientes, hacía trabajos de más para ganar un poco de dinero extra, entre otras cosas. Al principio era un simple mesero, pero los jefes al ver sus buenos conocimientos en otras áreas, le dieron el permiso para hacer lo que estuviera en sus manos.

Estaba un poco emocionado porque al finalizar su jornada, podría llegar a casa y hundirse sobre la cama por todo el fin de semana, estaba libre de pendientes así que la sonrisa que se mostraba en su rostro había captado la atención no solo de sus compañeros sino también de algunos clientes que frecuentaban el lugar y otros nuevos. No sonreía muy seguido, pero cuando lo hacía era la persona más adorable, eso decían las personas que lo veían. Sus ojos formaban pequeñas líneas, que hacían una perfecta combinación con su brillante dentadura.

—¿El amor?— preguntó uno de sus compañeros acercándose a él con una gran sonrisa.

—¿Disculpa?— preguntó confundido. No había captado lo que decía, quizá hasta se estaba burlando de él.

—Hoy estás muy risueño, los chicos y chicas están cayendo hoy por ti... Por lo adorable que te ves— contestó aclarando sus anteriores palabras— ¿Es acaso por amor?

—Ah, para nada Seungmin— rió negando con la cabeza— Esas cosas no van para mí por el momento.

—¿Por qué no?— hizo un puchero—. Eres joven, atractivo, llevas ¿Un año en la capital?— lo último lo dijo en tono de pregunta pues no recordaba muy bien el tiempo—. Suena perfecto para aventurarse y encontrar el amor.

—Ha— soltó una risa nerviosa—. Sí, pero no en mi vida. Tal vez en un futuro cuando termine mi carrera universitaria y tenga un trabajo estable.

—No te lo pienses mucho, puede que el amor de tu vida aparezca en esta etapa y no cuando tú dices— palmeó sus hombros—. Entonces solo tendrás tu licenciatura y un trabajo estable, pero no amor.

—Puedo vivir con eso, mientras me dedique a lo que me apasiona, estoy bien— sonrió al sentir como su corazón se agitaba al pensar en aquello. Se había ido de su ciudad por sus sueños, porque quería ejercer algo que realmente le apasionara y no ser parte del sistema que se llevaba en su casa.

𝑪𝒐𝒎𝒆 𝒕𝒐 𝒎𝒆 [𝑴𝒊𝒏𝒔𝒖𝒏𝒈]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora