Amor de Mentira

capítulo XXVII

Era sábado por la noche, Anna se maquillaba en el baño y se rizaba el cabello.
Habían organizado una salida junto con Lucia y Matías, era la primera salida que no fuera, hacer compras o tomar un café junto con Wil.
Lucía fue quien había hecho la propuesta al llamarla ese sábado por la tarde. Le contó que había estado hablando mucho con Matías y que habían salido un par de veces y se escribían todos los días. A Anna la idea le gustó, después de tanto tiempo distenderse y bailar un poco era buen plan.

Willam aceptó y hablo con Matías, habían arreglado primero ir a comer y luego a un boliche.

—Anna, amor, ¿¡ya está lista!?, Ya es casi hora de irnos— gritó Will desde la habitación acomodándose la camisa negra.

Anna que se aplicaba máscara de pestañas gritó.

—¡ya casi, ya casi termino! —

Terminó de aplicarse un brillo labial, se había hecho una colita alta, dónde le caía la cascada de rulos y unos mechones ondulados le caían en su rostro.
Había escogido un vestido rojo de raso pegado al cuerpo con un escote en forma de corazón, muy bonito que había elegido, junto a Lucia cuando habían ido de compras unos días antes.

Se miró al espejo y salió del baño. Caminó hacia la habitación y se topo con la mirada de willam que la observaba desde el espejo. Le sonrió y el hizo lo mismo.
Willam se dió vuelta y le extendió los brazos , la miró de pies a cabeza.

—Por Dios, estas hermosa bebé, no creo que sea buena idea salir,te ves demasiado linda —

Anna sonrió y lo abrazo pasándole sus manos por el pecho de el, esa camisa negra le quedaba preciosa, definía sus músculos y destacaba su color de piel, blanca.

—Vos, estás demasiado lindo, todas te van a mirar—

Y lo besó apenas, no quería dañar el lápiz labial.

Se perfumo y tomó su bolso, se abrigaron por qué afuera estaba frío.

Llegaron al restorán y avistaron a sus amigos en la mesa, que estaban muy pegados, Anna saludo a Lucia y ambas se elogiaron los aoutfits.
Matías y willam se saludaron también.

Comenzaron con la comida, y tomaron un poco de vino, habían elegido asistir a un boliche que estaba en puerto madero, lugar donde Anna y Lucia eran habitues del lugar.

Pasadas unas horas decidieron ir al boliche, mientras caminaban hasta el auto Anna y Lucia reían, se habían tomado casi el vino entero en la comida, mientras caminaban pasaron dos chicos y las miraron de una forma muy apreciativa, Wiliam los avistó desde atrás y se le tenso la mandíbula. Si no desaparecían en tres segundos, los moleria a golpes.

Los muchachos seguíeron caminando. Llegaron al auto y willam le abrió la puerta, se subieron y fueron hacia el boliche. Matías y Lucia fueron juntos en el otro auto.

Wiliam estaba callado con la vista fija en el camino, Anna sonreia y lo miraba de perfil.

—¿Amor estás bien?, Te noto muy callado—

Will la miró y le sonrió, no quería arruinar con sus celos esa noche, quería verla feliz.

— Sí mi amor, estoy bien, te amo—

Y la besó.

Llegaron al boliche, buscaron a dónde estacionarse y esperaron a que llegara Matías, había mucha gente, chicos y chicas fuera y gente entrando. Era un lugar donde se movía mucha gente de buena posición. Autos de alta gama desfilaban por la calle, willam destinaba vistazos hacia todos lados, Matías llegó y entraron.