🥀Capítulo 42🥀

1.2K 105 38
                                    

Marinette:

"¿Es que acaso sabes hacer algo? O sólo eres una cara bonita".

Repasé observando detenidamente una vez más mi imagen frente al cristal.

Cada uno de mis peculiares rasgos, los cuáles en varías ocasiones llamaban la atención de quién estuviera a mi alrededor.

Mientras aquéllas palabras de mí madre hacían eco en mí memoria. Las cuáles en muchas ocasiones del pasado me hicieron cuestionarme a mí misma.

¿Realmente sabía ser algo más qué sólo una mujer bella y sumisa?.

No, la respuesta a aquella preguntá siempre era la misma, siendo respaldada por la cobarde e insípida chica qué siempre fui en mi antigua vida. Nunca me defendía, no decía ni hacía nada para evitar qué el infierno en el que vivía se acabará.

Siempre débil, siempre la víctima, una pobre chica que ni si quiera tenía el control de su propia vida.

Solamente guardaba silenció, en todas aquellas ocasiones en las qué el hombre al qué mi madre consideraba cómo su nueva pareja "sentimental", hacía una vez más de las suyas tocando mis piernas mientras su aroma desagradable a alcohol inundaba completamente mis fosas nazales.

"No decir nada a mamá o ambas lo van a lamentar"...Eso es, buena chica Marinette.

Repetía la bestia en mi oído, mientras disfrutaba plenamente de pasar sus grandes y ásperas manos sobre mis muslos, acariciando mi cuerpo sin mi consentimiento, y para rematar acompañaba el acto de besos en mi cuello qué no hacían más qué asquearme durante el suceso.

"Tonta, inocente e ingenua niña".

Sabía qué para él no era más que eso, una chiquilla qué callaria su pervertido y depravado secreto por miedo.

Guardé por tanto tiempo éso, únicamente para mí, como si ser tocada contra mi voluntad fuera algo mágico o especial, ¡Asqueroso!, nada más lejos de la verdad.

Tan sólo pensar en el recuerdo de aquellos días hace crecer en mi interior un odio inmenso por mi misma.

¿Porqué no decia algo?, quizás así podría detenerlo, muchas veces fantaseaba con ello, pero no era más qué eso, una fantasía que no pasaría.

Tal vez mi madre no me creería y sólo me arriesgaría a obtener una golpiza por el monstruo, acompañada del dolor por la incredulidad de mi progenitora ante mis palabras.

¿Y Luka? ¿Porqué no contárselo a tu novio marinette?.

No podía, ni siquiera tenía el coraje de contarle a mi propio novio lo que ocurría mientras mamá llegaba tardé del trabajó...de igual forma ¿Luka en verdad podía hacer algo para salvarme de esa pesadilla?.

Claro que no.

Durante tantos meses caye, fui una idiota, soporte al maldito ebrio al qué jamás acepté cómo padrastro y a mí madre.

Sabine...mi madre...

Mi propia madre me veía cómo un estorbo, como si fuera su competencia por atraer la atención de su maldita pareja, en más de una ocasión encontró a su maldito engendro viéndome con lujuria y deseó.

ENCUENTRAME.🥀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora