42. 180°. (II)

1K 81 34
                                    

"Lo siento, tuve que hacerlo.
Lo siento, amarte en silencio, besarte en sueños, abrazarte con una mirada, una sonrisa...
Quererte en secreto.
Lo siento, pero tuve que hacerlo"

JUNIO 2019
DOMINIQUE

Y ahi estaba yo. Solo admirandola. Volviendo a desearla como la primera vez. Igual que esa ultima.

Estaba preciosa. Kat siempre estaba preciosa, y ahora tambien diferente. Su cabello largo, y la mitad rubio le dan un estilo tan particular. Pero no dejaba de estar hermosa.

-Preguntan si comeremos aqui o iremos a un restaurante- se me acercó ella y levanté la mirada para verla mejor, al ser mas pequeña siempre tenia que hacer un esfuerzo extra para apreciarla. Mi vista se fue a su boca por unos segundos. Esa boca que fue mia.

-No se, a..mm- por poco le habia dicho amor. Y es que seguia siendo eso. Mi amor- ¿tú que quieres?

-Piero dice que hay un restaurante donde hacen una comida deliciosa, y la vegana más- sonreí ante el hecho de que ella seguía preocupandose por mi. ¿como era que iba a odiarla si era el amor hecho persona? Si lo supieras Kat...

-Entonces escojo esa opción. Confío en ti- Kat me miró por unos segundos tal vez, seguramente, pensando lo mismo que yo.

No habia confiado en ella. No lo suficiente para no romper con ella cuando las cosas se volvieron turbias. Lo que ella no sabe es que cuando dije que mi cabeza estaba hecha una mierda, no lo decía por ella. No lo decía por lo de Kate. Y tampoco por nosotras.

Lo decía por mi. Por mi y por toda la mierda por la que atravesaba... y que no le había contado.

-Vale, le diré- soltó mi mano, que hasta ahora notaba que tomaba y caminó hasta nuestro guía aquí en París. Suspiré y la miré alejarse.

-No mamá, no estoy obligada a estar con aguien solo porque cumpliré treinta- caminaba de un lado a otro en la habitación. Lo que ella no sabía es que si estaba saliendo con alguien. Y ese alguien no era precisamente ese principe de cuento de hadas que quería para mi: Alto, guapo, con barba y musculos. En su defecto, aunque ella no tuviera ninguno, estaba con una reina que me hacía sentir precisamente en un cuento de hadas.

-No quiero que estes soltera para toda la vida, cariño. Pienso en tu bien. A tu edad ya tenia unos años de casada con tu padre- me dejé caer en la cama y solté un suspiro.

-Mamá..- un no soy tú se había quedado estancado en mi garganta, y me lo tragué. Igual que mis ganas de discutir por el mismo tema. Me odiaba por ocultarle las cosas, pero que salía con Kat era algo que le diría en persona y no en medio de una discusión- Lo siento, pero... sé que se darán las cosas en el amor pronto, a veces es dificíl econtrar a la persona correcta.

Díganmelo a mi que tuve el amor en frente durante más de un año y por miedo a arruinar una amistad me había quedado callada. Pero sabía que con ella no había tenido dudas. Ni una sola. Ella era la persona correcta. Era mi persona correcta.

-Bueno, si tu lo dices- soltó un suspiro- Te amo, cariño. Nos vemos- cortó la llamada. Sabía que lo hacía por hacerme sentir mal. Y siempre lo lograba.

Cada vez... yo siempre pensaba que había superado los fantasmas de mi inseguridad. Siempre lo creía y todo fue mejor desde que estaba con Kat. Pero como siempre, me había equivocado. Como cada vez anterior.

Lo que más ira me causaba era que sabía que podía controlarlos, pero no... quería. De alguna forma irónica.

Esa tarde la pasé creando y moviendo cosas en pro de Start de Wave para poder a funcionar mi mente y no pensar en eso. Pero no lo logré. No del todo.

SAUDADE- DOMKAT (COMPLETA) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora