SAUDADE- DOMKAT (COMPLETA)

36. A CASA

"Nos queda mucho por sentir"
-Dans Vega

DOMINIQUE
-Voy a extrañar mucho Brasil- hice un puchero mientras Kat me veía empacar la maleta con una sonrisa.

-Fue demasiado mágico este lugar, pero tenemos que despedirnos ya, mi amor- cerré la maleta y me resigne a tener que volver a Canadá. Si, a Canadá porque me iría con Kat.

Después de pasar varios días entre Sao Paulo y Río de Janeiro tendríamos que volver a nuestras realidades.

Habíamos viajado a Sao Paulo después del partido a una nueva convención, pero sólo estuvimos aquí dos días. Ahora tendríamos que volver.

-Bueno, ¿volveremos?- hablé emocionada mientras Kat se acerca a a mi.

-Claro que sí. Volveremos a venir- se sentó frente a mi y besó mi frente de manera dulce.

-Tenemos que irnos. El vuelo sale pronto- me tomó la mano y en la otra llevaba su maleta.

Bajamos al linving para agradecer toda la hospitalidad y despedirnos para ir al aeropuerto. El camino fue corto.

Me ponía triste irme, pero sabía que había disfrutado casa momento aquí al máximo. Mire a Kat teclear su celular. Y de que manera los había disfrutado.

Sonreí por mis pensamiento y recosté mi cabeza en el hombro de mi novia.

***

-¿No tienes hambre?- Kat habló mirándome. Negué con la cabeza y sonreí.

Hacia ya casi una hora habíamos despegado. Mire a Kat que estaba más despierta que yo. Su insomnio había mejorado, y ahora quien no habia podido dormir bien era yo.

-Estoy emocionada. Falta poco para el regreso de la serie- me mostró una imagen de Wayhaught y asentí.

-y yo- sonreí y vi el cielo, ya oscuro, por la ventana que Kat tenía al lado.
Busqué mi celular y revise un poco mis redes, justo como hacia ella.
El tiempo se me fue volando entre imágenes imágenes y comentarios graciosos entre mi hermosa novia y yo.

El tiempo se me había pasado demasiado rápido. La noche había caído y con ella morfeo haciendo de la suyas y cargando en sus brazos a todos los pasajeros, incluyendo a Kat y exceptuandome.
Me había tomado un café, cargado, antes de abordar y no tenía ni un poco de sueño. Al contrario de Kat, me había dormido ya hace un rato y que ahora respiraba con tranquilidad a mi lado.

Levanté la mirada del celular y me dediqué a admirar las perfectas facciones de Kat. No entendía, y probablemente nunca llegue a entender, como era que había tanta perfección en ella. Me perdí en su definida boca y subí mi vista a sus ojos y ese lunar que tenía cerca al izquierdo que me volvía completamente loca. Sonreí como una total estúpida al darme cuenta lo afortunada que había sido y era por tenerla.

-¿En serio no tienes ni una pizca de sueño?- di un pequeño saltó en la silla al escuchar su voz, aunque aún tenía los ojos cerrados. Me llevé la mano al pecho buscando normalizar mi respiración.

-¿Quieres matarme de un susto?- la escuche reír por lo bajo evitando mucho ruido

-Lo siento- levantó sus manos en señal de inocencia- No has respondido a mi pregunta- abrió los ojos por fin haciendome sonreír.

Era tan hermosa.

-No tengo sueño, Amor. Duerme tú- acaricié su mano y deje un beso en ella. Sonrió.

-Ven acá- me atrajo a su pecho y sonreí. Empezó a acariciar mi brazo y dejó un beso en mi frente.

-Voy al baño- dejé un beso en sus labios y me levanté sin hacer ruido para entrar al baño del avión. Me apoyé en el lavamanos y mojé un poco mi cara. Suspiré abriendo la puerta. Di un salto, y un casi grito cuando le vi esperándome afuera.
Digo casi porque cuando vio que iba a gritar Kat tapó mi boca con su mano haciendome entrar al baño con ella. Ella y su típica sonrisa pícara.