Porque estarán unidos incluso dentro de milenios.
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Sinceramente esto comenzo como el especial del cumpleaños de Wei Ying y por Halloween, pero termino haciendome llorar y espero que a ustedes tambien les llegue.
Como ya saben los personajes s...
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XiChen observa.
Sus ojos ambarinos, llorosos ahora, recorren de arriba abajo los cuerpo inertes de su hermano y el del amor de este.
Recorre con tristeza y agonía la cinta envuelta en la espada y los dedos de ambos, recorre las túnicas blancas bañadas en rojo de la sangre que aún corre desde las heridas de ambos.
Y le duele. Le duele en el corazón todo esto. Le duele ver a su hermanito ahí, cubierto aún por las cuerdas de su guqin, atravesado por su propia espada y golpeado por una vida que no sabe cuando vivió.
Él ve a su hermano nuevamente caminando hacia su encuentro, con un ceño fruncido imperceptible hace exactamente un mes, para después contarle de los sentimientos embriagantes que el discípulo principal de la secta Yunmeng Jiang causaba en él.
Y ahora lo ve aquí, frente a sus ojos, después de tenerlo en sus brazos mientras lloraba y gritaba "Lo amo" con todo el dolor que solo una vez en su vida ha presenciado en WangJi. Y no puede hacer nada más que recorrer a ambos de pies a cabeza y ver cómo sus dos almas se mezclan y se van de aquí, para no volver, al menos no en esta línea de tiempo. Y le duele.
Y solloza ahogado sin dejar de mirar, el como el lugar pacifico que es El Receso de las Nubes llora la perdida de su joven maestro, y golpea fuertemente el pecho de su tío, y solloza aún más fuerte en la puerta de su padre pero este nunca sale.
Y Lan XiChen, como el primer jade de Gusu, ZeWu Jun y líder de la secta Lan, inquebrantable se opone ante todos.
Ellos murieron juntos, sollozaron su amor hasta el último aliento, ellos descansarán juntos y no le importa nada. Su querido didi pereció junto al amor de todas sus vidas y descansarán juntos hasta que en un momento se vuelvan a encontrar. Ya sea en algunos años, en algunos siglos o en algunos milenios.
Como un jade inquebrantable, vio por su ser más amado, y se quebró por la perdida de este. Pero sabe que vale la pena cuando esa misma noche las cuerdas de un guqin y las notas de un dizi tocan la melodía de dos almas que permanecerán unidas por toda la eternidad.
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