Capítulo 3: "Son unos niños, después de todo"

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-¿Por que diantres tocas tu estómago? Que yo sepa, mi hermanita sigue siendo virgen, es que no puede ser, no puedes estar embarazada, es un embarazo adolescente, se puede complicar y podrías lastimarte; además estas chiquita, ¿cómo rayos ese pendejo te embarazo? Lo mataré, dejare huérfano de padre a mi sobrino y me arrepentiré despu... - Mi carcajada lo interrumpió y de puso mas rojo de lo que ya estaba, parecía un volcán con una pésima cara y como buena chica que soy, saque mi celular para tomarle una foto y ganar cosas después.

-Calma Zen, no tengo ningún embarazo precoz pero que lindo te veías cayendo en mi broma. Vamos a buscar al chico que querías matar por algo que no hizo.

Nos dirijimos a la salida del edificio, el idiota tenia la mandíbula tensa y tal vez se la cobraría pero no me preocupaba, mi castigo seria tal vez una broma pesada pero valió la pena. Buscamos a Eiji en una cafetería cercana, él estada comprando un café y dos refresco, al llegar entramos y mi hermano fue al baño, con nosotros paso un perrito callejero y no nos habíamos dado cuenta, se veía sucio pero era hermoso.

Le dije a Eiji que comprara un pan también y nos fuimos a sentar, le di el pan al perrito, no se que raza es. Él come mientras Eiji lo acaricia.

-Es un hermoso perro, no se porqué alguien tendría el corazón para abandonarl... - No pudo terminar su frase porque lo interrumpieron.

-En esté lugar no se admiten animales y menos callejeros.

-Si es así, ¿Por qué te dejaron entrar, querido hermano?.

Zen me miro mal, siempre nos llevamos entre bien y mal, así que esto es solo uno mas de nuestros días normales, en realidad uno de los pocos días normales que pasamos juntos porque hace tiempo que él estaba demasiado ocupado para estar conmigo.

-Dame el número de teléfono del periodista.

Hice lo que me mando y de esta manera comenzaron 7 días de apurar los papeles para el viaje, no entiendo el porqué de quererme fuera del país en tan poco tiempo, espero que no sea nada malo o peligroso porque siempre me ocultan todo.

Lo primero que hicieron fue investigar a Ibe para saber que intenciones tenían con nosotros, cuando se dieron cuenta que era buena persona mi hermano se movilizo a todos lados para sacar los papeles. Ibe si sabia lo qué pasaba, era obvio que los documentos estarían listos muy rápido. Mi familia fue la que pago los boletos de avión en primera clase y a pesar de que Ibe se negó, al final tuvo que aceptar, en menos de lo que me di cuenta paso esa semana y nosotros ya estábamos en el aeropuerto despidiendonos para subir al avión.

Me toco un asiento al lado de la ventana, después venia Eiji y a su lado Ibe. Seria un largo viaje por lo que nos pusimos a ver películas y nos quedamos dormidos, y cuando ya estabamos llegando cuando Ibe nos despertó.

¡El verdadero amor no engaña! | Banana Fish Donde viven las historias. Descúbrelo ahora