Por tu bien

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Durante la mañana, Kouyou despertó a eso de las 10:20, sólo para darse cuenta que Rina no estaba, pero en su lugar, había una hoja blanca con un manuscrito perfecto color rosa brillante. Se frotó los ojos aún con algo de sueño y se sentó a la orilla de su cama para leer la nota.

"Buen día, Shima san. Hoy estaremos todas con el señor Yoshiki, él está enterado de las noticias, así que te recomiendo que no bajes hasta que yo vuelva. Por cierto, te dejé un rico desayuno.
Te quiere, la hermana Rina"

"Eso si será un problema" dijo para si mismo y se levantó, fue al baño para lavar su rostro con agua bien fría y volvió para vestirse. El desayuno que le había dejado su amiga en la mesita eran unas tostadas con mermelada de fresa y crema junto a una taza de café, además que junto al plato había una cajetilla nueva de cigarros con otra nota pequeña.

"Me terminé tus cigarros después de que te durmieras ¡lo siento!"


Sonrió y desayunó tranquilo, la mañana se veía hermosa. A eso de las 2:57 de la tarde salió a la parte trasera de la iglesia, donde a lo lejos logró distinguir a un perro que orinaba sobre el lugar donde había enterrado a aquella mujer, lo cual le dio risa. Continuó fumando como la noche anterior, "necesito liberar estrés" pensó. El recuerdo de la actitud que había tenido Yuu con él le dolía, no sabía por qué actuaba de esa manera después de decirle que le gustaba.

-Supongo que tienes razón... De todas formas, nunca me pediste ser tu pareja

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-¿Qué le hiciste?- preguntó Takanori algo preocupado al no ver a Takashima-

-Ya te dije, sólo quiso irse- decía mientras afilaba las garras de sus guantes-

-Estoy seguro de que tu le hiciste algo, ¿por qué se fue?- habló realmente molesto-

-¡Porque le dije que no había nada especial entre nosotros!

-Eres un maldito insensible... Él te quería ¿dónde encontrarás a alguien a quien le importes y te quiera por quien eres y no por temor a que lo mates? En ningún lado... Kai y yo somos tus amigos, pero él, definitivamente, era ese alguien

-Takanori...- susurró- Tu sabes que te quiero y eres uno de mis mejores amigos, pero te pediré que no te metas en mis asuntos

Se levantó del banquito y caminó hacia el menor, quien retrocedió unos cuantos pasos sin cambiar su expresión. Cuando el mayor estubo a un medio metro de distancia del menor, acercó peligrosamente su arma a su cuello.

-No me obligues a hacer algo que no quiero, así que no me molestes por ahora, Ruki... No me gustaría deshacerme de uno de mis mejores amigos, pero a veces me sacas de mi casillas

-De todas formas- sonrió de lado y dio un paso al frente- Se que no durarás mucho tiempo sin Shima, te conozco ¿o acaso crees que por tantos años de estar lejos de ustedes me olvidé del más mínimo detalle de su personalidad? Eso nunca... Sabes que en algunos casos puedo ser más peligroso que tu si me haces enojar, Aoi

-No estoy de humor para amenazas, enano- volvió a su lugar, sabía que el chico tenía razón- Déjame trabajar en paz por hoy, me duele la cabeza

-Como quieras- rió levemente- Te veré luego, Aoi kun~

Escuchó la puerta cerrarse y dejó escapar un suspiro, frustrado enredó los dedos en su cabello y luego lo acomodó, desvío la mirada y se quedó pensativo un momento.

-Maldita sea, Takashima... Si tan sólo supieras que te dejé ir para no hacerte daño, soy un imbécil...

My lovely mad sisterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora