Cap 056

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De muy pocas cosas me arrepiento y está es una de ellas.

-¡Papá mi pie!–Chilló Daniel con fuerza.

Me arrodille a su lado con cuidado y le toqué el pie pero gritó muy fuerte.

-¡Me duele mucho!–Volvió a gritar llorando. -¡Papá me duele!.

-Cálmate cariño, no grites–Le dije nervioso y empecé a buscar mi celular en el bolso pero cuando lo saqué se cayó y se apagó...

-¡Una ambulancia!–Dijó una mujer cerca.

-¡Papi me duele mucho!–Daniel sólo estaba tendido en el suelo llorando muy fuerte y sin mover el pie.

-Yo los llevó..

-¡No!–Le grité a a Anthony cuando hiba a acercarse a Daniel. -¡Ya llamaron una ambulancia!.

-¡Aqui que lleguen Daniel tendrá más dolor!–Me habló fuerte y serío. -¡Déjame llevarlo!.

Mire a mi hijo llorando por el dolor y en mi estado no podía hacer mucho.

-Hijo debes levantarte cariño..

-¡Papi me duele mi pie!–Sollozó Dani y Ángela le agarró la mano.

-Lo cargare–Anthony metió sus brazos debajo del cuerpo de Daniel y lo alzó fuerte para levantarse, Ángela fue con él y a mi me ayudaron a levantarme por que el dolor de mi vientre no es que me dejara hacer mucho.

Fui al auto de Anthony y me meti atrás para recibir a Daniel que sólo lloraba a mares por su pie... Ángela se fue adelante con Anthony y rápidamente empezó a conducir.

-Ya hijo, llegaremos al hospital rápido–Le acaricié el cabello y el brazo pero de nada servía.

En unos minutos donde Anthony se pasó muchos semáforos llegamos al hospital por el lado de urgencias.

-¡Ayuda!–Gritó Anthony cuando entró al hospital con Dani en brazos.

-¿Que le sucedió?–Preguntó unos enfermeros que traían una camilla.

-Se cayó–Les respondí caminando junto a la camilla.

-¿De donde?–Preguntó una enfermera.

-Estabamos en el pasamanos y quiso hacerlo y lo ayude pero lo solté cuando me dolió mi vientre...

-Bien–Ella asintio y me alejó de la camilla, Ángela se abrazaba a mi pierna mientras miraba a su hermano ser atendido.

Una doctora le tomó el pie y mi bebé gritó muy fuerte, le pusieron una inyección en el suero intravenoso y la doctora se alejó escribiendo algo en una planilla.

-¿Como está mi hijo?–Le pregunté asustado a la doctora.

-Presenta una fisura pero debemos hacer un rayo x para saber qué tan grave es.. le pusimos un analgésico intravenoso para que le quite el dolor...

-Gracias–Suspiré y lo miré.. estaba todo rojito de tanto llorar.

La doctora asintió con una sonrisa y se fue.

-Señor debe llenar la planilla mientras trasladamos a su hijo a la habitación de rayos x–Me dijó una mujer para darme la planilla.

La recibí y miré como se llevaban a mi bebé a una habitación.. pregunté si podía estar con él pero dijeron que no por mi bebé.

Me senté y ví como Ángela estaba secando sus mejillas con fuerza, Anthony sólo estaba ahí sentado haciendo nada.

Llené la planilla con la información básica y con Ángela fuí a recepción.

-Ya la llené–Le dije a la mujer y le di la planilla.

-Esta bien señor, debe sentarse y esperar que atiendan a su hijo–Ella me sonrió levemente y bajó la vista a su teclado.

-Señorita estoy esperando un bebé y estoy por terminar mi segundo trimestre y me duele.. ¿me puede ayudar?–Le pregunté suave.

Ella me miró y se levantó para comprobar que si estaba embarazado.

-Por favor espere en la sala de espera y buscaré un ginecólogo que este de turno–Me dijó sería y asentí.

Puse ambas manos en mi vientre bajó y fui a sentarme.

-Angela no llores cariño, tu hermanito está bién–Le rodee sus hombros y la pegué a mi.

-¡Pero estaba llorando mucho!–Sollozó.

-Él estará bien, no te preocupes pequeña–Le dijó Anthony y sacó una barra de chocolate de la parte interna de su saco. -Come un pedazo y cuando veas a tu hermano le das la otra mitad.

Ella me miró con esos ojitos brillantes y suplicantes... ¿como le digo que no?.

Le quité el chocolate a Anthony y se lo a mi hija, ella se sentó derecha y empezó a comerse su dulce.

Aún con dolor me levanté y saqué el celular para llamar a Logan.. debía ayudarme con esto.

-¿Señor pasamos su hijo a habitación?–Me preguntó una enfermera.

-Si–Suspiré por que sabía que ésto era por dinero. -¿Puedo pasar a verlo?.

-Aun no por...

-Es mi bebé, quiero estar con él–Le insistí con mis manos en mi vientre. -Solo es un niño.

Ella me miró unos segundos y asintió con una pequeña sonrisa.

Le tomé la mano a Ángela y fui a la habitación donde estaba mi pequeño.

Ella abrió la puerta y estaban acomodando a mi niño en la cama.

-¡Papá!–Me miró y estiró sus brazos.

Me le acerqué y le tomé la mano para darle un beso en la frente. Ángela tomó la banca que utilizan para subirse a la cama y se subió abrazando a su hermano.

-¿Estas mejor cariño?–Le pregunté y asintió.

-Hola–Saludó la doctora entrando a la habitación. -Tengo los rayos x–Me mostró la placa y la subió a la bombilla. -Si es una fisura como dije, grado 2.. pudo ser peor...

-Es mi culpa–Suspiré y me mordí el labio por la punzada de mi vientre. -Debí bajarlo de ahí.

-Los accidentes pasan–Ella me sonrió y se acercó al pie de Dani. -Podemos vendar y después pueden irse...

-¿No es mejor el yeso? es muy inquieto–Le dije y ella sonrió cuando mi pequeño se escondió en el cuello de su hermana.

-Tambien podemos hacer eso, será mejor y curará más rápido su tobillo.

-Gracias, en verdad se lo agradezco–Necesitaba un abrazo y me aproveche de su amabilidad para abrazarla, ella se sintió incómoda pero me dio unas palmaditas en mi espalda.

-No se preocupe, es mi trabajo y su hijo es muy encantador–Dijó amablemente.

-Lo sé–Me separé y le sonreí levemente.

Ella asintió y dijó que vendría un enfermero para que le pusiera el yeso y se fue.

Lo Nuestro Nunca Pudo Ser 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora