Naruto: El Dragon Slayer Definitivo

Capítulo 6: Combates

Neinhart se paró frente a Naruto, y cuando el combate comenzó, el Spriggan creó una réplica de Minato. Naruto estaba de brazos cruzados, y cuando la réplica de su padre intentó asestarle un golpe con el kunai, el rubio lo destrozó con solo la mirada, asombrando a Neinhart.

-¡Imposible, tú todavía no superaste a tu padre!- dijo asombrado el pelimorado.

-Así es, no lo he superado, porque pienso liquidarlo.- dijo Naruto, dejando inconsciente a Neinhart de un golpe en la cara.

Todos estaban asombrados por la velocidad con la que Naruto derrotó a un Spriggan 12, mientras Wahl se preparaba para pelear.

El robot hacía uso de sus ataques, sin lograr hacerle daño a Naruto. Le disparó muchos misiles, provocando una gran explosión. De la nube de humo salió disparado un pilar de metal, el cual golpeó a Wahl y lo mandó a estrellarse bien lejos. El humo se disipó, mientras el pilar regresaba hacia Naruto, cuya piel metálica lo había protegido de los misiles.

Naruto regresó a la normalidad, mientras Bradman entraba en el campo de batalla. El Dios de la Muerte se deshizo en partículas de barrera mágica, pero una fuerte ventisca disipó todas las partículas. El rubio había recurrido a la magia Dragon Slayer de Viento, para esparcir las partículas de manera tal que Bradman tardase mucho en recomponerse.

Brandish le lanzó una piedra a Naruto, y mediante su magia, la hizo aumentar de tamaño hasta que se convierta en un meteorito. El rubio concentró magia eléctrica en su pie derecho, mientras seguía cruzado de brazos, y luego de impactar a la gran piedra, la hizo polvo. El ojiazul esquivaba hábilmente los ataques de Brandish, hasta que decidió dejarla inconsciente de un golpe seco en la nuca.

Dimaria saltó al campo de batalla, y Naruto se descruzó de brazos. El rubio cerró los ojos, y esperó a que Dimaria lo ataque. Un instante después, el ojiazul recibió un fuerte puñetazo en la cara, que lo mandó a volar hacia el costado. Se recompuso en el aire, pero recibió una patada que lo hizo volar de nuevo. La tercera vez que Dimaria quiso golpearlo, ella pasó de largo. Intentó varias veces más frenar el tiempo y golpear a Naruto, pero el rubio esquivaba todos los golpes sin siquiera moverse de su lugar. Una muy delgada aura plateada se manifestó, solamente perceptible para August e Irene. El rubio abrió súbitamente los ojos, y varias ondas de aire comprimido alcanzaron a Dimaria y la dejaron inconsciente.

El siguiente fue Ajeel, que muy emocionado por la batalla, manipulaba la arena que había en el campo de batalla para intentar ahogar a Naruto. Creó una pirámide de arena con el rubio dentro, y cuando August iba a dar por terminado el combate, la temperatura del lugar comenzó a subir. La arena se volvió vidrio, y estalló por el calor. Naruto estaba siendo rodeado por un remolino de fuego, y con un solo ataque, venció a Ajeel.

Jacob saltó al campo de batalla y se volvió invisible, pero corrió exactamente la misma suerte que Dimaria.

Larcade llenó de placer a Naruto, pero el ojiazul se resistía a la magia del Dragneel blanco. Implementando la magia de sombras, Naruto logró meterse en las sombras del suelo, y atacar a Larcade fuertemente por detrás con un ataque de luz.

God Serena saltó al campo de batalla y comenzó rápidamente la batalla. Irene frunció el seño, y se dirigió a August.

-No está usando la cantidad de poder acordado, ¡Está luchando al 60%!- le dijo Irene.

-Déjame ver cómo evoluciona el combate...- dijo el viejo, a lo que la pelirroja asintió.

Naruto esquivaba a duras penas los ataques de God Serena, el cual creó 4 dragones elementales que se lanzaron hacia el rubio. El muchacho levantó su palma derecha, y los 4 dragones se convirtieron en cuadraditos pequeños.

-Crash.- murmuró el rubio.

God Serena se lanzó hacia Naruto, el cual tomó una gran bocanada de aire.

-¡Rugido del Dragón de Veneno!- dijo el rubio, escupiendo una ráfaga de magia de veneno hacia God Serena, el cual recibió el ataque de lleno y quedó inconsciente.

Mientras Irene curaba las dolencias de God Serena, Invel se preparaba para el combate. La gran magia de hielo del cónsul fue claramente superada por el inmenso fuego de Naruto, el cual logró vencer a Invel en cuestión de minutos.

Irene se preparó para combatir, pero Naruto se volvió a cruzar de brazos.

-No es necesario combatir contigo o contra August. Los tres sabemos que no soy capaz de igualar sus fuerzas, aunque estén usando el 10% de su verdadero poder.- dijo el rubio, disponiéndose a marcharse.

-¡Maldito vago, ven a pelear!- gritó Irene, lanzándole una ráfaga de energía al ojiazul.

El rubio había desaparecido, asombrando a todos los Spriggan 12, incluso a Irene. De repente, la pelirroja sintió una palma en su espalda.

-Crash. Perdiste.- dijo el rubio, que no utilizó la magia devastadora para no herir a Irene. Él se metió en las sombras, viajó hasta las espaldas de la desprevenida Irene, y la venció.

-Maldito mocoso astuto...- murmuró enfurecida Irene, que reconoció su derrota.

August se preparó para combatir, y el rubio se puso realmente serio para la batalla.

-No voy a caer en el truco que le hiciste a Irene...- dijo el viejo, comenzando a liberar su poder.

El rubio intentó atacarlo con magia de fuego, pero el viejo contrarrestó el ataque con una barrera. El ojiazul intentó golpearlo por la espalda, pero August lo esquivó y le dio un golpe con su báculo. Naruto apoyó ambas manos en el suelo e intentó golpear al viejo con una patada giratoria, pero la pierna fue atrapada por August, el cual arrojó al rubio por los aires.

El viejo comenzó a caminar hacia Naruto, pero cuando pisó cierto lugar, el rubio sonrió. Él había colocado una mina de rayos, la cual paralizó a August, y Naruto apoyó su palma derecha en el pecho del viejo.

-Crash.- dijo el ojiazul, mientras todos los Spriggan 12 aplaudían.

-Impresionante, se nota que has crecido. Aunque ninguno de los Spriggan ha usado más del 10% de sus capacidades...- dijo el viejo.

-Es un progreso, supongo...- dijo el ojiazul, siendo alagado por algunos de los Spriggan 12.