El Cambio

Capítulo X.

P.V Harry.

Me despierto sobre la hora del almuerzo cuando Ryan entra en mi cuarto sin llamar si quiera y me saca a rastras de la cama mientras me jura que lo hace por una buena razón.  Para él,  'buena razón' es acompañarle a comprar tabaco del estanco, ya que a él no le venden porque tiene diecisiete. Ryan a pasado la noche en mi casa. Le llamé después de salir de la casa de Lilian. Me escuchó durante un par de horas hablar sobre lo humillado que estaba y sobre que debería hacer. Pero él ni si quiera me escuchaba, estoy seguro. Se limitaba a asentir y a beberse todas las cervezas del frigorífico.

-¡Vamos tío! ¡Anímate, Lilian es lista se dará cuenta que eres un buen chico! --. Dice mientras entramos al estanco.

-UnChesterfill, por favor --. Le digo al tío del banco. Es un hombre de mediana edad con el pelo blanco y un bigote bastante gordo. Ni si quiera me pide el dni y me tiende lo que pido sin hacer ninguna pregunta --. Gracias -- Le respondo cuando tengo el paquete en mis manos.

Salimos de la tienda y le tiendo el paquete a Ryan. No entiendo porque no va a la tienda que hay  dos calles más para abajo, donde le venden el tabaco a los menores. Supongo que solo quería molestarme.

-Tío, yo conocí a Lilian el otro día. Nos la presento Emily --. Dice, mientras subimos a casa de nuevo -- Parece una buena chica y es muy guapa. Has elegido bien -- .Exclama, y se enciende un cigarro a la vez que nos sentamos en la mesa de la terraza.

-Sí que lo es, sí --. Admito, mientras le doy una calada a su cigarro. Hacia bastante que no fumaba pero supongo que ahora lo necesito.

-Ella era bastante tímida. A penas habló en la comida.

Tras un par de cigarros más, y un par de congeturas a cerca de que estará pensando Lilian, Ryan se va a hacer de niñera para sacarse un par de libras y me deja solo.

Vacilo un poco ante la idea de ir a ver a Lilian, pero al final decido ir. Me miro al espejo redondo que tengo justo en frente del baño y respiro hondo. Me acomodo el pelo con las manos y me hecho un poco más de perfume. Intento memorizar brevemente lo que le voy a decir. Pero sé que cuando este frente a ella me pondré nervioso y diré cualquier cosa.

Cojo las llaves del coche y me pongo rumbo a su casa.

P.V Lilian

Mi mañana comienza temprano. Mi padre, como había supuesto que haría me saca de la cama a las nueve y me atosiga a preguntas.

-¡Quiero que me cuentes todo antes de que me vaya a trabajar! --. Exclama, mientras me quita las sabanas de encima y sube las persianas. Cuando es un jodido pesado.

-¿Qué quieres que te cuente, papá?    ¡Estaba durmiendo!

-Ya sabes de lo que te hablo. Así que empieza a hablar.

Supongo que tendré que contárselo.

-Papá,  él chico de ayer se llama Harry. Y vino para... -- Respiro hondo y continúo -- Paara hablarme de su novia. ¡Sí! De su novia. Bueno, ahora mismo 'ex novia' rompieron justo ayer. Y estaba muy triste y enfadado y no sabia a quién recurrir... --. ¿Desde cuando soy tan hábil mintiendo? Londres definitivamente me ha cambiado. Mi padre vacila entre si creérselo o no. Mira su reloj de muñeca bañado en oro y después me mira con una expresión firme.

-Supongo que tiene sentido. De todas formas, no te creas que te has librado. ¡Hoy te quedas en casa todo el día! --. Espeta, y sale de la habitación. Salto de la cama y le persigo por las escaleras

-¿Qué? ¡No! ¿Por qué?      

-Porque lo digo yo --. Dice,  y coge mis llaves y las suyas del cuelga llaves -- Me quedo con esto -- Exclama, mientras me enseña mis llaves y posteriormente se las guarda en el bolsillo.