Curiosa, se levantó del suelo, y caminó hacia donde provenía el ruido. Se impresionó mucho al ver a un enorme dragón de alas rojas como el fuego levantarse y agitar sus alas listo para atacar.
—¿Kayn?— Un muchacho de tez pálida, con una gran melena negra recogida en una trenza, portador de una guadaña Darkin, había sido su acompañante estos últimos meses. Cuando estaba aburrida, o tenía algo que contarle, siempre iba con él a pasar el rato. Las conversaciones que ella tenía con Ezreal tampoco pasaban por alto. Él, extrañado, giró su cabeza encontrándose con Zoe, ahora mirando al dragón.
Otra vez ella no, por favor.
—¿Qué haces aquí?— Pregunto el muchacho tranquilo, como si ningún dragón estuviera ahí justo para lanzarle un ataque mortal.
—Eso te iba a preguntar yo.
El ser de aspecto monstruoso empezó a recargar una bola de fuego, y cuando estuvo lista, la apuntó al cuello de él. Kayn agarró con firmeza su guadaña, y salto hacia el dragón dispuesto a arrancarle la garganta.
¡Sí, Sí! Por fin algo de sangre. Acaba con él.
Y de un corte, silencioso y veloz, le arrancó la cabeza. El chillido de aquel ser rebotó en sus oídos de una forma desagradable. Los restos del dragón se desvanecieron, dejando una gema roja en el pasto.
—Pues, ha esto venía yo— Recogió aquella extraña piedra. Le quemaba la mano, pero no al punto de hacerle daño
¿Solo para esto? ¿Y donde esta la sangre?
—Asique, supongo que esa era de tu tarea de Año nuevo— Kayn asintió y se sentó en unas rocas que sobresalían del río, dejando a Rhaast en una de estas.
En realidad, su anterior trabajo era hacer magdalenas, pero como era tan inútil no las pudo hacer, y le mandaron a hacer esto.
Rhaast soltó una risotada, burlándose de las capacidades de cocina de Kayn.
—Y tú, ¿También tienes algo por aquí?— Dijo él, ignorando el comentario de su arma. Recordó que unos días antes le dijo exclusivamente que le había tocado la tarea de decorar la grieta, y no iba a salir de allí en todo el día.
—Pues...— Dudó unos segundos antes de contarle sobre lo que le había ocurrido con aquel rubio, que ya la estaba volviendo loca— ¡Ezreal volvió a decir que Lux es linda! ¿Y yo qué? ¿Soy una pared?— Hizo un berrinche, sentándose al lado de Kayn. El de la trenza, giró sus ojos ya cansado de escuchar siempre lo mismo de ella. Hasta, llegó el punto que cuando estaba en la grieta peleando, si se lo encontraba, las ganas de asesinarlo se multiplicaban por mil.
—¿Has probado en olvidarte de él?, es obvio que no quiere nada contigo— Kayn se sentía extraño estas últimas semanas. Un sentimiento de odio aparecía cuando Zoe le contaba sus tardes con Ezreal— No creas que vas a poder hacer algo antes de año nuevo.
Zoe ignoró completamente las palabras de él, menos las últimas que dijo. ¿Cómo? Claro que ella podría causar emociones en el rubio antes de que pasara ese año, iba a demostrarle a Kayn que podía enamorar a Ezreal en apenas once horas.
—¡Tienes razón!— Kayn abrió los ojos sorprendido, y la miró extrañado. ¿Podría ser que al fin hubiera aceptado sus sentimientos no correspondidos?— ¡Voy a hacer que caiga rendido ante mí, antes de que acabe el año!
En ese momento, una fantástica idea cruzó por la cabezita de Zoe. Podría hacerle un montón de pasteles lunares, y comerlos en un picnic al lado del río.
Esta niña es estúpida.
—Estoy de acuerdo contigo, Rhaast.— Dijo el de la trenza, concordando con el Darkin.
—¡Oye! ¿Qué tiene de malo lo que dije?— Dijo Zoe, inflando los mofletes.
Kayn se levantó de las rocas donde reposaba, dispuesto a largarse de allí. Miró por última vez a la pelirroja, y se despidió. No quería seguir escuchando como Zoe iba a ganarse el corazón de el de ojos azules. ¿Porqué no hablaba de como era él? Kayn también quería algo de atención por parte de ella... Espera... ¿Qué?
Por otra parte, Zoe al ver como su compañero de charlas la dejo botada, procedió a ejecutar su plan "Cacería de novio" . Fue volando hacia su departamento, abrió la puerta y se encerró en su habitación. Empezó a garabatear en un cuaderno de Hello Kitty, haciendo dibujitos de Ezreal y ella en un picnic con pastel lunar de chocolate y mariposas que harían cuando saliera el crepúsculo dando paso a la noche. Llamó a dos personas que pensaba que la podrían ayudar en su majestuoso plan. Esperó unos cuantos minutos tendida en su cama, con la libreta de Hello Kitty en sus manos, observando con detalle cada parte del dibujo por si había algún fallo. Escuchó la puerta de su habitación ser golpeada, y se levanto tan deprisa para abrir que tiró un jarrón por el camino.
—¡Llegáis tarde!— Dijo recargándose en el marco de la puerta para que pareciera más "guay", pero su altura no le ayudaba en nada.
—Como se trate de Ezreal me voy— Interrumpió Taliyah, entrecerrando los ojos.
—Pues...— Zoe le acercó a su cara el cuaderno de Hello Kitty para que viera el magnifico garabato que había creado en 3 minutos— ¿Te gusta?, ¡Es mi plan para conquistar a Ezreal!
—Adiós— La morena dio media vuelta dispuesta a irse, pero Zoe se abalanzó hacia ella y la empujó hacia la habitación, si se viera de otro punto de vista, parecería un secuestro. Zoe cerró la habitación con llave, y cuando sus dos amigas voltearon a verla, sintieron el verdadero terror.
—Esta bien, Zoe— Dijo Lulú, evitando chocar su mirada con ahora los perversos ojos heterocromáticos de ella. Pero, cuando dijo eso, saltó de alegría y se sentó en el suelo, al lado de su cuaderno con el garabato.
—¡Perfecto, me ayudareis! Sentaos— Señaló al suelo, para que se sentaran con ella.
—¿Y... cual es el plan? No tengo mucho tiempo, tengo que terminar las tortitas antes de año nuevo— Taliyah no estaba muy segura de que esto mereciera la pena. Zoe puso su cuaderno en el medio, para que todas pudieran ver, y empezó a explicarles.
—Ezreal saldrá de la cita con Lux aproximadamente en... ¡veinte minutos! Cuando termine la cita, irá al abismo de los lamentos a recoger bolsas de nieve para colocarlas al lado del árbol de navidad— Comentó con alegría.
—Oye Zoe, sabes que no puedes dejar tu tarea de decorar la grieta, sabes que te darán un baneo sin poder pelear en la grieta durante quince días— Lulú recordó la vez donde la peli naranja se escabulló para comer la tarta de chocolate y fresas que habían hecho por el cumpleaños de Blitzcrank, y pasó como castigo un mes en su habitación sin poder salir. Zoe iba a responder ante eso, pero unos golpes en la puerta la desconcentró. Se levantó y la abrió. Una camaleona con un color de cabello un poco particular, se tiró encima de Zoe y empezó a gritar.
—¡Neeko te desea feliz Año nuevo!
—¡Todavía no es Año nuevo!— Zoe intentó sacársela de encima, pero ella empezó a achucharla como si fuera un peluche.
—Ya, ya— Lulú y Taliyah separó a Neeko de ella. Zoe se levantó del suelo, y miró con algo de fastidio a la peli-azul, pero de pronto, una idea, una magnífica y brillante idea, se le pasó por la cabeza al contemplar como Neeko inflaba su boca como una rana.
—¡Neeko! ¡Gracias por venir, vas a ser de mucha utilidad!— Las dos amigas, giraron su cabeza hacia Zoe, extrañadas por su repentino cambio de humor. Zoe le enseñó el cuaderno a Neeko— ¡Te convertirás en mí para que no piensen que me salté la tarea!
La camaleona no entendía nada, pero asintió con felicidad al saber que, de tantos intentos que hizo para poder hablar con Zoe, dio resultados.
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Fiesta de año nuevo [Kayn x Zoe]
Fanfiction¡Era Perfecto! ¿No podrías ser la ocasión más perfecta? Una noche antes de año nuevo para conquistar a su chico ideal; o eso pensaba ella. --*--- 27/10/2024 Historia pendiente en editar y acabar. ----------- Portada por: Odeko Yma (Podéis encont...