¿Qué crimen cometiste, chica?

Capitulo 4: La chica y el guardia

Las tres primeras estaban en el comedor devorando esa asquerosa comida que odiaban. Fátima y Farah solo metían alimento a sus bocas y miraban a la contraria, Kira se concentraba en el boceto de su nuevo dibujo. Pero faltaba una en este grupo, nadie sabía en dónde se encontraba Valeria. Pero no parecían ponerle tanta atención a la mencionada.

Kira tenía en su cabeza a aquella mujer que recién se había unido a prisión, trataba de dibujarla. Era un reto para ella recordar aquella cara, pues solo la había visto por un corto tiempo.

-¿Kira? - Habló Fátima sin tener respuesta de la mencionada - ¡Kira!- ese pequeño grito sacó del trance a la chica.

- ¿Qué pasa? - contestó Kira. Era tanto el esfuerzo que hacía por tratar de dibujarla, que su pupila se había dilatado.

- ¿Estás bien? Tus ojos están raros. - Fátima sentía preocupación por su amiga, nunca la había visto de esa manera, tan, pero tan concentrada.

- Sí, completamente bien...ví a una chica en mi sueño y quería tratar de dibujarla. Creo que me concentre de más.

- Come, no queremos que te desmayes más tarde. - Hablo Farah con la mirada en su plato.

Las tres señoritas empezaron a comer aquellos alimentos insípidos que su hogar les proporcionaba.

Al terminar con comida, las tres se fueron a su celda a reposar.

- ¿Dónde está Valeria? - Preguntó Kira.

- No lo sé, dijo que no tenía hambre y se quedó aquí - Fátima contestó a la cuestión.

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- ¿Te imaginas que me pueda escapar contigo por una noche? Solo una noche.

-¿A qué te refieres?- Preguntó mirándola a los ojos y tomando las caderas de la chica  en sus manos.

- Escaparme contigo por una noche...ir a tu casa a pasarla bien y divertirnos, para luego regresar aquí sin que nadie se de cuenta. - Las manos de la chica tomaron el cuello del guardia.

-Sueñas más de lo que deberías, Val - Contestó el guardia.

- Lo sé, pero es divertido imaginar y soñar con eso. - Valeria se separó de él para ir a sentarse en la silla del escritorio del guardia.

-Ya desapareciste por un buen tiempo, regresa a tu celda- Dijo el hombre de lindos ojos.

-Sí, lo sé...- Se paró de la silla para dirigirse a la puerta - Te veo luego - Salió del lugar para ir a la celda con sus demás compañeras.

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Al llegar a la celda, Valeria no habló con nadie, no quería hablar, solo subió a su cama y les dió la espalda a las demás. Su mente estaba llena de Naveen, sus pensamiento solo lo tenían a él en la cabeza.

- Valeria, ¿Qué pasa?- Preguntó Kira mientras la movía. La chica seguía sin contestar, pues una lágrima caía de su mejilla, no permitiría que le preguntarán el por qué de su llanto y ser tan débil para contar toda la verdad. Todos esos pensamientos y sentimientos se estaban haciendo presentes. - Vale, ¿Qué tienes?, ¿Vamos al patio a caminar? -

Todos los días ellas dos salían a caminar sin un rumbo en específico, subían las escaleras, visitaban las celdas desocupadas,   etc. mientras hablaban de cosas sin sentido, se la pasaban bien.

Ante esa pregunta Valeria lo único que hizo fue decir que sí con su dedo índice. Se limpio las lágrimas y parpadeo muchas veces para evitar seguir llorando, aclaró un poco su voz. Y bajo de la cama para ir con su amiga.

-Se podría saber ¿En dónde estabas?- Preguntó Farah.

- Creo que eso no te incumbe, querida- Dijo Valeria mientras salía de la celda con Kira.

- Ustedes dos única se llevarán bien, ¿Verdad? - Kira habló

- No, creo que no - Le contestó con una sonrisa a su compañera.

Valeria y Farah eran exactamente lo contrario, eran como la gasolina y el agua. ¿Por qué? No hay una respuesta.

- ¿Qué era lo que tenías? - Preguntó Kira

-Nada, estaba cansada, creo que no descansé bien anoche. - Valeria no supo que otra cosa contestar - Pero creo que ya estoy mejor.

Ambas caminadan por los pasillos de la prisión.

- ¿Me acompañas? - Habló Kira

- ¿A dónde? - Valeria se puso curiosa

- Si te soy sincera, quiero ver a alguien

Valeria no dijo nada y siguió a su amiga. Llegaron a una zona que nunca había visto .

-¿ Dónde estamos? - Kira la volteó a ver

-No lo sé, pero la ví entrar aquí - Ambas se escondieron tras una pared para que no fueran vistas.

Valeria vió a Naveen paseando por esos pasillos.

- ¡Luah! Trae a la chica para acá - grito Naveen a su compañero de trabajo.

- Si, capitán - Contestó el chico. Luah sacó se un cuarto a una chica, alta, con el cabello desordenado pero lindo, ojos pequeños y un pequeño fletó de lado.

Valeria volteó a ver a Kira, Kira parecía estar en otro mundo, la observaba y la miraba, analizaba todo de ella mientras podía.

-Te atrae mucho, ¿Verdad? - Dijo Valeria viéndola con ternura.

-Sí, apenas la ví mi corazón empezó a latir

- Te entiendo - Claro que la entendía, quién mejor que ella la entendería. El amor era un sentimiento claro para ambas, ambas se habían enamorado a primera vista.

-¿Te gusta alguien?- Preguntó Kira a Valeria

- Es complicado, pero sí. Aún no estoy lista para decirlo. - Le regaló una sonrisa.

Mientras Kira veía a su chica, Valeria solo veía los fuertes brazos de Naveen hacer su trabajo.

- La ví cuando llegó, me llamó la atención. - Valeria veía a su compañera un año mayor que ella como se emocionada por la presa.

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La noche llegó todas estaban dormidas, menos las dos menores Kira y Valeria. Kira mejoraba el dibujo de la chica, haciendo más detalles en su cara y ropa, Valeria estaba acostada en la cama, pensando.

Valeria se preguntaba todas las noches lo mismo, esa bendita pregunta que no la dejaba dormir "¿Él sentirá lo mismo que yo?" Sí, Valeria estaba completamente enamorada de Naveen, pero lo único que él demostraba era que somos era algo pasajero, ella odiaba tener el mismo pensamiento todos los días "Solo te usa, y tú sigues con él, sigues dándole tu cuerpo sin ponerle condiciones."