¿Qué crimen cometiste, chica?

Capitulo 2: Me puedes mostrar el lugar, Naveen (Valeria)

Muchas me tienen miedo en este lugar, al igual que muchas no me tienen miedo. La verdad es que me da exactamente lo mismo.

Corren rumores míos de mis atracos con mi hermano, como que lastimé a mujeres inocentes, o que mi hermano violó mujeres. Ninguna de esas cosas son verdad, pero si soy sincera me da flojera aclarar rumores.

Flashback:

Apenas con dieciocho años y ya estoy arrestada, genial, ¿no?

El guardia que me recibió me miró de arriba abajo, el asco me invadió

-¿Qué? ¿Nunca vio a una mujer antes? -Dije con ironía - Maldito pervertido.- Él me miró de nuevo de arriba a abajo y habló

-Naveen, ponle las esposas tú, no puedo ver a tan detestable mujer - Una puerta se abrió y un chico joven entró por dicha puerta.

En cuanto entró, vi a el chico más guapo y hermoso que nunca había visto ¿Amor? Tal vez, ¿Mi primer amor y a primera vista? Interesante.

-Puedes darme tus manos, por favor - Habló el chico mientras yo obedecía su petición.- Ese idiota nunca tratará bien a una dama. -Sonreí ante su comentario.

-¿Y tú si? -Pregunté con sarcasmo

-Por lo menos sé comportarme ante una hermosa y perfecta señorita- Le sonreí, él me devolvió la sonrisa.

-Yo no pienso llevarla a su celda, llévala tú, Naveen- Dijo el policía anterior

-Okay, oficial.- Dijo él

Caminamos para adentro del lugar, mujeres me gritaban "¡LA PRINCESA DEL ATRACO, ESTA AQUÍ, MUJERES", "¡NUESTRA DIOSA LLEGÓ!" Mientras otras me gritaban "TREMENDA HIJA DE PERRA", "¡NO SERÍAS NADA SIN TU HERMANO, IDIOTA!".

Solo caminaba con el guardia a mi lado.

-Tú nombre es Naveen, ¿cierto? -Pregunté al guardia

-Si, puedo preguntar el tuyo- Su tono ya no era tan amable como antes, era frío.

-Mi nombre es Valeria...Naveen, ¿puedo llamarte por tu nombre?- Dije mientras caminábamos

-Si, no tengo problema - Su tono de voz me vuelve loca - Llegamos a tu nueva casa- Sonrío sarcástico al igual que yo.

-¿Podrías mostrarme el lugar? - Pregunté

-Claro, hoy cambio a turno nocturno, no hay problema...-Hubo un silencio en el que solo nos mirábamos a los ojos. Caminamos hasta unas cuantas celdas más -Bueno esta es tu celda- Abrió la reja - Y ellas son tus compañeras- Me quitó las esposas. Se acercó a mi oído y susurró- Te veo en un rato- Le sonreí y me abandonó en la celda.

-Hola - Una chica pequeña se asomó desde la cama de arriba de una litera - Me llamo Farah, ella es Fátima y la que está dibujando en esa cama es Kira.

-No Pregunté sus nombres, ¿O si? - Dije con cara seria

-Mira niña, por lo que sé apenas eres mayor de edad, comportate como una adulta. -Dijo "Farah"

-No me dirás qué hacer, ¿Okay?. Quiero la cama de arriba.

Naeen abrió la reja de sorpresa

-Hay algún problema, Valeria - Mi cara se iluminó de solo verlo.

-Ninguno, guardia- Dije con media sonrisa en mi rostro.

-Olvide darte esto- Me dio un cepillo de dientes y una toalla. En cuanto me las dio se fue.

-Así que traes medio muerto a Naeen, ¿Eh? -Dijo Farah con maldad- No creo que la superior quiera saber esto.

-En primera, él solo es amable conmigo y, en segunda, métete en tus propios asuntos.

-Con el tiempo nos empezaremos a entender.- Solo la miré y me subí a mi nueva cama

Llegó la noche y Naeen llegó a mi celda

-Señorita, Valeria. ¿Podría venir un momento? - Salí de donde estaba y caminamos por los pasillos- Dijiste que querías que te diera un "tour" por aquí

-Si, ¿y si el tour lo dejamos para mañana?- Dije acercándome a él peligrosamente

-Es una buena idea.- Me pegó a sus labios y nos besamos

-Guíeme a su oficina-

Fuimos a su oficina y ...

Bailé desnuda sobre su escritorio, y sexo, sexo y más sexo hasta que dieron las 5:30 de la mañana y me fui a mi celda.