lo nuestro no te conviene

capitulo 2

LIA WEILLER

Siempre hay momentos en la vida en donde se necesitan cambiar las cosas y esta no es una excepción, como es que de tener toda una vida hecha pasas a tener que comenzar todo de nuevo.

Eso es lo que tuvimos que hacer mi madre y yo después de estar viviendo en Londres toda mi niñez y que ahora tengamos que mudarnos a Miami ya que mi madre va a casarse, otra vez. La verdad es que no me molesta que rehaga su vida de nuevo después de lo que paso con mi padre. Y aun así aquí estoy, bajando de un avión para ir a ver mi nueva casa, mientras salíamos del aeropuerto vimos un mercedes Benz y al costado del auto el prometido de mi madre.

Ella al verlo le da una sonrisa que ilumina toda su cara y lo abraza mientras le da un beso, yo me quedo mirando alrededor, detallando el aeropuerto, era muy grande, había mucha gente, muchos turistas, observo a lo lejos a un señor abrazando aun niño que parece ser su hijo, de inmediato me da una nostalgia muy grande observar la escena tan intima que tenia frente a mi...

-hola Lia-me dice Nickolas interrumpiendo mis pensamientos y sonriéndome tiernamente.

-hola Nick- le digo yo devolviéndole el gesto. Luego lo sigo junto con mi madre hacia afuera del aeropuerto.

Todavía no me acostumbro a ver a mi madre en plan amoroso. Mientras ellos continúan saludándose, un señor de unos 40 años se acerca para guardar mi maleta en la parte trasera del auto, al parecer él es el chófer.

Nos metimos todos en el coche y fuimos rumbo hacia mi nuevo hogar,... tenia el mentón apoyado en la palma de mi mano mientras veía todo el paisaje, me pareció una locura darme cuenta de que esto seria mi nuevo lugar de ahora en adelante. Había gente caminando o sentados tomando un helado, justo en ese instante pensé en mi hermano... ojala estuviese aquí conmigo viendo todo esto, algo me dice que le hubiese gustado mucho. Mientras yo seguía viendo todo en mi panorama apareció algo que llamo mi atención, era mi nueva casa.

Se veía muy moderna y lujosa muy diferente a mi casa en Londres, no piensen mal, nuestra posición económica era media y para mi eso estaba bien, nunca me queje de eso, pero esto es otro nivel.

Al bajarme del auto fue inevitable no detallar la casa por completo, tenia un jardín hermoso era de dos plantas y por lo que se podía ver era la mas grande de la residencia, di una vuelta en el mismo lugar para ver todo a mi alrededor encontrándome al lado una casa casi parecida a la nuestra solo que esa era mas pequeña.

De repente a mis espaldas sonó un claxon me doy vuelta y me encuentro con el camión de la mudanza, de inmediato salen dos mujeres que parece que trabajan para Nick y empiezan a sacar cosas del camión, decido ayudar así que me acerco a el camión y saco una caja no muy grande y me adentro a la casa, ¡wow!... es enorme el piso esta hecho de cerámica blanca, al verlo se puede ver tu reflejo en el, las paredes son entre grises y blancas, me adentro un poco mas a la casa y veo que hay una sala muy grande nada mas entrar, los muebles son de cuero negros y le da una elegancia a todo que te deja atónita. 

Entre el mueble y el televisor que hay en frente hay una mesa de vidrio con base de cristal y encima hay fotos de lo que parece es la familia de Nickolas, debajo de la tele hay una chimenea eléctrica que esta incrustada en la pared, debajo de la mesa de vidrio hay una alfombra negra que hace juego con el mueble y mas allá de ese espacio que es bastante grande hay una mesa redonda pequeña con dos sillas como para tomar un te o sentarse a conversar, después de eso esta la cocina que se conecta con sala, esta tiene tonos grises y blancos, dándole un tono fresco y sofisticado a todo el lugar.

 La cocina tenia en el medio una isla de granito gris y en ella estaba el lavadero que era plateado, al frente de la isla había un mueble de madera de un color marrón muy lindo y la cerámica de esta era blanca, encima habían muebles del mismo color y rodeaba casi toda la cocina, al llegar al final de la pared estaba la nevera, la cual si no fuese porque Noé apareció de la nada y la abrió pensaría que es un mueble mas de la cocina, este se voltea, me ve y de inmediato se abalanza sobre mi haciendo que tenga que poner la caja en un solo brazo y me da un cariñoso abrazo.