16: "¿Cita?"

656 47 19
                                    

Narra Vegetta

Ya era la hora acordada que tenia prevista con Rubius, al final Luzu y Auron me dejaron arreglarme en su habitación para no hacer el ridículo con el o para que no volviera a suceder algún percance con su oso interno, no es que no confié en el, solo es para prevenir, no me permitiría que volviera a arruinar dos hora de perfeccionar mi peinado

Pasado un rato pude bajar para esperarlo en la recepción y no volver a perderlo, me puse algo bastante sencillo a mi parecer, un pantalón de mezclilla y una camisa negra que me quedaba algo ajustada pero no demasiado, creo que era muy simple para mi gusto pero prefería estar cómodo, pues no voy a salir con cualquier persona, saldré con Rubén Doblas, posiblemente la persona mas impredecible del mundo, nunca se pueden tener expectativas cuando se trata de el pues sin importar que, de alguna manera siempre encuentra la manera de romperlas, así que tenia que esperarme lo inesperado por lo que mas que nada procuraba prepararme mentalmente para lo que sea que pueda pasar durante lo que resta del día que este con el. No fue una sorpresa el haber pasado mas de lo esperado en la recepción esperándolo pues el tontito siempre llega tarde, aunque no fue tanto tiempo como lo esperaba si fue notorio considerando la hora acordada. Me sentí como niño bobo de secundaria apenas lo vi a lo lejos modelar por el pasillo de la recepción, traía su típico pantalón negro con una sudadera casi tan blanca como su piel misma y ni hablar que hacia contrastar a la perfección con esas piedras preciosas cual esmeralda que el llama sus ojos, tenia que admitir que se veía muy bonito, sin mencionar que sus orejitas de oso ayudaban con esa labor.

- Mira quien se digna en aparecer, creía que me dejarías plantado, pero como siempre el señorito llega tarde - hable algo indignado una vez ya estaba mas cerca de mi mientras me cruzaba de brazos enarcando una ceja

- Si hola Rubius ¿Qué tal estas? bien, oh es bueno saberlo - reprocho con tono sarcástico imitando mi acción de cruzarse de brazos mientras me veía fijamente con un puchero, se supone que debería de intimidarme por su enojo pero a mis ojos eso solo hacia ver mil veces mas tierno mas no dejaría mostrar mi sonrisa interna pues seguía "enojado" con el - ¿Nunca podrás saludarme decentemente sin reprocharme alguna cosa cierto? - eso ultimo lo dijo cambiando su puchero por una sonrisa ladina, si no lo conociera tan bien no sabría que se esta aguantando la risa por el berrinche que acaba de hacer

- Lo hare el día que llegues a tiempo, mientras tanto tendrás que aguantar así como yo aguanto estar esperándote - conteste a su reproche deshaciendo mi postura para cambiar mis brazos y esta vez poner mis manos en los bolsillos delanteros de mi pantalón - Pero eso ya no importa, lo que importa es que ya estas aquí y eres todo mío por el resto del día así que ni se te ocurra irte por ahí a hacer el tonto - dije aguantándome una risita recordando aquella vez en la que habíamos ido a comprar películas y termino gritándole a una niña porque le gano un peluche de  una maquina de garra que había en la zona... no fue un lindo día para mi, pues tuve que disculparme mucho con la madre para que no nos echaran del lugar los de seguridad, me sentí como si fuera el padre de un niño pequeño.

- Si, si, si, ¿No me quieres hacer firmar el papel de propiedad también? - dijo esta vez mostrando por completo su sonrisa negando con la mano por su propio comentario - Relájate, no me dan ganas de avergonzarte en un pueblo donde nadie te conoce, si lo hago tiene que valer la pena - respondió acercándose a mi para golpear mi hombro con su codo en forma de broma, ante esto solo pude rodar los ojos con gracia soltando una leve risita, además de posar una de mis manos en su hombro haciendo poco de presión en este para que volteara a verme

- Entonces mas me vale aprovechar antes de que cambies de opinión - dije con una sonrisa para después jalarlo del mismo hombro que lo mantenía sujeto para comenzar a avanzar fuera del hotel. El cielo estaba pintado de un color naranja muy característico de las tardes, no creo que tarde mucho para que caiga la noche estrellada tan bonita que tiene este pueblo.

"Omega por Accidente" Rubegetta-Omegaverse [REESCRIBIENDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora