Profe, Creo Que La Amo...

Cada vez que te miro...

Las caras en casa de Matilde eran dignas de ser enmarcadas pues todes estaban tomando jugo de naranja mirando a la nada canalizando que la resaca no era real.
Lxs hermanxs pequeños de Matilde se habían ido donde sus abuelos a pasar el día en la piscina.
Mientras tanto en la casa de Aurelie, ella y Ana estaban sentadas en el patio con una taza de café mirando a la nada pensando en que no deberían haber tomado tanto.
- Mi error fue mezclar- dijo Ana.
- Mi error fue tomar tanto tequila, ya no estoy para esos trotes- dijo Aurelie
- y más encima tenemos que ir a buscar el auto.
- ohhh mierda, lo había olvidado, entonces alistemonos para no ir tan tarde.
- si, totalmente de acuerdo querida- dijo Ana.
Ambas partieron a ducharse y cambiarse de ropa. Aurelie se puso unos shorts de tela blanca y una polera negra con un estampado de las fases lunares, encima un chaleco delgado tipo cardigan color gris, unas chinitas negras, sus lentes tipo John Lennon, un poco de maquillaje para disimular la resaca, el pelo tomado en una cola con unos mechones sueltos adelante y listo. Ana por su parte llevaba un vestido ligero color palo rosa con unas sandalias, unos lentes tipo Cat eye, un poco de maquillaje y su pelo recogido en un tomate un tanto desprolijo. Pidieron un taxi y se fueron a la casa de Matilde en busca de su auto.
- les tinca si hacemos una salida? Aprovechando que no están los niños podemos ir más relajados- propuso Emma
- aunque quisiera quedarme todo el día durmiendo, admito que me hará bien salir a tomar aire- respondió Valeria
- no cuenten conmigo, en cualquier momento me reúno con San Pedro- dijo dramáticamente Alonso que estaba con unas rodajas de papa en la cabeza para aliviar su jaqueca.
- iremos todes!- afirmó Monse- así que busca una bolsa para echar tus papas y salir de aquí.
- Nosotras vamos si o si-dijo Javi- total pedimos el lunes y martes libres para venir y pasarla bien.
-bueno, entonces no se diga más, nos alistamos y nos vamos- dijo Matilde.
- okei, muchas ganas de ir, pero no tenemos lugar, a donde vamos a ir?- preguntó Gonzalo
- les tinca arrancarnos a la playa?- preguntó Emma-
- Siii, me encanta, vayamos a Quintero porfa- dijo Matilde.
-Okei, no se diga más alístense y nos vamos- respondió Emma.

Así todos comenzaron a arreglar sus bolsos para el día de playa, trajes de baño, toallas, cartas, un pequeño picnic y todo al auto, más bien, en los autos, puesto que Javi y Minerva se irían en su auto. Cuando estaban a punto de partir vieron que llegaba un auto al portón, a Matilde se le iluminó el rostro al ver que quien se bajaba del auto era Aurelie.

-Holaaaaaa!-dijo Ana animosamente.
-Hola a todos y todas!- dijo Aurelie- Vinimos a buscar nuestro auto y nos vamos.
- Se irán? tienen cosas que hacer?-preguntó Minerva
-Noo, no tenemos nada que hacer, solo dormir y flojear-respondió Ana.
-Entonces vengan con nosotres, vamos a la playa a pasar el día- les propuso Minerva.
- Siii, vengan, va a ser bakan- añadió Javi.
-Pucha es que no andamos trayendo nada- dijo Aurelie
- Pero se van con la Javi y Minerva y pasan a buscar cosas a su casa, así aprovechan para pasar la resaca en la playa- dijo Matilde.

Para Aurelie fue suficiente con las primeras palabras de Matilde para convencerse de ir con ellos.

- Está bien, vamos, ehh o sea si Ana quiere jajaja, amiga ¿quieres ir?- le preguntó a Ana
-Obvio, vamos, eso sí, puedo cambiar de auto después, es que me quiero ir conversando con Emma, ustedes saben, cosas de pasteleras jajajajajaj- dijo Ana
- Si, por supuesto, Mati, tu te podrías ir con la Javi para que Ana se vaya con nosotros?-preguntó Emma
-Si obvio, no hay problema!-dijo Matilde casi al instante.
-Okei, entonces allá hacemos el cambio, Javi váyanse ustedes primero, nosotros cerramos acá y las alcanzamos, nos mandan su ubicación, dale?- le dijo Gonzalo a Javi
-Okei, no hay problema- dijo Javi y emprendieron rumbo.

AL llegar a la casa de Aurelie, ella y Ana parecía que estaban en una competencia ya que en un tiempo casi récord salieron de la casa cada una con un pequeño bolso y Ana llevaba otro más con cosas para comer, hicieron el respectivo cambio de auto y a penas Javi comenzó a manejar, las bromas también comenzaron puesto que Matilde y Aurelie solo cruzaron una mirada acompañada de una tímida sonrisa.

- Ya po, salúdense como corresponde!- dijo Minerva
- Mish, ahora están todas tímidas, denle no más, aprovechen, solo vamos nosotras en el auto, así que no les diremos nada, es más, ni las miraremos.- dijo Javi.

Matilde y Aurelie se quedaron mirando fijamente, ambas sabían lo que querían hacer, ambas sentían que el corazón les iba estallar, solo existía la una para la otra, y casi sin darse cuenta ya se habían acercado lo suficiente como para no poder distinguir a quien pertenecía cada respiración y sin más se besaron, un beso dulce cargado de "te quiero y te extraño", un beso pausado, un beso, un simple beso que significaba tanto...

- te extrañé- le susurró Aurelie a Matilde
- y yo a uste...a ti- respondió Matilde
Y volvieron a besarse, esta vez un beso más corto, el cual fue seguido de un abrazo.
- ¿estás muy cansada serendipia?- preguntó Aurelie.
- la verdad si, estoy cansada, con flojerita jajaja- respondió en tono tierno Matilde.
- ven- le dijo Aurelie, señalándole sus piernas- recuesta tu cabeza acá, estiras las piernas y descansas un ratito.
-ya.
Matilde apoyó su cabeza en las piernas de Aurelie y estiró sus piernas. Ambas quedaron mirándose a los ojos, por la forma en que se miraban, se notaba que su amor era tan fuerte que podría acabar con cualquier guerra u odio. Aurelie comenzó a acariciar devotamente el pelo de Matilde, desde la raíz a las puntas, no podía creer que hasta su pelo fuese tan mágico y especial.
Javi puso la canción "disfruto" en la radio, y eso fue el broche de oro para aquel momento tan bello que estaban viviendo
Matilde que se sabía muy bien la canción, empezó a cantarla despacio, sin despegar la mirada de Aurelie quien le seguía acariciando el pelo, mientras Matilde acariciaba suavemente la hermosa piel dorada de su querida Aurelie, era como una droga para ambas el contacto que estaban teniendo, les encantaba disfrutarse con tranquilidad tal como decía la canción que estaba sonando y que ya llegaba a su fin. Apenas la canción dejó de sonar, Matilde y Aurelie unieron sus labios en un largo beso cargado de amor y tranquilidad.

- ¿Qué me estás haciendo serendipia?- preguntó Aurelie en un suspiro
- ¿Por qué?- dijo Matilde
- Porque cada vez que te miro, el resto del mundo desaparece, cada vez que te beso parece que estuviera viviendo un milagro y cada vez que te acaricio todas las canciones de amor cobran sentido- le respondió Aurelie dejando salir todo lo que sentía en ese momento. Matilde por su parte se quedó boquiabierta, las palabras de Aurelie la sorprendieron sobre todo por la bella forma en que lo dijo.
- Perdón si fue demasiado, solo lo dije y...-
Aurelie iba a hablar pero Matilde la calló con un beso para demostrarle cuánto le habían gustado sus palabras.
- No tienes que disculparte, tus palabras fueron realmente hermosas y se quedarán grabadas para siempre en mi memoria- le dijo tiernamente Matilde, para luego besarla dulcemente...

Nota de la autora: Mis queridxs lectorxs!!! No saben cuánto me costó sacar este capítulo pero ya está!!! Espero que les guste mucho y pues como dato les quiero compartir que habilité un Instagram como escritora para que me sigan, ahí subiré adelantos de la novela, encuestas, imágenes relacionadas y también otros escritos propios💞💞 lxs espero en Instagram 💞 mucho amor, luz y zazz para ustedes. Gracias por leer
@ marcelaamandamonserrat lxs espero!!!!