Capitulo IV: Una vida sin ti

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Carly:

Me encontraba en mi habitación, le había reclamado fuertemente a mi padre, primera vez que peleo así con alguien, como si Sam tuviera la culpa de la reacción tan machista del Italiano, en un momento así mi padre debería apoyarme, debería darme su mano amiga, su mano de padre, pero en vez de eso, me reclama y me dice que cambie o si no volveremos a América, estúpido no, si, estoy tan enfadada que se oyen esas palabras salir de mi, pobre Sam Si se entero, que es lo más seguro, debe estar devastada, no es justo, de verdad no es justo, pero a como dé lugar, hare lo mismo que hizo Sam para verme, me iré a América, cueste lo que cueste, y tenga que hacer lo que tenga que hacer, en eso mi papá me llame, me levante y fui, estaba en la sala sentado y me hizo señas que me sentara enfrente de él. 

Carly se que amas a Sam, desde pequeña eran amigas y esa amistad se pudo convertir en amor. 

Si así es – dije con tono serio 

Pero mi amor entiende, no es permitido, no pueden ni adoptar niños, es mas ni deberían hacerlo, Carly quiero que me entiendas. 

No papá, en la escuela se burlaban por lo mismo, hasta nos molestaban, y aun así seguimos adelante, el amor verdadero no tiene sexo o color, las dos queremos mucho y punto. 

Pero Carly hija – dijo algo preocupado e incomodo 

No papá tu miedo machista es estúpido, y no va impedir nuestra relación 

Bueno Carly, lo lamento, no iremos a América hasta que lo comprendas así tardemos toda la vida. 

Gracias papá ya se cuanto me quieres. 

Me levante, tome mi abrigo y Salí a dar una caminata para despejar la mente y planear mi escape para ver a Sam, en la caminata veía a Sam en todos lados, extrañaba su forma de ser adorable y bizarra a la vez, era la dueña de mi pensamientos en estos momentos, y no podía imaginar una vida sin ella, una vida sin ti Sam, me senté justamente donde estuve con ella en nuestro último reencuentro, ahora esa última palabra a tomado un significado más trágico y fuerte de verdad, será de verdad la última vez que nos vimos, no, no deja de pensar eso, Sam te juro que te volveré a ver, a como dé lugar. 

Sam: 

Llegue toda empapada al apartamento, Cat a verme en ese estado se preocupo y se acerco, yo estaba recostada a la puerta ya no podía dar un paso más. 

¿Qué sucedió? – pregunto muy exaltada 

Nada – dije con una frialdad absoluta 

Pero te ves terrible Sam, tienes los ojos rojos, ¿Por qué llorabas? 

No, Cat solo me caí por la lluvia, eso es todo – respondí intentando dar un paso 

Sam – dijo mientras me ayudaba a caminar para llegar al sillón 

Una vida sin ti Carly, es algo que no estoy segura de soportar, no estoy preparada, y jamás lo estaré, terminare loca de verdad, pero no puedo concebir una vida sin ti, Carly te amo, no sé cómo pero te veré, y sé que tu harás lo mismo, un llanto se me escapo, Cat me abrazo poniendo mi cabeza en su pecho y golpeando suavemente mi espalda, me solté a llorar. 

Ya, ya Sam tranquila, cuéntame que pasa – decía Cat mientras me consolaba 

No lo entenderías Cat – dije alterada por el llanto 

Claro que si 

No 

Vamos Sam confía en mí, somos amigas 

De acuerdo – dije calmándome un poco 

No sé porque accedí a contarle, seguro necesitaba hablar con alguien, le conté desde el principio, detalle a detalle, desde que iniciamos nuestra relación, el reciente reencuentro, el problema que se origino con su padre, todo, Cat ponía muecas de asombro y de lastima, hasta de ternura, cuando termine me quede callado esperando un consejo algo, Cat me miro a los ojos por unos segundos, sonrió y me tomo de las manos. 

Sam, no te preocupes Carly te ama y buscara la forma de verte, ten paciencia te aseguro que ella vendar solo a verte, seguirá el ejemplo de lo que tú hiciste. 

¿tú crees? 

Claro Sam, el amor no tiene limites 

La respuesta de Cat me calmo, es cierto Carly tampoco se quedara quieta, estará planeando como venir en estos momentos, abrace a Cat en señal de agradecimiento, me cambie y me acosté a dormir, con una esperanza renovada podríamos decir. 

Carly: 

Me encontraba inquieta no podía dormir, hasta que mi mente se ilumino, hare lo que Sam hizo, pero un poco mas planeado, iré allá para verla, me vestí, escribí una carta y la deje encima de mi cama, abrí la puerta con sumo cuidado, algo de Sam se me debió haber pegado al final de cuentas, me moví con calma y sin hacer ruido, abrí la puerta de nuestro apartamento con el mismo sigilo. 

Adiós papá – susurre y cerré la puerta 

Me dirigí al aeropuerto y tome el vuelo nocturno a Seattle, Sam se quedara sorprendida cuando me vea, pero antes de verla debo hablar con Spencer, para terminar de ejecutar mi plan, hasta yo estoy sorprendida, bueno el amor lo mueve todo, no. 

La melancolía de Sam PuckettDonde viven las historias. Descúbrelo ahora