No fue coincidencia

V

Suspiro mordiendo sus labios, la manera en que su alfa peleaba con ella misma no le dejaba estar tranquila, sintió un fuerte dolor de cabeza, no sabía cómo controlarlo, las fuertes sensaciones que sentía en su pecho eran bastantes.

Enojo, enojo porque conocía los sentimientos y situaciones, actos que habían pasado entre aquella omega y la alfa, celos, su alfa estaba celoso, aquel nido olía a la peliblanca, había cuidado a su omega cuando ese era su deber, estuvo ahí, quería tomar lo que era suyo, marcarlo dejar su aroma en el cuerpo de la menor, ella sabía que exageraba, e intentaba entrar en razón más le era imposible.

Ella sabía que no debía dejarlo salir, no quería arrepentirse. No quería causar un problema, por su parte la omega temblorosa intentó soltar sus feromonas, se fue arrinconado de poco a poco hasta topar cerca de la pared, pero sólo hizo que Adora enfureciera, se movió, hasta dar a ella y acorralarla, estaba presionando a la omega contra la pared, gruñendo metiendo su nariz a el cuello de la menor, intentando encontrar alivio a su dolor.

Su omega había estado en contacto con otro alfa, Catra gimió por el agarre que hizo en la cadera, no lo pensó, simplemente se acercó y comenzó a dejar su aroma en la omega abrazándola, pero eso no le parecía suficiente, puesto que aún quedaba rastro de él aroma tan molesto .

-A-Adora -jadeo, una vez sintió que su cuerpo era levantado, siendo forzada a abrazar la cadera de su mayor con las piernas- detente por favor.

Un gruñido fue su única respuesta hacia la omega. Ninguna de las dos podía ponerle fin si algo comenzaba, Catra podría entrar en celo si Adora comenzaba algo fuera de lugar, y Adora podría lastimarla debido a que no lograba calmarse, la mencionada le llevó a la cama, la omega cada vez se iba sintiendo más perdida por el tacto de su alfa, quien besaba el cuello tomando su cadera, pegando su cuerpo contra ella, mordió suavemente la piel, comenzó a desvestir a la de menor tamaño.

-Adora -Jadeo llevando sus manos a los hombros de la mayor- detente esto no...

Fue interrumpida tras sacar un gemido, causante de la rubia, que comenzaba a comer sus pezones, mordiendo, lamiendo y succionando los mismos, la omega no sabía en qué momento había quitado su ropa, estaba en ropa interior mientras la contraria conservaba toda su ropa, aun así, no era suficiente para la mayor quien buscaba cada vez más.

Comenzó desabrochando su cinturón con algo de desesperación, para ese momento el bulto entre sus piernas era evidente, quería tenerla anhelaba hacerlo, quito su saco, así como la camisa, sin agacharse quito sus botas, haciendo uso solo de sus pies ayudándose uno con otro hasta quedar descalza, bajo su pantalón estando a la par de la menor.

-Calmate...

Suplico entre gemidos por última vez, hasta que sintió como los dedos de su alfa tocaban la mojada área genital, frotando con algo de fuerza, aquella sensación que recorría toda su espalda le hacia arquearse estaba sensible por el celo, Adora no dejó de moverse y sacó ventaja de la situación.

Comenzó a morder su pecho, marcandolo, visibles marcas por la clavícula, abdomen, se deshizo de la ropa interior de la felina y mordió sus labios, adoraba ver en su máximo esplendor aquella vagina que tanto ansiaba tener, se acercó a morder sus muslos, los cual evidentemente marcó una vez mas, alzó un poco el cuerpo de la menor y le miró.

Sus pupilas estaban dilatadas, su respiración se agitaba por la manera en que tocaba, lo entendió enseguida estaba volviendo de nuevo a su celo, se perdía en el, aquellas feromonas comenzaron a invadir el lugar, haciendo aún más grande el deseo que tenía por penetrarla, comenzó a lamer aquella zona, frotando su lengua contra aquel sensible punto de la menor, una vez más su espalda se arqueo por aquella sensación que causaba su lengua, sus manos tomaron con firmeza la cabeza de la rubia y mientras está movía la lengua.

Catra jadeaba, jadeaba buscando llegar al orgasmo por la boca de su amada, quien se movía con rapidez cuando casi estaba por venirse. Se detuvo haciendo que esta le mirara enojada.

No habló, no podía hacerlo su cuerpo ardía, dolía el no poder terminar. Ardía, su cuerpo estaba tan caliente que sólo deseaba que la hiciera suya.

Un pequeño sonido emano de entre sus labios, pidiendo que la tomará, ella no estaba en sus cinco sentidos, Adora le miraba, estando de pie mientras se quitaba el brascier, el omega aprovecho, dándose vuelta para quedar boca bajo alzando un poco la cadera, dejó que su pecho tocará la cama, "invitando" a que la tomará.

Su alfa no lo resistió, no podía quito su ropa interior lo más rápido que pudo, dejando ver su miembro totalmente excitado por tenerla, entró con fuerza sacando un gemido que causaría dolor a la garganta de Catra, el alfa se comenzó a mover con fuerza y rudeza sin ningún tipo de remordimiento.

El cuerpo chocaba, chocaba con fuerza intentaba dejar en claro quien mandaba se inclino, estaba por morderla pero se detuvo, se detuvo porque no podía no se permitiría, no quería y si lo hacía ella podría arrepentirse. Jadeo.

Gemia al sentir como las paredes se cerraban, apretó las sábanas rasgandolas, mientras sentía como el espasmo se apoderaba de su cuerpo, miró como la cola se enredaba en su cadera y se erizaba, se dejaba caer, pero Adora sujeto su cadera, obligándola a seguir hasta que ella terminará, presionó su cuerpo y gruño, moviéndose hasta que sintió que ya no podía más, salió terminando en la espalda de la menor, soltó su agarre y el cansado cuerpo cayó a la cama entre jadeos, y respirando agitadamente.

Esto no iba a ser suficiente, sabía que debía tener más, Catra se volteo y le miró, aún con la pupila dilatada, Adora estaba sentada por lo que solamente sonrió, le atrajo hacia ella, y dejó que se sentará mientras comenzaban a besarse, jugueteaban con la lengua de la otra.

Se posicionó y Adora se alineó para que entrara, observó como Catra se dejaba caer suavemente apretando los dientes por la sensación, su cola se enredo en el brazo de Adora y esta sonrió mientras le permitía moverse, de arriba hacia abajo, con rapidez mientras la morena le sujetaba del cuello, besándola con total pasión, buscando que sus besos calmaran el dolor que aún sentía.

Adora miraba como su pequeña omega se movía buscado llegar al orgasmo, algo que le encantaba ver, mordió su labio, Catra cerró sus ojos y jadeaba, de un momento a otro pequeños suspiros con el nombre de la alfa se escaban, el alfa se sentia demasiado excitado por la manera en que se movía, ladeaba las caderas, y ella quería más, quería solo terminar sobre su omega.

Le sujeto y le cargo para acostarla de espaldas a la cama, sin siquiera separarse de ella, acomodándose entre sus piernas, abrazo su espalda, mientras Adora coloco sus brazos a los costados de su cuerpo, y comenzó a moverse, con fuerza, sus piernas se abrazaron a él cuerpo de la rubia, y de la misma manera su cola se aferro a la pierna, sus garras se clavaron en la piel, sacando un gruñido por su parte, disfrutando de la manera en que se comportaba la menor.

Catra se acercó al cuello de su alfa y mordió con fuerza el hombro un poco cerca del cuello dejando clavados sus dientes en la piel, y algo de sangre escurrió, Adora le observó sorprendida. Eso sin duda dejaría marcas pero no fue algo que le preocupo solo queria dejarle en claro quien mandaba. Adora se movió rápido observando como alzó su cadera y de nuevo, ella estaba por terminar. Se detuvo.

-Por favor, hazlo...

Pedía que continuará quería, el ardor en su zona baja era doloroso, Adora sonrió y se alejo un poco sacándolo un poco, catra suspiro.

Y de nuevo lo metió de golpe, causando que la menor gimiera, aferrándose nuevamente a ella y presionara nuevamente su cuerpo, sin duda era el placer más raro y exquisito que había probado hasta ahora.

Adora volvió a alejarse lentamente, y embestio con fuerza.

Una.

Dos.

Tres

Cuatro.

Perdió la cuenta, pero no fueron muchas hasta que terminaron e intento que lo hiciera dentro, pero salió justo a para dejar sucio el abdomen de su omega.

Adora se dejó caer la cama y catra. Ella ya había quedado sin energías, el cuerpo débil del omega había quedado totalmente dormido tras terminar.

La alfa sólo cerró los ojos y ambas quedaron dormidas