El Avión (parte 2)

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Después de ese beso lentamente JongIn fue acostando a KyungSoo en la cama. Poniéndose arriba de él. Lo que hizo en una inercia al omega abrir sus piernas para dejar posicionar al alfa en su cuerpo.

Suspirando y sintiéndose bien por el toque suave que JongIn ejercía sobre él. Sus respiración ya era pesada, mientras pasaba sus manos por detrás de la nuca del alfa.

Suspiro de gusto al sentir su cuello ser atacado en besos y mordidas suaves. Sus ojos estaban cerrados pues estaba disfrutando del toque suave del mayor. Sobre todo la forma tan tranquila que lo estaba haciendo, mas sin embargo, no podía darse el lujo de decir que sería de esa forma pues JongIn a veces siempre le gustaba llevar todo a su manera. Y KyungSoo simplemente se dejaba.

—JoongIn~~~

Susurro el Omega jadeando de placer por lo que estaba pasando. Su respiración fue pesada cuando le llamo de esa forma tan erótica. Lo miro deteniendo sus acciones por un momento.

—¿Qué sucede amor? ¿Te estoy lastimando? ¿Estoy llendo muy rápido?

Instantáneamente hubo una negación por parte del bajito.

—Solo quería saber si... Usaremos los juguetes... Ya sabes cuáles.

Dijo avergonzado y JongIn soltó una risita para mirar al Omega.

—No amor, no ahorita, será hasta que lleguemos a París ¿Te parece? No quiero que estemos en pleno juego y tengamos que parar.

Sonríe dándole de nuevo besos en el cuello, haciendo que el Omega de nuevo suspirara por esos toques tan eróticos que JongIn ejercía sobre su cuerpo.

—Esta bien~

Dijo y quitó su camisa del alfa, quien seguía atacando al Omega sin dejar de hacerlo en ese momento. Era verdad, tal vez no jugarían de esa forma, pero no quitaba que necesitaba a KyungSoo.

Le fue desprendiendo de toda su ropa, aventando la a no sabía dónde, al final dejo desnudo a su Omega en medio de la cama. Bajo su boca al pezón izquierdo empezando desde su centro y paseando su lengua por la aurolea para después hacer lo mismo con el otro pezón.

Sus botones rosaditos eran el punto más débil que pudo encontrar en su Omega, había más pero no quitaba que justamente ese punto sensible le hiciera gritar y ponerlo erecto en el menor tiempo posible.

KyungSoo se estremeció.

—¡JongIn!~~~

Sonriendo el alfa no dejo de hacerlo hasta que supo su muy sensible Omega ya estaba excitado.

—Mira que duro te has puesto y solo he jugado con tus pezones... Solo han sido unos toques y mmmmmgh~~

Hizo un sonido de gusto al darse cuenta que, el lubricante del menor ya había hecho acto de presencia.

—Tu lubricante salió mi amor...~~

—Oh~~~

KyungSoo no reprimía los sonidos de su boca y menos que en ese momento el alfa estaba acariciando su pene por encima de su boxer.

—Jooong~~ ¡alfa!~

El moreno ya había empezado a masturbarlo haciendo que él menor apretara las sábanas bajo su cuerpo y aunque se quiso mover puso toda su fuerza de voluntad para evitar hacerlo.

—Mirate nada más, estás hecho un desastre y eso que apenas estamos empezando...~~

De forma casi inmediata las manos pequeñas se dirigieron a su boca tratando de callar los gritos de placer que querían salir, pero el alfa no permitiría eso, oh no, él quería escuchar a su bonito niño gritar y pedir por más.

Le importaba una mierda si los empleados del avión escuchaban, le valía madres eso. Solo quería escuchar a su KyungSoo gritar pidiendo que fuera más rápido. Esa voz que solo la escuchaba y hacía que se excitara demasiado.

Bajo lento dejando un camino de besos y chupones, quería marcar de todo a todo a su Omega. Beso el vientre, esa zona sensible y sagrada para ambos. Pues ahí en un futuro veía a KyungSoo dándole cachorros.

Aún no, él todavía quería disfrutar del Omega de esa forma, hacerlo suyo hasta que se quedará sin voz y al final limpiar el desastre que haría de él.

Hacer de su cuerpo su templo.

Siguió bajando hasta que paseo su lengua por aquel falo, aunque no era tan grande como el suyo ni proporcionado de grosor, para el que tenía KyungSoo le parecía perfecto y al final lo más maravilloso de él.

Empezó a pasar una y otra vez su lengua hasta que decidió meterlo a su boca. Chupando y lamiendo, hasta los testículos.

Disfrutando de ese momento, KyungSoo siendo un mar de gemidos en ese instante por lo bien que lo sentía. Apretaba las sábanas ponía toda la fuerza de voluntad que tenía para no empujarse en su boca.

—Mmmmmmgh~~~ Jooooong~~~ ¡Oh!~

No dejaría al Omega tener su orgasmo tan rápido. Por eso al sentir como estaba empujando un poco paró.

—JongIn~JongIn~JongIn~

Gimoteando el Omega lo llamo pues quería correrse pero esos no eran los planes del alfa, aún debía de hacerlo sentir más placer.

—Shhh~ aún no términos, y no dejaré que te corras si no me tienes dentro.

Cargando su delgado cuerpo lo alzó el alfa al pequeño bajo suyo.

—Te haré mío ahorita pero en París... Ahí te haré el amor de tantas formas que quedarás sin voz.

Una sonrisa picara se asomo en la cara del alfa haciendo al menor  sentir un cosquilleo en su pancita. Asintiendo solo con un movimiento de cabeza.

—Me gusta eso me gusta~

Fue puesto boca abajo dejando su trasero alzado. Le sostuvo bien de las caderas y al separar sus nalgas vio la entrada rosa palpitando y con lubricante. Su lugar favorito.

—Por favor~ por favor~

Escuchó el gimoteo desesperado y le dio una pequeña nalgada en su glúteo izquierdo. Haciendo que el menor soltara un ruidito de sorpresa pero gusto.

—Hare lo que mi Omega pide.

JongIn se bajó su boxer que era la única tela que quedaba cubriendo su cuerpo. Ya estaba erecto y ¿Cómo no? Si le había una afelacion a su hermoso Omega mientras esté se retorcía bajo su cuerpo. En ese instante beso aquel glúteo donde le había dado la nalgada.

Oh si... Haría suyo a ese Omega sin importar que los escucharán. Ya estaba erecto y lo quería.

Lo quería y lo haría.

Lo quería y lo haría

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Anie-KyMs

Enfermo De AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora