Capítulo 7: Surtido de hierbas

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En una de las tiendas del centro de la ciudad compro un libro nuevo de recetas de galletas. Se supone que era un recetario nuevo estrenado hace poco en las librerías, y muchos de sus conocidos que lo habían comprado decían cosas positivas de el, aunque igual podría experimentar con su pequeño nuevas cosas si no era lo que esperaban.

Siguió caminando bajo el luminoso sol de primavera. Los dueños de los negocios cercanos salieron a su paso, hablándole y saludándole, incluso, el dueño de una florería le regalo flores de la estación.

Rosemary es una persona respetada por las personas, incluso quienes no la conocían no podían faltarle el respeto. Porque podrías recibir miradas molestas por las personas que la conocían, o ella misma te dejaría en vergüenza.

Quienes la saludaban habían sido ayudados por ella, quien no les había exigido nada a cambio.

La temible Dama de Hierro.

Sus comienzos como abogada en contra de los crimines e injusticias contra los Betas y Omegas fueron difíciles y no tuvieron un gran movimiento en su tiempo. Costo, pero logro que esas injusticias recibieran un castigo.

Ahora tenia el titulo de jueza, respetaba a todos por igual, y ese respeto se lo gano en tribunales.

Rosemary caminaba con paso tranquilo hasta un hombre de castaños cabellos de vestimenta formal. Como le gustaba la formalidad fingida de su esposo, porque en el interior de su hogar, era la persona más dulce y sencilla, solo quería mostrarse serio ante los demás.

La mirada seria busco la figura de la omega, y con ojos cálidos extendió su mano, y ella la tomo encantada, solo para acercarse y besar la mejilla del alfa.

- ¿Miles sabe que iremos a su casa?

Ella le sonrió inocente, y Amadeus entendió que esta visita era sorpresa. Solo comenzaron a caminar en dirección al lugar en una charla tranquila. Mientras que Rosemary le llevaba a su hijo cosas pequeñas, su padre le llevaba un regalo que seguro le serviría si decidían hacerle daño.

Como era de esperarse el local estaba cerrado, pero ellos tenían la llave para entrar. Amadeus encontró un poco de desorden cerca de una de las mesas. Llamo a su esposa y ambos caminaron en silencio, subiendo por las escaleras hasta llegar a la puerta que les daba la bienvenida a la casa de su hijo.

La puerta estaba abierta, así que la abrieron lento y escucharon algunos murmullos...

- ¿Que estas diciendo?

Era la linda y hermosa voz de su hijo, y al parecer tenia visita. Pero Amadeus antes de si quiera pensar en retirarse por respeto a la privacidad de su amado hijo, escucho por segunda vez en su vida, aquella frase que hizo que su pequeño y adorable Miles se fuera de la casa...

- ¿Podría cortejarte?

Y la ira broto como hace años. Tomo la escoba que estaba al lado de la puerta, y como si fuera una espada la empuño mientras con su pie golpeaba la puerta y asustaba a su querido hijo y al desgraciado que decía tales barbaridades.

- ¡Sobre mi cadáver!

Shadow se levanto de un salto y coloco a Tails detrás de su cuerpo ante el ataque y grito de la persona que había entrado por la puerta.

- ¡¿Papá?!

El hombre con la escoba en manos corrió por la sala hasta que empuño el palo directamente para golpear al hombre que se interponía entre el y su hijo. Por suerte el de ojos rubíes alcanzo a sostener con sus manos el palo.

¿Té o café? [Shadow x Tails]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora