- Me gusta cuando pronuncias mi nombre - murmuró - Hace que me olvide de todo lo que conlleva.
Donde Remus Lupin no es el único en Hogwarts que esconde un gran secreto.
[ÉPOCA DE LOS MERODEADORES]
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"Somos el ejemplo del mal ejemplo"
🌑 Chapter IV. Un pequeño favor 🌑
- Analisse yo...
- Liss – le interrumpió esta, parándose frente al nervioso chico - ¿Qué sucede, Remus?
- Quería pedirte disculpas, no quise llamarte loca, yo... - a medida que hablaba vio como en el rostro de la chica se iba dibujando una gran sonrisa, hasta que terminó por ponerle una mano sobre la boca, haciéndole callar.
- Remus, basta. No te tienes que disculpar – negó, apartando la mano y enlazando sus brazos con cariño, obligándolo así a empezar a caminar – Cuando dije que la luna llena me afecta, no era mentira. Estoy más irascible de lo normal.
- ¿Es como la...?
- ¿Menstruación? – rió al ver como el chico no era capaz de pronunicar la palabra – Algo así, pero peor.
Remus la observó en silencio, mientras caminaban los dos juntos por el pasillo, con sus brazos entrelazados, como si fuera lo más normal del mundo. Ella, un momento dado, dejó que su cabeza se apoyara sobre el brazo de su amigo, sin parar de caminar.
Se estableció entre ellos un cómodo silencio que Lupin decidió romper.
- ¿Por qué te afecta tanto la luna llena?
La pelinegra notó que no había burla en su tono, si no curiosidad, por lo que alzó la mirada para calvar sus azules ojos en los miel de él. No podía decirle la verdad. No todavía.
Terminó por encogerse de hombros.
- No lo sé. Pero si a lo largo de esta semana soy grosera contigo, te pido disculpas de antemano – se rascó detrás de la cabeza en un gesto que a Remus le pareció, cuanto menos, tierno.
- Disculpas aceptadas, entonces.
Esbozó una tímida sonrisa que fue correspondida, y sintió como una extraña calidez se instalaba en su pecho.