Por tu hermano [Natsuo × Bakugō]

☆ CAPÍTULO III ☆

Las mismas advertencias del inicio:
《Cambios drásticos de personalidad, guiños al manga, lenguaje explícito, leves insinuaciones de otras parejas, etc. 》

Natsuo no era alguien que tolerara el calor, así que el abrazo de su padre más la caliente mirada que Bakugō le lanzaba era la perfecta suma para acabar casi deshidratado.

— Tan caliente... — Murmuro asfixiado el albino.

En otro momento quizá, a Bakugō le hubiera gustado estar entre los brazos de Enji Todoroki y aprovechar para tocar todo músculo posible, pero ahora ese mismo hombre no era más que un estorbo en su coqueteo con Natsuo.

— ¡Apártate anciano, arruinas el momento! — Y claro que el único que capto el mensaje fue un avergonzado Natsuo.

"¡¿Qué rayos le pasa a ese chico?! ¿Acaso piensa coquetearme aún frente a mi padre?" Pensaba el albino, quien se separo de inmediato de un empujón. Más que nada para alejarse de su padre.

— Lo hicieron bien, gracias. Muchas gracias. — Decía Endeavor realmente aliviado de que su hijo estuviese a salvo, Katsuki recibió una mirada de gratitud por parte del héroe número uno, chasqueo la lengua incómodo así que se alejo para dejar que Natsuo y Enji hablasen.

— Uh... Kacchan, lo que dijiste en el carro so—

— ¡Callate, no me hables! — Desvió el tema, anteriormente había tenido un gran descuido y Midoriya no desaprovechaba cualquier dato que se tratara de su amigo de la infancia.

— ¿Están bien, chicos? — Se acerco Shōto a preguntarles, los tres chicos comenzaron a hablar hasta que una tos los interrumpio.

Endeavor se había ido a escoltar al villano hasta la patrulla de los policías, así que a Natsuo no le quedó de otra que acercarse a los chicos.

— Uh... Gracias por salvarme de verdad, estuvieron geniales. — Hablaba el albino sin tratar de enfocar su comentario solamente a Bakugō quien tenía las manos en los bolsillos de su pantalón por el frío. — En especial a ti, gracias... ¿Cuál es tu nombre de héroe?

— ¿Ah?, ¿Por qué debería decírtelo? — La actitud de Bakugō volvió a ser la tosca de siempre, Natsuo supuso que por estar Deku y Shōto ahí.

— ¿No es Bakugō? ¡Yo también quiero saber! — Pregunto el peliverde animado, Katsuki comenzó a gritarle que nunca le diría su nombre de héroe, fue graciosa la escena para Natsuo.

Le impresionaba el cambio de actitud del rubio y como es que nadie se daba cuenta, tendría que hablar con Shōto sobre Katsuki luego.

☆☆☆

Después de un par de días Katsuki ya se había olvidado de Natsuo, seguramente ya no tendría más oportunidades para verlo, le hubiera encantado al menos besarle para tener algo con lo que tocarse en las noches. Los fines de semana los dedicaba junto con Midoriya y Shōto a las pasantías, así que era difícil ajustar su horario para divertirse.

No tenía tiempo, por eso le vino como anillo al dedo cuando el jueves su profesor Aizawa cancelo las clases por tener que ir a una parte junto con el profesor Mic, dejando solo una orden. Salir a patrullar libremente.

Todos estaban emocionados por poder salir a patrullar por su cuenta, se pusieron sus trajes de héroe, algunos se fueron en grupo y otros solos.

Tal era el caso de Katsuki, quien se aparto de sus ruidosos amigos para patrullar el solo brincando de edificio en edificio, nada llamativo en su opinión. Creyó que su día no podía mejorar hasta que entre toda la gente en la multitud que caminaba bajo él, pudo encontrar una peculiar cabellera blanca.

"Esto se pone cada vez mejor" Pensó mientras lamia sus labios. Había encontrado a Natsuo Todoroki atrapado con un montón de extras, el chico parecía haber salido del gimnasio pues llevaba ropa deportiva. Katsuki no dudo en bajar por un callejón en donde espero ansioso a que el albino pasará para acorralarlo.

Una vez Natsuo se acerco lo tomó del brazo hasta meterlo en lo más apartado del callejón, el mayor por un momento creyó que iba a ser asaltado así que por reflejo abrió sus labios para gritar, pero no salió nada de su boca, más bien entro un intruso.

En un parpadeo ya tenía a Bakugō Katsuki con su lengua dentro de su boca en un empalagoso beso francés. Su mochila había caído al suelo y su cuerpo había sido acorralado entre una pared.

Llevo una mano al hombro del rubio para alejarlo, pero este como respuesta solo mordió el labio ajeno provocando que soltará un vergonzoso gemido.

"Estoy siendo abusado por un menor... Un menor que quiere ser un héroe" Se decía Natsuo tratando de no dejarse llevar, porque claro, Bakugō Katsuki era atractivo, tanto que daba miedo. Pero habían muchos factores por los cuales tenía prohibido tener la lengua ajena dentro de su boca.

El rubio al no tener respuesta, ya que se notaba a leguas que el mayor estaba sobresaturando su cabeza de pensamientos innecesarios, decidió juntar sus cuerpos, no le pareció molesto tener que ponerse un poco de puntas para que sus entrepiernas rozaran.

Esa fue la gota que derramo el vaso en la conciencia del albino, la mano que empujaba el hombro del rubio bajo por el pecho del menor hasta acabar en su cintura la cual apretó hasta que Katsuki más que un gemido, soltará un quejido.

El rubio soltó pequeñas explosiones retando indirectamente al Todoroki a que lo volviera a pellizcar, cosa que claramente hizo.

— Ah~ — Katsuki soltó un gemido ya separandose, sus lenguas seguían unidas por un delgado hilo de saliva hasta que el rubio relamio sus labios, sus respiraciones aunque eran agitadas, eran una misma. — Me gusta que me aprietes.

— Uh... ugh~ — La cabeza de Natsuo era un completo lío, estaba roja y juraba que le salía humo de lo sobrecalentado que estaba. — Yo no... ¿Qué quieres de mi?

Bakugō solo tuvo que bajar su mano hasta la entrepierna del mayor hasta acariciarla lentamente.

— Creo que ya lo sabes. — El mayor estaba luchando consigo mismo para no perder el control, entre el placer que recibía y el miedo que tenía de que Bakugō activará su poder no podía pensar bien.

Un grito de ayuda hizo que el menor se alejase, al parecer estaban asaltando un local cerca, chasqueo la lengua indeciso, pues estaba en la oportunidad de su vida.

— Tienes que ir y por favor ya déjame en paz. — Gruño Natsuo tomando su mochila del suelo, bajo la mirada para que el contrarío no notará su sonrojo y salió de aquel callejón.

A pesar de ya estar nuevamente libre todavía sentía el tacto del menor sobre él, su entrepierna medio despierta y sus labios que comenzaban a hincharse, los relamia para quitarse aquella prohibida sensación.

ESTE CAPÍTULO YA LO TENÍA ESCRITO DE HACE DÍAS, PERO NO SE GUARDO Y SE BORRO AAAAAAAH QUE CORAJE.

Gracias por esperar ♡