Torneo

Coincidencia

Quizá Alec se había equivocado al pensar que nada malo podía pasar.

Ni siquiera había pasado una hora cuando Jace comenzó a decir indirectas contra quien se le pasara por en frente.

- Jace, debes controlarte.- aconsejó Alec.- Sabes que te pueden expulsar, castigar o algo peor.... no les pongas atencion.

- Es que no me los soporto ,Alec- respiró profundo. Se habían salido de la cocina y Alec no dejaba que Jace se quitara de la pared, temía que fuera a pelear de nuevo.- Todos con sus vidas falsas.

- Dejalos, tu enfócate en ti mismo, y si los otros fingen... dejalo ser. Cada quien sabe como esta y como quiere vivir.- decía Alec.- Acuérdate que apenas hace una semana yo fingía ser un chico hetero normal.

Jace lo miro y arrugó la cara con pena.- Mierda, lo lamento.

Alec se río bajito y se alejo un paso de Jace.- No puedo creer que hayas comenzado una pelea solo por que Magnus te rozó la mano.

- Creo que a veces soy un poco impulsivo.- dijo con una sonrisa diverida, pero Alec no se río.- ¿ Que?.

- ¿Un poco?.

- Pues si.- dijo casual. En eso se abrió la puerta de la cocina y salió Magnus.

-¿ Ya te desinfectaste?- se burló. Alec puso una mano en el pecho de Jace para que no intentara nada tonto.- Por que necesitamos ayuda en la cocina.

-¿ Para que?- pregunto Alec. Magnus miró la mano de Alec en el pecho del otro y luego a Jace para temrinar en sus ojos.

-aaaa... vengan.- se dio la vuelta y entró de nuevo.

- Ashh, ahora hasta nos da ordenes.- se quejó Jace.

- Vamos, Mark necesita ayuda y acuerdate que ya teníamos un trato, además tengo mucha hambre.-  pidió con cara de dolor. Jace pasó su brazo por el hombro de Alec y se metieron a la cocina.

Magnus fue el primero el verlos y los fulminó con la mirada.- Perdon por interrumpirlos, ¿ pero pueden apurarse?.

- Disculpa, Mark.- Jace intentó no poner atención a Magnus.- ¿ Para que nos necesitabas?.

- Jace, necesito que vayas a buscar algo para bajar esta olla, Magnus y Alec... necesito que vayan por leña  y Sebas...tian... tu ve a buscar los platos.

Todos se miraron entre sí.. pero entonces se acordaron del trato y cada quién fue hacer lo que él les pidió.
Pero antes, Jace lo miro y también a Magnus, mientras hacía una cara extraña que lo desconcertó.

- Vamos, Alexander, no te... distraigas- lo llamó Magnus.

Salieron hacia el lado donde debía estar la leña.
Llegaro y la encontraron pero  había un problema...la leña no estaba cortada.

- Nunca he cortado leña.- dijo Alec. Estaba nervioso por lo de la mañana con Magnus.

- Yo tampoco, pero he observado como lo hacen...tal vez intentando.- miro a los lados, cogió el hacha y acomodó la leña. - Tengo demasiada calor

Y entonces hizo algo que casi hace que el corazón de Alec saliera y lo delatara. Magnus se había sacado la camisa y ahora tenía todo el torso descubierto.

Alec bajo la cabeza e hizo como si se viera las uñas.

-¿ Tienes calor ?- dijo de repente.- Es que tienes la cara roja.

- S..si.. supongo que es calor.- subio la mirada, Magnus estaba distraído intentando rajar la madera, así que aprovecho para observarlo con poco disimuló.