Sus manos apretaban con rencor el delgado cuello de Mello, lanzando una mirada vacía al rubio, que a su vez lo miraba con sorpresa, jamás en el tiempo que llevaba de conocerlo había observado esa conducta. Matt era pasivo, se le veía siempre con una actitud tranquila, sumisa en algunas ocasiones. Sin embargo en ésta se le veía completamente diferente
–De... ten... te –pidió con la poca fuerza que tenía, su expresión de desconcierto provocó una pequeña reacción en el pelirrojo, cuyo brillo en los ojos volvió en cuestión de segundos. Sus manos cedieron un poco, dejando respirar a Mello un poco más
–Eres un idiota –susurró cerrando los ojos, agachándose lentamente hasta dejar su frente sobre el hombro izquierdo de su amigo, sintiendo la rápida respiración del rubio
–¿Acaso... quieres matarme? –preguntó de forma molesta colocando su mano derecha en el pecho del chico, tratando de alejarlo, mientras con la otra se tocaba el cuello
–Siempre actúas como un niño, eres egoísta, solo piensas en ti y no te importa lastimar a los demás –reclamó indignado, levantando su cabeza para poder mirar de forma acusadora a su compañero de departamento –Eres despreciable. –Ante el comentario Mello sonrió de forma cínica, soltando después una risa divertida y burlona, lo cual despertó en Matt la furia, acercándose frenéticamente al rubio, colocándole ambas manos en los hombros, empujándolo con fuerza hacia la cabecera de la cama –¿De qué te ríes? –preguntó molesto
–¿Ahora sientes compasión por el pequeño Near? –cuestionó lastimeramente, pero oculta tras las palabras estaba la verdadera intención de su pregunta. Se miraron unos momentos en silencio
–No entiendes nada –dijo con tristeza, cambiando nuevamente la expresión de su rostro, Mello no comprendió en esos momentos, pero sus dudas se disiparon cuando el rostro de su amigo se acercó al suyo, atrapando sus labios de forma suave.
Matt se acercó más, logrando colocar su rodilla izquierda en la entrepierna de Mello, separados solamente por la sábana de la cama que tapaba a Mello hasta la cintura. Los ojos verdes se abrieron ampliamente y sus pupilas se dilataron, su cuerpo fue incapaz de reaccionar al igual que sus labios.
Los pensamientos del rubio hacían un nido en su mente, no comprendía lo que pasaba, pero sabía que aquella acción lo estaba haciendo temblar, y su orgullo no le permitía mostrarse así ante Matt
–¡Déjame! –gritó desconcertado, aventando el cuerpo de su amigo con fuerza, pero éste no se alejó demasiado, lo contempló unos momentos, y ante la mirada atónita y molesta de Mello, poco le importó el rechazo, volvió a acercarse, atrapando con fuerza los hombros del otro contra sus manos
–Basta de fingir, yo sé lo que realmente deseas –dijo con convicción, asomando en sus labios una mueca parecida a una sonrisa retorcida, y por primera vez Mello sintió un escalofrío que le recorrió la espina dorsal. Nuevamente el pelirrojo le tomó los labios en una acción salvaje, empujándose contra los dientes del rubio, cuyos ojos abiertos ampliamente miraban a Matt, éste se alejó segundos después, mirándolo con aprehensión a su amigo. –Hoy lo comprendí, solo has estado evadiéndote, evadiéndonos... pero se acabó, hoy te demostraré que yo también puedo desearte –sentenció casi perversamente, y Mello no supo que responder, le tenía, había atrapado sus emociones al igual que sus labios con el primer roce
–No –susurró Mello, desviando su mirada. –Tú no sabes nada... no me importas en absoluto –dijo de forma repulsiva, pero Matt volvió a sonreír, dispuesto a no creer en las palabras arrogantes de Mello, porque lo había comprendido, ambos se deseaban
–Mientes –de forma rápida se acercó de nuevo, ésta vez para explorar el blanco cuello de su amigo, Mello sintió cosquillas, pero se mantuvo en su posición de ignorar cualquier impulso físico que las acciones de Matt podían provocar en él
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DESEOS
FanficLos verdaderos sentimientos de Mello hacia Matt van más allá de una simple amistad, sin embargo, por miedo a lastimar su orgullo es incapaz de confesarlos