𝐏𝐥𝐚𝐲 𝐃𝐚𝐭𝐞 - 𝘓𝘶𝘻𝘶𝘨𝘦𝘵𝘵𝘢

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Me gusta sus mentiras

Me miro al espejo, sonrió y simplemente dejo que mi mente vuele...

¿Qué estoy haciendo con mi vida?

Dos semanas que he faltado al colegio, en donde mis padres no han vuelto y en donde yo, Luzu, he empeorado...

¿Y mis amigos?

Para ellos, sólo soy un fantasma... Ni una llamada... Ni un mensaje... Sólo existo cuando lo desean, y cuando ya no me requieren dejé de existir...

¿Y mi novio?

Se supone debe apoyarme... Estar a mi lado en estos momentos, ayudarme, darme amor, atención... Eso es lo que hacen las parejas...

No ha vuelvo a venir desde que me golpeó...

Aún así, lo perdono, porque lo amo, y porque sé con claridad que soy irritante... Muy irritante...

Ni yo me tolero...

— Ay Luzu... Te estás matando lentamente — Río con incredulidad, tengo razón...

Me estoy matando lentamente, y nadie viene a mi rescate.

Suelto un suspiro y salgo del baño, notando como el mundo a mi alrededor empieza a cobrar vida de la nada, las pastillas funcionan...

Estoy sintiéndome vivo, estoy feliz.

Soy feliz.

Me tiro a la cama, rebotando un par de veces para enrollar mi cuerpo con las sábanas.

Este es mi espacio, el mundo de Luzu, donde todo está bien y somos felices.

Donde no hay traición...

Donde no hay desamor...

Donde todo es perfecto...

Menos yo.

El timbre suena, que curioso, ¿Quién será? ¿Mis padres? No lo creo, ellos dijeron que tardarían otras semanas... ¿Alguno de mis 'amigos'? Posiblemente, tal vez al fin se dignaron a preocuparse por mi... ¿Samuel?

Samuel... ¿Y si es él? ¿Qué haré?

Me levanté de la cama, jalando conmigo las sábanas, estaba tan cómodo con ellas y aunque viniese el mismo presidente a mi casa no me quitaría las sábanas de mi cuerpo.

Bajé las escaleras, aunque en una de esas pise las sábanas, tropezandome para caer por las benditas escaleras...

Soy un tonto, ¿No?

Reí con fuerza, levantándome para acomodar mi ropa y las sábanas, mi cuerpo dolía, era obvio, pero aún con tantos problemas seguí mi camino, así como las personas, ¡Todos salimos adelante!

Menos yo.

Agarré el pomo de la puerta, y sin saber quién era la abrí... Ahí estaba él... Parado, con un ramo de amapolas...

Son mis favoritas.

— Sam... — Levanté mi vista del ramo de flores, mirando su rostro.

Era tan lindo... Deseo tocarlo... Quiero fundirme en su piel y hallar consolación en ella... Deseo ser amado por él mil y un veces...

Lo amo...

¿Está mal sentir esto? No, soy humano, debo enamorarme, es natural... Lo amo...

— Perdón... — Sonreí, negando con calma para agarrarlo de las manos, arrebatándole aquel ramo de flores con cuidado. — Yo... Yo actúe sin pensar, discúlpame, de verdad, es que, entré en pánico y lo que decías, yo... Lo siento, por favor, cometí un error...

Cometió un error, no hay problema, es humano, los humanos cometen errores y está bien cuando uno las acepta...

Lo importante es que intente mejorar.

— Veg, calma, todo está bien, yo estoy bien... — Hundí mi rostro entre aquellas bellas flores, olfateando con recelo su dulce aroma, me encanta. — Estamos bien honey...

Se quedó en silencio, no sabía en qué estaba pensando, o si en verdad estaba haciendo aquello y se había perdido.

Me da curiosidad explorar su mente...

— Lo siento tanto Luzu... Perdón... — Se acercó a mi, abrazándome, el aroma de Samuel era más dulce y ácido — Prometo cambiar, todo cambiará de ahora en adelante, te lo prometo...

Reí un poco, correspondiendo el abrazo aún con el ramo de flores en uno de mis manos, dejando que mi mentón se recostara en el hombro de aquel azabeche que tanto amaba.

— Está bien darling, confío en ello...

Claro que sí Samuel, todo va a cambiar de ahora en adelante.

Amo como me engañas...

Le doy unos... Cinco o cuatro capítulos más para que finalice la historia, o no sé... No soy de hacer historias con muchos capítulos XD

En si, espero les haya gustado el capítulo y que se encuentren bien.

Hasta luego :D

Mensaje del día: Desearía ser pirata, para encontrar aquel tesoro que tienes entra las patas uwu

JAJAJAJAJAJAJAJA, ME VOY-