Inocencia II

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La ansias de Mew habían aguantado todo el vuelo, tan solo caricias y palabras al oído de Gulf diciéndole lo hermoso y especial que era para el, se negaba a tomarlo en un avión, no ahora, no cuando para Gulf eso debía ser Especial, tomar aquel cuerpo que temblaba con su toque, que reaccionaba tan exquisitamente a sus caricias debía ser uno de los momentos más entrañables para ambos.

Pronto llegaron a la gran mansión de la que tanto le había hablado Mew a Gulf, los ojitos de Gulf eran un poema pues en ellos brillaban miles de emociones juntas al estar ahora en su nueva casa, de donde Mew se encargaría que nunca saliera.

—P' Mew... esta es tu casa?

—Nuestra casa pequeño.

Mew inmediatamente mando a todos los sirvientes a sus respectivas habitaciones, no quería que nadie los molestara, dándoles como advertencia que si lo hacían nunca verían un solo peso después de su despido.

—P'Mew da miedo cuando es así.

Mew miro a donde aquella voz se escuchaba, pues su pequeño nunca había visto a Mew en el papel de Jefe, el siempre lo vio como alguien amable con las personas.

—Lo lamento Gulf pero debo ser firme con mis empleados de vez en cuando, no siempre soy así.

Gulf había entendido pero aun no sabia el por que Mew en el avión no lo toco, como sabia que Mew quería tocarlo. Oh eso creía el, Mew fue tierno y amaba que fuera así con el pero el hecho de que se negara a hacerlo suyo le hacían un lio en su cabeza.

—Ok.

Gulf se limito a decir subiendo a donde se le había indicado que era su nueva habitación dejando a Mew detrás, sin decir nada se metió a las cobijas y cerro sus ojos con fuerza, se recriminaba a si mismo el que aun con Mew el fuera un completo inútil pues en sus manos estaba hacerlo feliz y satisfacer a quien le había ayudado tanto.

—Gulf... pequeño estas bien.

Mew quien había seguido discretamente a Gulf llego a la orilla de la cama quitando un poco la sabana que cubría la cabeza de gulf.

—Que pasa...gulf...

Mew se preocupó pues la carita de Gulf estaba bañada en lagrimas,

—. yo... no sirvo para nada... mi padre tiene razón.

Mew ante eso frunció el ceño apresando sus nudillos hasta dejarlos blanquecinos, Gulf aun tenía traumas y no le gustaba cuando afirmaba que las cosas horribles que antes le decían eran verdad. Su cara se relajo cuando su pequeño se acurruco en su pecho.

— P'Mew es muy amable al tenerme aquí, pero P'Mew necesita a alguien que lo pueda satisfacer y ese alguien no soy yo.

Era ahora cuando Mew sabia a lo que se refería Gulf, el nunca pensó que negarse a tomarlo en el avión haría que Gulf pensara demasiado, abrazo por la cintura a su pequeño limpiando las lagrimas que nuevamente salían de aquellos hermosos ojos.

—Gulf, tu me satisfaces... dios estoy tan obsesionado con tu cuerpo, con tus labios, contigo Gulf esto a la vista de muchas personas está mal y tal vez tu sientas que quieres estar conmigo solo por que te he salvado de esa vida horrible y siento que si ahora me aprovecho de esa fragilidad en la que estas me voy a odiar para toda la vida.

—Yo te quiero...

—. pero yo a Ti no te quiero, mi sentimiento hacia ti es mas grande que solo querer.

—...P'...

—Dejame seguir.... no voy a tocarte, no ahora, no aunque tu pienses que quieres que te toque, lo hare hasta que podamos convivir un poco mas y puedas tener tus sentimientos completamente claros, dime que me entiendes por favor.

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