Enemigos

205 34 1
                                    

Y cuando las cosas estén mal
cuando pienses que todo pasó
vendrán cosas peores
los enemigos y el dolor...






Las cosas en el orfanato habían cambiado un poco, desde que Eren había desaparecido, el orfanato había revisado el perímetro del orfanato, cerrando cafa hueco, hoyo y poniendo alambre de púas para más seguridad, habían puesto toque de queda para todos los niños y contrataron a un guardia de seguridad para vigilar por las noches.

Todo eso debido a la presión de Pixis, había amenazado con clausurar el lugar, si no aseguraba que los niños crecieran en un ambiente seguro y justo.

Algunas cosas cambiaron para bien, desde mejor comida y mejor trabajo a los niños, hasta el cambio de algunos maestros, entre ellos estaba el cambio de Floch, pasó a ser el maestro serio y frío, no se metía con nadie, pero parecía un fantasma vagando por el orfanato.

Desde que Eren se fue, las ganas de vivir habían abandonado el cuerpo del hombre, pero el destino era caprichoso, por que si bien los niños estaban a salvo, la maldad aún existía en el mundo

- y bien digamos señora...-

-Dina, Dina Fritz-

- mucho gusto señora, entonces, ¿quiere adoptar?-

La sonrisa de la mujer era de pura hipocresía, Dina había visitado el orfanato en busca de pistas de Eren, debía encontrarlo antes que su hijo y esposo y de una vez por todas, desaparecerlo para siempre, acabar con él como debió haberlo hecho desde el principio, tenía la oportunidad de aniquilar a ese niño.

- la verdad mi esposo y yo lo estamos considerando, mi hijo ya es casi un adulto y la casa se siente sola sin niños corriendo en casa, desearíamos adoptar uno, mi esposo se encuentra en un viaje de negocios, si puede mostrarme las instalaciones, ya sabe, ver qué se necesita para la comidas de los niños-

Al hombre le sacó una sonrisa las palabras de Dina, otra persona rica que donará dinero, sería muy bueno.

Dina dio vueltas por las instalaciones, hasta que la vio, él área de archivos, de seguro hay se encontraba la copia de los documentos de ese niño que odiaba.

- disculpe pero tengo mucha sed, sería muy amable de su parte si me trae algo de beber-

- claro que si señora, si gusta acompañarme..-

- tal vez podría esperarlo aquí, además no tardará mucho y no iré a ningún lado -

El hombre lo meditó un momento, debería aceptar, además siempre trataba muy bien a las personas con dinero, las donaciones a veces solían ser bastante buenas.

Al ver que el hombre dobló la esquina, de inmediato ingresó por la puerta y buscó en los archiveros, no podía encontrar la carpeta con el nombre del chiquillo, hasta que la vio, solamente con el nombre de Eren, el maldito nombre con el que la zorra amante de su marido había deseado llamarlo, guardó rápido los documentos en su bolsa y salió, poco antes de que el director del orfanato volviera, pero no contó que unos ojos la habían observado.

- de verdad que este es un muy lindo orfanato-

- cuidamos muy bien a nuestros niños-

Dina rió por dentro, pero prefería seguir el juego, de su bolsa sacó un cheque firmado por 5000 euros, el cual entregó al director.

Una pequeña suma por obtener información del bastardo, se fue, no sin antes mentir, diciendo que volvería.

Al salir se dirigía a su auto, pero fue interceptada por alguien

- dígame qué fue lo que se robó- la voz de Floch era neutra

- no se atreva a hablarme así ¿sabe quien soy?-

- no, y no me interesa, solo es una ladrona-

Floch jaló la bolsa de Dina, causando que los papeles cayeran de su bolsa, al tomarlos, el hombre notó que era el archivo de Eren

- ¿que tramas contra Eren?- preguntó enojándose

- yo solo quiero saber dónde está, es alguien importante para mi-

- miente- dijo Floch furioso

Dina supo que no servía de nada mentirle a un loco

- sabes, esta bien, ese niño es el bastardo de mi esposo y lo que quiero es que nunca sea encontrado-

Con esas palabras, Floch comenzó a calmarse

- ¿no quiere que nadie encuentre a Eren?-

- no, que nunca más vuelva a ver la luz del día-

Floch sonrió ante las palabras de la mujer

- yo podría ayudarle-

La mirada del hombre demostraba la locura por el bastardo, Dina sonrió complacida, tal vez desaparecer a Eren, podría ser aún más fácil

- soy Dina-

- dígame Floch-

Ambos se tomaron la mano, sellando así un trato, qué tal vez en el futuro, podría alcanzar a Eren....









Espero les guste

Los kiere y ama inukagban

Rakel 😘😘😘😘😘😘😘

Así es la vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora