PIECES

Sorpresa

"El amor no es vivir felices siempre, eso es un cuento de hadas.
El amor es aprender a encontrarse en las diferencias, a disfrutarse en las similitudes y a apoyarse en los retos, para enfrentar la vida, juntos."

* * *

La boda se planeó y organizó por Hanabi, después de todo había resultado bastante buena cuando de organizar eventos importantes se trataba.

Hinata estaba teniendo el año más largo de su vida y eso que todavía faltaba un mes para la boda del siglo como toda la aldea la llamaba. Y claro que tenían motivos para creer aquello después de todo no se veía todos los días a una pareja, de prestigiosos Clanes y linajes, unirse en matrimonio. Estaba exhausta y constantemente necesitaba descansar.

Boruto y Sarada habían comenzado el jardín de infantes y siempre llegaban a casa con montones de tarea, y aunque Sakura solía ayudarla de dos a tres veces por semana, dependiendo de su trabajo en el hospital, Hinata terminaba liada y en extremo cansada.

Los mellizos la traían vuelta loca, desde que habían aprendido a caminar eran imparables de echo Hinata creía que todo era gracias a la genética Uchiha, estaba en el ADN de sus hijos el ser rebeldes y traviesos.

Shinji era todo sonrisas tímidas, pero uno nunca debía darle suficiente confianza al pequeño de ahora dos años, pues aquellas sonrisas solían ser el camino hacia el terror. Sarada lo sabía de primera mano, al igual que la Hyuuga había sido víctima de las travesuras del pequeño Uchiha, como aquella vez que le pidió un abrazo a su hermana mayor solo para después cortarle un largo mechón de cabello que tuvo a Sarada llorando por semanas cada que se miraba al espejo y eso sin contar la vez que le rompió los lentes a la niña por un berrinche.

Hisao era una pequeña pesadilla ambulante, a cada paso que daba algo terminaba roto. Sasuke estaba cansado de que sus hijos fueran tan terribles y Hinata no podía imaginar que pasaría cuando le dijera que nuevamente estaba embarazada. Se sonrojaba de solo recordar la noche en la que concibieron a ese pequeño ser que ya llevaba en el vientre desde hacía un mes.

* Flash Back *

Aquella noche la pareja estaba en la cocina preparando la cena, los niños corrían y gritaban por toda la casa como de costumbre, Boruto y Sarada encendían y apagaban las luces a su paso en su carrera para llegar al comedor. Sasuke suspiró exhausto y bufó cuando Hisao lo empujó fuera de su camino con la finalidad de alcanzar a su mellizo.

-¿Podrían detenerse por un segundo? -Preguntó levemente irritado el Uchiha mayor.

-¡No! -Gritaron al unísono los traviesos mellizos y sus hermanos mayores les hicieron eco.

-¡A cenar! -Llamó la ojiperla con voz cariñosa.

-¡Apártate Shin! -La pequeña Hisao empujó a su mellizo y le quitó la silla que quería ocupar.

-¡Apártate tú! -Gritó el pequeño Uchiha mientras tiraba del cabello de su melliza.

-Es mi turno de sentarme junto a papá -se quejó la pequeña mientras golpeaba a su hermano.

-¡Mentira! En el almuerzo te has sentado junto a él -gruñó el morocho mientras la empujaba fuera de la silla para sentarse.

-¡Boru, dile! -Se quejó la Uchiha menor con su rubio hermano.

-¡Sara, dile que es mi turno! -Suplicó el pequeño.