Ha pasado una semana, una semana pesada, llena de sufrimiento. Me sentía sola, no sabía que hacer, Mae no ha venido a la escuela y no me contesta las llamadas ni los mensajes, a Jean no lo había visto en la escuela, algo que se me está haciendo muy raro y sospechosos, ¿y si el hombre de aquel día les hizo algo? No dudé más y salí de mi salón buscando a los amigos de Jean, tal vez ellos sepan que es lo qué pasa.
Caminé y por mucha suerte me encontré a Jean parado en su casillero. Con miedo y el no saber como iba a reaccionar me acerqué y decidí hablarle.DARIAN: Emm, hola, dije tocando su hombro.
JEAN: *Voltea de reojo y sonríe sarcásticamente* Típico y muy común, dijo sosteniendo la nota que le había dejado la vez pasada en su casillero.
DARIAN: Realmente Jean, no entiendo como puedes ser tan arrogante, yo solo he tratado de llevarme bien contigo, si crees que esa nota va con otra intención estás muy equivocado.
JEAN: ¿Cuándo te he dicho que yo quiero ser tú amigo? Creo que ya te dejé muy en claro que no me interesa.
DARIAN: Pff tan patético, no entiendo como todas las niñas acá en la universidad pueden estar tan "enamoradas" de ti, sin te conocieran cambiarían de opinión. Dije torciendo los ojos.
JEAN: ¿Acaso tú me conoces? Dijo cerrando el casillero y poniéndose en frente mío.
DARIAN: No, y ni me interesa conocerte, pero solo en tu mirada se puede notar el vacío qué hay dentro de ti, y me voy, no quiero seguir perdiendo mi tiempo, dije mirándolo de pies a cabeza.
Caminé para pasar por su lado, pero sentí como tomó mi muñeca y me detuvo, no entiendo porqué me puse nerviosa.
JEAN: No quiero lástima, no pretendas querer entrar a mi vida y entender mis problemas, no eres quién para hacer eso, y tus cartitas aléjalas de mi. Soltó la nota y esta cayó en mis pies.
Cerré mis ojos en señal de intolerancia. Me dirigí a mi auto y salí en busca de Mae, tenía que saber si mi amiga estaba bien.
ESTÁS LEYENDO
PARA SIEMPRE
FanfictionA veces la vida nos paga de una manera que nos dejará marcados para toda la vida, dolor, sufrimiento y culpas, pero siempre hay una salida, un rayo de esperanza y luz que cambia el rumbo de la vida. Dicen que los polos opuestos se atraen, que la vid...