Roto

XI

¿Estaba nervioso?

¿Asustado?

¿Aterrado?

Si. Si. Y... Si.

Faltaban solamente 3 días para que fuera 1 de Septiembre, tres días para que tuviera que llevar a Harry a ese anden, iría en el tren y finalmente a Hogwarts. Cerca de ese viejo pedofilo.
Tenía miedo.. De que su niño cayera en las garras de ese viejo... Tom le había asegurado que estaría bien, le habían puesto muchas protecciónes al collar de heredero de la familia Prince y al anillo de la familia Guant.

Su ahijado ayudaría, sabía que era un niño, pero Draco era muy posesivo y cuidadoso con lo que quería, y el sabía que Draco quería a Harry. Siempre estaba cerca suyo y no lo dejaba ni a sol ni a sombra y Harry se sentía cómodo con él. Era gracioso ver a Tom molesto por esa cercanía de los niños... Tom era muy celoso.

Soltando un noveno suspiro en esa media hora, fijo su vista en los registros que estaban en sus manos... Los Weasley... Bill y Charlie, los mayores, habían venido a ellos corriendo y suplicando hace no menos de tres días. Pidiendo y rogando que salvarán a sus hermanos pequeños. George y Fred.

Otras víctimas de Dumbledore. Ambos mayores les enseñaron sus recuerdos. Recuerdos demasiado personales y demasiado triste. Trauma. Rencor. Odio. Eran las emociones que esos recuerdos les transmitían. No podían creer el daño, la crueldad de esos actos. Le hacía recordar los recuerdos de su pequeño hijo siendo violado por la morsa (que ahora más bien parecía un cadáver después de tantos experimentos que había hecho en él, ya estaba pensando en pociones experimentales que usaría en la cabra).

Después de ese momento, Bill y Charlie se habían unido a ellos. Por el momento no habían recibido la marca, para que no sean descubiertos y llevados a Azkaban por apoyar al Lord Oscuro. ¡Ja! Severus no podía creer realmente lo hipócritas que llegaba a ser el supuesto lado de la luz. Teniendo a un pedofilo... ¡El Rey de los pedofilos como líder! Severus quería reír cada que iba a una reunión de la orden del pollo tostado, y veía como Dumbledore se jactaba y pavoneaba de sus supuestos planes, de que llegaría el Niño que Vivió a salvarlos y derrocar a Voldemort. Le daba asco el brillo de exitacion en los ojos del viejo cada que se mencionaba a Harry, varias veces había logrado ver una ereccion semi cubierta con un cojin. Las arcadas que lo atacaban por el asco eran difíciles de ocultar.

Algo más que había notado y le molestaba en gran medida, era la obsecion que Molly Weasley había demostrado por la riqueza. Pero lo peor aún, era oír como juraba en voz alta que su pequeña hija Ginebra, sería la futura Lady Potter. Que después de la guerra se causarían y tendrían tres hijos, incluso ya pensaba los nombres para los niños. De solo recordarlo le daba jaqueca.
Había tratado de decirle que eso ella no podía saberlo, quizás y Potter no se enamoraría de Ginebra, incluso que tal y el niño resultaba ser gay (No que le molestara que su hijo lo fuera, el mismo prefería a los hombres). La clara muestra de horror en el rostro de la mujer, y el como empezó a gritar negando totalmente esa posibilidad de que el niño fuera "anormal", a palabras de la mujer, demostró lo cerrada de mente que era.

Sin embargo, algo que lo lleno de preocupación fue lo que la mujer dijo después de eso

~Flash Back ~

-¡No digas estupideces Snape! ¡Mi pequeña Ginny y Potter se casaran! Dumbledore me juro por su vida que eso sucedería, y yo se que eso pasara, Ginny sera Lady Potter y vivirá cómodamente como una Lady debe vivir, llena de riquezas, lujos y todo. Ella sera rica y nosotros también por que Potter debera darnos todo lo que Ginny le ordene. Eso sucederá aunque tengamos que darle Amortentia a Potter.

La respiración agitada de la mujer podía escucharse en toda la cocina de la casa Weasley. Severus no podía creer lo que había escuchado de parte de la matriarca, realmente algún tornillo se había caído de esa cabeza, por que incluso jurar darle una poción de amor a un niño... Pudo ver la ira llendose del rostro de la mujer, levantó su varita antes de que la mujer pudiera hacerlo hacia él.

-Obliviate.

La mujer parpadeo algunas veces y luego lo miró con ojos confusos, parecía no entender que sucedía o que hacía en la cocina.

- Molly, los demás estamos esperando tu delicioso té que nos mencionaste.

~Fin Flash Back~

Levantándose de su escritorio se dirigió a la habitación que compartía con Tom, por que si, ahora dormían juntos. Nada especial. Solo era para que por si Harry tenia una pesadilla, los encontrara a ambos en la misma habitación. Solo era eso. Nada tenía que ver la aceleración en su corazón cada que mientras dormían, sus cuerpos rozaban. O cuando por tardar en la ducha, terminaban encontrándose desnudo o semidesnudos, por salir de la ducha. O cuando aveces despertaban abrazados. Nada de eso tenía algo que ver en especial.

¿A quién engañaba? Deseaba que eso fuera especial, deseaba que... Hubiera algo más. Que esas veces cuando chocaban y sus labios estaban cercas, terminaran acortando esos milímetros de separación.
Deseaba tantas cosas que pasarán con Tom. Pero ahora tenían cosas más importantes que un simple deseo de amor. Tenían un hijo del cual cuidar, y a eso hiba en ese momento.

Apresuró el paso que se habla vuelto lento por estar hundido en sus pensamientos. Y rápidamente entró a la habitación. Encontrándose con el señor oscuro, el gran Lord Voldemort. Tom Riddle. Tom para la familia. La razón de sus sueños más vergonzosos. El que acelera su corazón.

Jugando al avión con Harry.

Si, el temido Lord Oscuro, estaba jugando al avión con un niño.

- ¡Papi! ¡Juega! ¡Juega!

La risa escapo de sus labios cuando el pequeño de cabellos negros lo jalo a unirse al juego. Podía esperar hasta la hora de siesta de Harry para mencionar la protección contra pociones.
Esos momentos donde Harry se comportaba como lo que era. Un niño. Eran los que más atesoraba.

Y si Severus y Tom tienen en sus escritorios un pequeño vial con un pequeño hilo con brillo azul y de ves en cuando lo vacían en un pensadero. Ambos no saben nada al respecto.

~£~

Bueno bueno, ya estamos por llegar a Hogwarts. Tengo miedo.

Y como pueden leer, los mayores no olvidan a los menores.

Posiblemente para el siguiente capítulo ya estemos llegando al anden.

Saben, tengo pensado hacer un preguntas y respuestas. Por si tiene algunas dudas del Fic, déjenlas por aquí.

Los amoo.