Alcohol

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Bianco llevaba una semana en el mundo de los shinigamis, aún no se adaptaba para nada, seguía sumida en aquella depresión y confusión por aquel brusco cambio en su "vida"
La mayor parte del tiempo la pasaba sola dentro de la cede, después de todo a los únicos que conocía era a Ronald Knox y aquel extraño pelirrojo que hacía llamarse una dama, no sabía su nombre, no le pregunto y hasta aquel momento no lo había vuelto a ver.

— ¡Hey, T/n — El rubio se acercó a la chica bastante alegre — Iremos a beber en la noche con unos compañeros ¿te gustaría venir? Quizás eso te anime un poco —

— No lo sé, jamás he bebido — suspiró y terminó de llenar algunos papeles del trabajo — Aún no me he acostumbrado a esto de ser una shinigami —

— Pronto lo harás, pero será más fácil si tienes un mejor humor — le guiño un ojo.

— ¿Tu crees? — miró al rubio.

— Por supuesto, Bianco — acarició su cabeza, despeinandola.

— Uh.. de acuerdo — volvió a suspirar y acomodó su cabello.

— Vendre por ti a las ocho — Ronald salió de la oficina de las secretarias.

...

— Odio estos lentes... Jamás tuve que usar unos ¿porqué ahora si? — Bufó y procedió a quitárselos — No veo nada.. no importa, me niego a usarlos — comenzó a caminar descuidadamente por todo el extenso pasillo.

Tenia la vista claramente borrosa, solo veía manchas que esquivaba cuando las veía cerca, trataba de enfocar su vista pero no cambiaba para nada ¿qué clase de castigo era ese? Por pensar tanto en eso choco con alguien, al tratar de mirar quien era vio una enorme mancha roja, supuso que era aquel tipo de la otra vez.

— Mira a quién tenemos aquí — dijo en un tono burlón — La pobre y diminuta shinigami, T/n Bianco —

— Disculpe, no lo vi pasar — trataba de acomodar todos los papeles que se le habían caído.

— "La" — le dijo — Soy una dama, querida, tienes que recordarlo — El carmín la ayudo a levantarse y le puso sus lentes — También debes de recordar cuidar tus lentes — sonrió mostrando aquella tétrica sonrisa de tiburón.

— ¿Dama? — alzó una ceja — Pero tu.. — fue interrumpida.

— Ya veo, eres de esa clase de persona, mejor no me complico explicándote — cruzó ambos brazos.

— Yo... Olvide preguntar tu nombre — tragó en seco, intentaba cambiar el tema de aquella conversación.

— Y yo presentarme — acomodó su cabello detrás suyo — Soy Grell Sutcliff, la idol preferida de todos.. Death~  — Hizo su típica pose.

— ¿Idol? ¿Death? — Estaba confundida, aunque era de esperarse, el pelirrojo era bastante extraño.

— Arruinas todo lo divertido — Hizo un puchero.

— Solo no te entiendo — frunció el ceño levemente.

— Esperemos que algún día si lo hagas, mocosa — volvió a burlarse y siguió su camino, meneando las caderas como si fuese una mujer.

— Fenómeno — Dijo en voz baja y ella siguió su camino.

....

RED -Grell Sutcliff x Tu -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora