Te Encontré (Keith x tú)

A través del Universo

Cuando recobre mi consciencia me sentía pesado...
Abrí mis ojos, estaba en león rojo... Sentía en mi nuca que algo se escurría. Estoy sangrando?

Me reincorpore, observé a mi alrededor, el planeta era grisáceo con muchos picos sobresaliendo... Gaseoso quizá.

-Estás bien rojo? -moví un control pero nada -No te preocupes, te repararemos. Fue una batalla difícil -caminé y salí por una escotilla, me quedé parado observando con más detalle el panorama -Dónde estamos? Dónde aterrizamos? -mi cerebro hizo click al recordar que no venía solo -(T/N)! Shiro!

Me alejé del león rojo, la última vez que escuché a Shiro se oía mal. Si recuerdo bien el león negro cayó por el sur así que, a caminar.

-Shiro? -seguía intentando comunicarme, en vez de caminar empecé a trotar -Shiro, estás ahí? (T/N)? Alguien?

-Keith. Aquí estoy.

Menos mal -Shiro, habla Keith. -me amo por ser tan obvio.

-Keith, Keith te escucho. Estoy bien.

Sonreí, seguí corriendo -Y (T/N)?

-Descansando, se encuentra inconsciente. Fuera de eso, estamos vivos. Una herida abierta y una caída del espacio en la que terminé estrellándome a 25 metros por segundo cuadrado no basta para acabar conmigo. Tú cómo estás?

-No muy bien -comencé a descender por un acantilado -Mi león se averió -ya poniendo mas atención a lo que dijo -Espera, cuál herida?

-No es nada.

Lo escuché tragarse una queja -No te preocupes, voy en camino.

-Pensándolo mejor, date prisa.

Seguía corriendo, en estos momentos aprecio tener un propulsor. Por qué carajos estaba tan lejos?

-Shiro, qué pasó?

-Hay criaturas.

Al descender y simplemente rozar mi pie con el suelo un géiser explotó. Esto es malo, seguí con mi camino pero quedé dentro de nada rodeado, los chorros de agua hirviendo salían disparados. Antes de que uno me hiciera papilla tejana comencé a correr, cómo esperaba cada paso disparaba un géiser. Corre Keith maldita sea!

Era cuestión de tiempo para que uno me alcanzara, me empujó haciéndome rodar y caer en un acantilado.

-Keith estás bien? Qué pasó? -la voz de Shiro no me ayuda mucho.

Mi bayard estaba incrustado en la pared, miré hacia abajo apreciando una caída grande... Muy... Muy grande.

-Solo un percance, pero estoy en camino. Cómo estás tú? -con mi propulsor logré subir, me sostuve de la orilla comenzando a alzarme.

-Bien, pero atrapado en una cueva.

-Cueva..? Oigan dónde estamos?

(T/N)! Menos mal, creía que estaría mas tiempo dormida.
Cuando estuve de pie otra vez seguí con mi travesía, gracias entrenamiento te debo la vida.

-No salgas (T/N), me persiguen unas criaturas horrendas.

-Debería estar tranquila..?

-Quedense allí. Iré por ustedes... Solo tengo que pensar cómo.

Observaba con algo de frustración el acantilado, no podía saltar eso era obvio era una distancia fácil de 5 kilómetros. Me di la vuelta repitiendo el mantra que por lo que he deducido estos años es familiar.

-La paciencia trae concentración.

-Parece que lo grabaste bien -dijo Shiro.

-Se lo has repetido desde chico... Así cualquiera.