No sé soportar el miedo tremendo que siento cada vez que sales a la calle, siento que no regresas, es que te ves tan perfecto sonriendo.
Imaginar que tú sonríes por otra persona, sonríes por alguien más. Es lo mismo, tú estás siendo feliz, es lo que yo quiero.
¿Pero por qué me da tanto miedo que no sea conmigo con quién eres feliz?
Tu sonrisa es perfectas, y lo sé y así como yo lo sé, todas las personas que te rodean lo saben.
Pero si tú me dijiste que soy solo yo y yo soy todo para ti.
¿Acaso enserio me creo tan reemplazable?
O es que en realidad se lo que vales y yo no soy lo que cuestas.
No hablamos de precios, hablamos de valor humano, yo no soy lo suficientemente valioso como para alguien como tú.
Me gusta que me ames, porque yo también te amo.
Me gusta que me quieras, porque se que es correspondido.
Me gusta que me digas que soy todo en tu mundo, porque para mí tu eres el mío.
Se que no tengo derecho a forzar nada, pero me da miedo que ese nada termine siendo yo.
Hay tanto que quisiera que me dijeras, hay tanto que quiero escuchar de ti.
Me gusta tu sonrisa, me encanta para ser más exacto, pero, ¿A ti te gusta la mía?
Tu sonrisa me encanta si, me encanta como no sabes, tengo miedo que esa sonrisa no sea por mi.
Tengo miedo de que al sonreír ya no sea frente mío, tengo miedo de que tú sonrisa sea para alegrar a alguien más, aún que a quien engaño, estaría muy feliz por verte sonreír aún que sea por un retrovisor.
Sonríe si, sonríe. Después de todo me alegras a mí.
