Traducido por: Firu Firu
Fue una batalla sin suspenso.
Una vez que los seis dioses principales llegaron en persona, todo el continente estaba hirviendo. Todas las razas y naciones respondieron al llamado para exterminar al dios malvado.
Todos estuvieron de acuerdo en que el mal caería porque los seis dioses representaban el pináculo del mundo.
Una vez que aparecieron, ¡no había nada que no se pudiera superar!
No eran solo ellos. Incluso los seis dioses principales sentían que no había suspenso.
Todos vinieron para cosechar la fe de las personas bajo su jurisdicción, para no ser despojados del centro de atención por los otros dioses.
Nadie pensó en la posibilidad de perder.
¿Cómo podría ser posible? Este grupo de personas feas eran solo hormigas que podían ser aplastadas por los dioses moviendo sus dedos.
Pensaban así, pero de hecho, el lado de Xie Xi pensaba lo mismo.
No había suspenso sobre la batalla con los seis dioses.
Los seis signos astrológicos tenían el Escudo de Espacio Diferente, por lo que era imposible perder ante nadie.
La única preocupación de Xie Xi era N.
N tenía una gran capacidad farmacéutica. Era un poderoso respaldo para los seis dioses principales y no se sabía qué trucos extraños tenía.
Yan Zhe y los demás no podían ir a encontrarse con N. Después de todo, fueron "capturados" y solo podían quedarse en la mazmorra para tratar de atraer a N para salvarlos.
Xie Xi pensó esto y se quedó afuera de la mazmorra.
Los seis signos astrológicos fueron a pelear. Xie Xi trató de no permitirse pensar demasiado, pero su corazón estaba dividido en varias partes. Se preguntaba si los cuerpos de Escorpio y Libra se habían recuperado por completo, recordó que Sagitario no había comido lo suficiente y se preguntaba si el estado mental de Piscis podría hacer frente a los ataques de Poseidón. Por supuesto, también estaba preocupado por Capricornio. Su temperamento era estable y tranquilo, pero su poder de combate era ligeramente más débil que el resto. No sabía si algo pasaría...
Xie Xi reprimió el impulso de salir y ver. Él creía que estaban preparados para hacer lo mejor que podían y no pasaría nada.
No podía alejarse. Tenía que encargarse de N. Esto era lo más importante.
Solo haciendo que N abandone la misión se eliminaría por completo el peligro. De lo contrario, aún habría peligros incluso si los seis dioses principales fueran derrotados.
Xie Xi reprimió sus pensamientos y examinó los alrededores.
¿Vendría N a salvar al grupo de Yan Zhe? Era muy probable. Después de todo, el poder de combate del general Qin no era pequeño y Yan Zhe era el dios lechero que podía salvar a cualquiera. Las probabilidades de ganar aumentarían con su presencia.
Xie Xi contuvo el aliento y casi se integró en la oscuridad. Ni un solo sonido podía escapar de sus oídos.
¡Ahora estaba solo y tenía que depender de su propia fuerza para proteger a Jiang Xie!
Justo entonces, algo se sacudió frente a él.
La voz de Yan Zhe se escuchó en sus oídos al mismo tiempo. "N nos encontró. ¡Ten cuidado!"
Xie Xi destruyó el comunicador y se escondió por completo en la oscuridad.
Para una persona fuerte en el mismo nivel que Jiang Xie, Xie Xi nunca podría tomar a este oponente a la ligera.
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Cargando el Juego 2 (Game Loading)
Pertualangan¡Xie Xi es alguien con una suerte fuera de este mundo! Su ventaja es que cualquier juego lo puede resolver fácilmente. La desventaja es que ¡todos los juegos son aburridos! Entonces un día, las palabras 'Cargando el Juego' aparecieron en frente de s...
