Ｔｅａｒｓ ｏｆ ｈａｐｐｉｎｅｓｓ【Ｆｉｎａｌｉｚａｄａ】

19

Siempre creyó que el tiempo sería más rápido en situaciones como esta, y sin embargo ahora sentía cada minuto equivalía a un año entero sabiendo que en cualquier momento podría morir por el error que cometió, el miedo era constante que eso le impedía pensar con claridad, como especie de tortura sobre sí mismo, ni siquiera se molestó en luchar por su libertad, no sabría a donde huir, las probabilidades de lograrlo eran casi nulas por varias razones.

Él mismo se llevó hasta ese punto, sin escape, con aquella sensación de culpa que lo consumía lenta y dolorosamente, incapaz de hacer algo bien, se sentía inútil, sus pensamiento ni siquiera le eran de ayuda, solo recordaba a sus seres queridos que perdió únicamente por sus malas acciones y decisiones que tomó en el peor momento del mundo.

Y ahí la escuchó abrirse...

Aquella puerta que lo privaba del exterior, ahora estaba abierta, podía sentir su libertad tan cerca que podría alcanzarla, era imposible describir que tan feliz estaba, todo este sufrimiento se acabaría o quizás solo era un excusa para huir de sus problemas en lugar de enfrentarlos por sí mismo, como el cobarde que siempre fue.

Estaba cansado de muchas cosas en realidad, tenía miedo de que nada volviera a ser como antes, extrañaba el pasado, cuando las cosas eran mejores, todos eran felices la mayor parte del tiempo, sin preocupaciones, cada uno con lo suyo de manera perfectamente equilibrada.

¿Como es posible que todo se volviera un caos en tan poco tiempo? 

O quizás solo eran demasiado ignorantes como para ver el peligro desde que empezó a dar las primeras señales hasta que fue demasiado tarde.

Se sentía débil, casi incapaz de levantarse, pero lo logró, cuando se acercó lentamente a la salida de aquella prisión, cada vez era como si perdiera fuerzas y sus párpados eran pesados. No entendía el porqué pero realmente no podía perder una oportunidad como esta.

Recordaba cuando solía dar giros y giros hasta quedar completamente mareado, era divertido en aquellos tiempos, pero ahora parecía una completa agonía, no lograría llegar, seguro es demasiado tarde. 

Sus latidos se podían sincronizar con el ritmo de un reloj, cada vez más quería rendirse y aceptar su destino, pero aún tenía personas que lo esperan con los brazos abiertos, no podía detener su lucha por alcanzar sus sueños.

Hasta que...

CRACK