CANDICE
No me di cuenta que estaba en la fuente del jardín de mi casa, cuando empecé a recordar la primera vez que vi a Greg. ¡Qué infantil e idiota era! Bueno todavía lo es un poco, lo que me agrada porque siempre me hace reír, me hace olvidar lo malo que pasa a mi alrededor y me hace sentir bien. Pero hoy estaba muy extraño, algo le pasa y lo voy a descubrir, ya que no me quiere contar que es lo que ocurre, yo misma lo averiguaré.
-¿Mamá? ¡Ya llegué!
*You’re gone and I gotta stay high all the time to keep you off my mind oh oh, high, all the time to keep you off my mind oh oh. Spend my days locked in a haze, trying forget you babe I fall back down, gotta stay high all my life to forget I’m missing you*
La canción provenía de la habitación de Juaco. Resonaba fuertemente por toda la casa. Sospecho ya lo que está haciendo, ¡Dios esto es un desastre! Mi hermano cada vez está peor. Sin dudarlo me dirigí hacia su alcoba, corriendo rápidamente por las escaleras para tratar de llegar “antes de tiempo” o en el momento oportuno. Simplemente me rompe el corazón ver a mi hermano actuar de esta manera… aun no lo ha superado, y en realidad no espero que lo haga, lo que amaría y desearía es que buscara otra manera de saborear el dolor para aligerar su ser. No me sorprende que haya asegurado la puerta, la verdad me lo esperaba. Como esto ya ha pasado varias veces antes, me aseguré de sacar duplicado a la llave de su cuarto, no necesité de su autorización porque lo hice a escondidas y la verdad no me importa. Sólo quiero que deje de hacer este tipo de cosas, que lo destruye y destruye a toda la familia.
-Juaco ¡qué demo…!
De todas las cosas que podría haber imaginado sobre lo que hacía Juaco encerrado, con música en alto, esto era lo que no se atravesó por mi cabeza ni por un segundo…
-¡QUE MIERDA CANDICE! ¿QUIÉN TE DIO LA LLAVE DE MI HABITACION?
La chica que estaba desnuda encima de él, sonrojada por la vergüenza buscó refugio para su cuerpo enredándose en las sabanas de mi hermano. Él por su parte, estaba furioso… y ¿Cómo no? Le dañé el polvo… pero diablos cómo iba a saber yo esto. Se supone que el ya no hacía estas cosas. Se supone que él no ha superado la muerte de Estefany. Él nunca había buscado consuelo en el sexo, pero aquí lo veo. Más furioso de lo común.
-Juaco… yo… lo siento… yo pensaba que estabas…
-¿Qué me estaba drogando? ¡Les dije que lo dejé! ¡NO PUEDO CONFIAR EN ESTA PUTA FAMILIA!
-Juaco, no. Sabes que puedes confiar en nosotros es solo que…-me dolía lo que decía y mucho. Lagrimas comenzaron a descender desde mis ojos que me mostraban una imagen borrosa de Juaco.
-No digas más mierdas. Lo único que quieren es encerrarme en ese puto lugar- aventó su reproductor de sonido al suelo y me miraba como nunca lo había hecho… con odio-¡Vámonos Dana! Y te lo advierto de una vez Candice, maldita sea, no te metas más en vida- dicho esto me empujó fuertemente contra la pared y al salir de la habitación con una Dana semidesnuda y súper-asustada, azotó fuertemente la puerta de su habitación.
Todo esto es por mi culpa… ¿a dónde irá? Espero que no haga malo, por favor Dios. Soy una mierda, ¿cómo no puedo ayudarlo? Esta impotencia me mata y me carcome viva cada vez más. Tal vez esto no pasara así si Juaco tuviese una autoridad masculina en casa que infundiera respeto. Mi papá vive con nosotros, pero está casado con su trabajo, con éste es que mantiene una relación. En estos momentos está en una junta fuera de la ciudad y no vuelve sino hasta dentro de 1 semana. ¿Quién lo diría? Una casa tan grande para que solo habiten en ella tres personas regulares. Creo que Gloria es más dueña de esta casa que alguno de nosotros, ella es el ama de casa desde que cumplí los cinco años. Por eso le tenemos un cariño especial y bueno porque también se ha quedado a soportar nuestros dramas familiares y a darnos una voz de aliento. Según lo que me dijo Gloria, mi madre se quedó a dormir en casa de mi abuela ya que ésta se sentía mal. Por ello decidí no contarle lo de Juaco y esperar hasta mañana a una hora prudente a ver si regresa ya calmado, no creo que vaya a estar bien conmigo, pero al menos espero que regrese para no aumentar las preocupaciones de mi madre, que por más Spa y tratamientos que se haga, el daño que sus años les ha traído se refleja en el fino y hermoso rostro de esta frágil mujer.
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¡Tú y tu otro Tú no tan Tú!
ChickLitEsta es la historia de los gemelos Thompson, que por circuntanscias ajenas a su voluntad fueron separados al nacer y dados en adopción a familias muy distintas entre sí. Nicholas y Greg cuando se enteran de la verdad, deciden hacer hasta lo imposibl...