Mi Vecino de al Lado

Cap.2

Leo

Cuando Niki salió del baño envuelta en una toalla, al verla siento la mejillas algo calientes así que rápidamente le doy la espalda para que pueda vestirse.

Ella se aclara la garganta.

–¿Leo?

–Dime– le respondo sin voltear. Somos ese tipo de amigos que no nos importa vestirnos en la misma habitación con la condición de no voltear.

–¿A dónde vamos?

–No se, a dónde nos lleven las piernas– eso la hizo reír un poco.

–En serio, ¿A dónde?

–Ya te dije, no se, tal vez vayamos al cine o a comer algo, con tal de sacarte de aquí.

Después de que Niki se arregló, salimos de la casa camino al centro comercial.

Mientras caminaba junto a ella solo pensaba en lo hermosa que es, ella me hablaba y sentía cosas en mi estómago, era raro pero lindo.

Llegamos, nos dirigimos a una pizzería y ordenamos una pizza de doble queso. Nuestra favorita. Comimos, hablamos, nos reímos, todo normal, hasta que ella empezó a hablar de su "lindo vecino".

–Es que de verdad, es guapísimo– dice toda emocionada–no puedo creer que mi vecino sea así de bello– la miro con cara de cansancio.

–¿Terminaste de hablar de tu lindo vecino?–digo viendo hacia otro lado.

Niki frunce el ceño.

–¿Que pasa, estás celoso?– lo dice de forma burlona.

Bufo.

–¿Celoso, yo?– me señalo – jamás.

Es la verdad, no estoy celoso, no tengo derecho a estarlo, ella es libre de salir con quién sea, con tal de que nadie la lastime, estaré bien.

–Esta bien, te creo– dice terminado de comer su última rebanada.

Después de comer, pago la cuenta y vamos a caminar a las tiendas y pasar el rato.

***

Al llegar a casa, Niki me dice para ver una película, yo accedí, son casi las 8:00pm, le avisé a mamá que me quedaré esta noche con ella.

Estamos viendo "Anabelle", debido a que somos totalmente compatibles, nos gusta el terror por igual, estamos en el sofá de la sala comiendo una bolsa de Doritos extra grande, estoy algo nervioso, debo aceptarlo pero Niki está peor que yo.

Están pasando la escena del sótano (los que hayan visto esta escena saben que da cosita), Niki se me acerca al punto de acurrucarse en mi pecho y mis nervios se incrementan aún más, mi corazón está apunto de explotar.

Ella se separa y se ríe a carcajadas.

–Te va a explotar el corazón Leo, cálmate, es solo una película.

No estoy asustado por la película, si no por lo que he empezado a sentir por tí.

–Pero esa muñeca si es real, la busque en internet– digo dramáticamente apuntado a la tele.

Ella ríe de nuevo y eso me derrite, amo verla reír.

–Creo que mejor vemos otra, ¿si?– dice estirando su brazo para tomar el control remoto y cambiar el canal.

–Veamos algo de comedia.

–Estaba pensando eso, necesito distraer mi mente de esa horrible película.

–Estoy de acuerdo– mientras ella cambia de canal no puedo evitar darle un vistazo de ves en cuando.

Y de pronto se va la luz, causando que Niki salte hacia a mi por el susto.